El deber de todas las cosas es ser
una felicidad;
si no son una felicidad son inútiles
y perjudiciales.
Jorge Luis Borges
1. Maremágnum
de datos
El
desarrollo consiste también en que los profesionales y especialistas en
determinado campo conozcan a cabalidad su área, incluyendo los
adelantos e innovaciones más actuales, hecho que no podría lograrse sin
contar con servicios adecuados de información.
Porque,
hay un estado de información y otro de desinformación, que hace que
quien se encuentren en el primer caso estén, lógicamente, en una
posición cualitativamente distinta y mejor respecto a los que en menor
proporción cuentan con dichos bienes, que pasan de ser materiales a
convertirse en cualidades y como tal en dones. Es por eso importante
contar con servicios funcionales y bien dotados de documentación e
información que en buena cuenta es una cuestión de supervivencia.
Las
condiciones para que el maestro use y aplique información son propicias
y óptimas, porque él es no sólo un adulto alfabetizado o un profesional
cuyo insumo principal de trabajo es el conocimiento, sino que es un
actor social quien ante la avalancha informativa que invade al hombre en
el mundo moderno, tiene la responsabilidad de asumir un nuevo rol cuál
es el de enseñar a su alumnos a cómo conducirse y ser hábil en el manejo
de este maremágnum de datos en que se ha convertido el mundo moderno.
2. Saber
vivo
De
tal modo que el maestro ya no puede ser solamente una fuente o un
transmisor de conocimientos, porque estos roles lo cumplen ahora los
medios, canales y servicios de información, que abundan y proliferan. Y
no puede ni debe competir con ellos, sino más bien su labor es la de
enseñar a sus alumnos a cómo leer esos medios, cómo procesar los datos, a
cómo comportarse ante los entes productores, irradiadores, demandantes;
y finalmente, a cómo resolver el problema de uso u aplicación de la
información recibida.
En
relación a todo esto, es necesario observar que hay una información
sobre la educación, en la cual el tema, asunto y objeto de estudio es la
problemática educativa en sus diversos aspectos, y hay una información
para la educación, es decir aquella que opera, que sirve para el proceso
enseñanza aprendizaje, que sustenta y ampara la acción educativa en sí.
Ahora
bien, sólo estaremos construyendo un saber vivo, actuante, y
transformador si es que la información se transforma en educación; es
decir, cuando vuelve a hacerse experiencia, cuando se recrea en ese acto
simple pero trascendente como es educar.
3. Plena y cabal
evolución
En
países como los nuestros, en donde las condiciones sociales son de una
tremenda complejidad y por lo tanto las características y hábitos de los
usuarios son poco ligados a las prácticas eficientes de acceso a la
información, se hace necesario un extraordinario esfuerzo de
comunicación de experiencias que allanen caminos.
Así
como se hacen indispensables los aportes intelectuales en los centros
de documentación e información para innovar técnicas y medios buscando
el máximo de identificación de la fuente con el usuario, a fin de servir
al desarrollo de sus actividades en el campo de la educación, la
ciencia y la cultura de manera más pertinente.
Porque
el desarrollo de una sociedad se apoya en una dualidad de acción y
pensamiento, de idea y práctica, de recepción y dación, como de
mecanismo y mensaje, cohesionados estos factores por sistemas de
comunicación que se organizan a todo nivel.
Corrientes
e interrelaciones que unen los elementos actuantes, cuyo resultado hace
posible la funcionalidad y proyección de los organismos y el prodigio
de aquello que es tan simple y complejo como es la vida y la comunidad
en plena y cabal evolución.
4. El ejercicio
práctico
Hace
algunos años en una tesis presentada en la Universidad Nacional Mayor
de San Marcos, en la que se analizaba el contenido de los textos
escolares vigentes, se demostró algo que era en cierto modo intuido,
cuál es que la enseñanza del lenguaje en nuestro país tenía un atraso de
50 años en relación al adelanto de la ciencia, en este caso de la
lingüística, cuyos descubrimientos habían innovado totalmente el
contenido de esa especialidad.
Esta
verificación era aplicable a casi la generalidad de asignaturas de
nuestro sistema educativo, actualizándose así la crítica que comparaba
dicha enseñanza como si en los colegios y escuelas en vez de astronomía
se enseñara astrología, que imaginara la Tierra como un disco quieto en
medio del universo, mientras que en otras latitudes de descomponía el
átomo y se enviaban hombres al espacio estelar.
Otra
experiencia, vinculada esta vez al ámbito de las ciencias naturales, es
la referida a los famosos “laboratorios para la enseñanza de las
ciencias” que han sido entre nosotros las adquisiciones más costosas que
se hicieron para tratar de modernizar nuestro sistema educativo en la
enseñanza de dicha línea de acción y cuyo resultado fue ineficaz, entre
otras razones por las dificultades del profesor para manejar dicho
instrumental acostumbrado como está a impartir una enseñanza teórica en
vez de asumir el ejercicio práctico en materias como física y química.
5. Acceso
a los conocimientos
Estos
hechos y otros han evidenciado que el magisterio nacional requiere ser
actualizado constantemente en conocimientos científicos necesarios para
desarrollar adecuadamente su labor.
Sin
embargo, en otros contextos, se utilizan ya computadoras que reemplazan
al pizarrón en el aula de clases y es un hecho real consultar los
fondos bibliográficos y documentales de un centro de información o de
una biblioteca en la pantalla de la computadora o del televisor de
nuestras casas, y que podamos leer el libro electrónicamente mediante
dichos recursos.
Paralela
pues, y en competencia a la acción de la escuela, vemos cada día con
sorpresa y alarma el impacto que ejercen, de un lado los medios de
comunicación, que imparten contenidos informativos en abundancia, con
los ingredientes de entretenimiento y persuasión que los hacen
enormemente sugestivos y frecuentemente con mensajes subliminales
deformantes.
Y,
de otro lado, como un fenómeno que hay que apreciar y reconocer en toda
su dimensión, está el influjo de actividades que utilizan libros,
revistas y materiales audiovisuales, que hacen posible el acceso a los
conocimientos, ofreciéndose incluso como formas alternativas en la
educación de las personas.
6. Crear
conciencia
Frente
al poder de los medios de comunicación y del internet en el mundo
moderno y frente a la presencia de una actividad editorial copiosa y
diversificada que utiliza medios impactantes, caben dos actitudes de
parte del sistema educativo y en concreto de los educadores:
1)
Incorporar dichos elementos enriquecedores a la escuela, con fórmulas
imaginativas y audaces que permitan a la educación formal hacerse más
funcional y moderna.
2)
O, de lo contrario, ceder en algunos aspectos el rol de la educación a
los medios informativos, cuyo predominio dejaría rezagada a la acción de
la escuela.
Cabe también una tercera posición, cual es: cerrar los ojos, esconder la cabeza y esperar la muerte.
Estas
son algunas razones que hacen perentoria la necesidad de crear
conciencia sobre estos factores e implementar servicios de información
en las instituciones educativas, cuya función no sólo sea proveer de
materiales al profesor para el desarrollo adecuado del currículo, sino
que se encarguen además de transferir conocimientos actualizados al
magisterio, generalizando así la práctica de recurrir a la información
para la cultura humana, la vida profesional y la educación permanente,
propiciando el cambio dentro de la continuidad histórica que también es necesario asegurar.
7. O
la vida
Esta
acción, realizada al interior del sistema educativo será aún más
positiva no sólo en relación a lo que ofrece como acervo el mundo
desarrollado, y en lo que se ha denominado “explosión informativa”, sino
que su acción valedera será reunir aportes insospechados que sobre
determinado tema dan personas, grupos y culturas diferentes.
Esa
es nuestra misión fundamental, porque si algo compensa la
unidireccionalidad del desarrollo es el hecho del brote original de
planteamientos e ideas distintas que parten indudablemente de quienes
tienen raíces históricas genuinas y que es el mosaico de pueblos y
culturas que felizmente somos y aún subsistimos, constituyendo el más
preciado tesoro que podemos legar a la civilización.
Los
servicios de información, por eso, además de seleccionar entre lo
abundante, deberán resaltar, ampliar engrandecer lo minúsculo. El
esfuerzo en este sentido es reforzar esta extensa organización que
capta lo que se da en sitios y circunstancias muchas veces ajenas a un
nutrido quehacer intelectual, como es el caso de las provincias del
interior de los diversos países.
Los
fundamentos de esta problemática, en un sentido más amplio, forma parte
de una corriente de pensamiento, de opinión y de un programa de acción
que reclama para el mundo moderno la garantía de un derecho, cuál es el
derecho a la información, tan importante y complementario como el de la
educación, la expresión, o la vida.
*****
Los textos anteriores pueden ser
reproducidos, publicados y difundidos
citando autor y fuente
dsanchezlihon@aol.com
danilosanchezlihon@gmail.com
Obras de Danilo Sánchez Lihón las puede solicitar a:
Editorial San Marcos: ventas@editorialsanmarcos.com
Editorial Papel de Viento: papeldevientoeditores@hotmail.com
Editorial Bruño, Perú: ventas@brunoeditorial.com.pe
Ediciones Capulí: capulivallejoysutierra@gmail.com
Ediciones Altazor: edicionesaltazo@yahoo.es
*****
CONVOCATORIA