EL ARTE EN LA POESÍA ERÓTICA: "AMOR Y PLACER" OBRA DE LA DISTINGUIDA POETISA MEXICANA, MARÍA PAZ - POR LUZ SAMANEZ PAZ, PRESIDENTA DE ASOLAPO INTERNACIONAL

 

EL ARTE EN LA POESÍA ERÓTICA

 "AMOR Y PLACER" OBRA DE LA DISTINGUIDA POETISA MEXICANA, MARÍA PAZ
 

LUZ SAMANEZ PAZ, Presidenta de ASOLAPO Internacional

 

Al internarnos en "AMOR Y PLACER", de MARÍA PAZ, nos encontramos con la transparencia del amor, de los sentimientos puros, con la transparencia de cielos muy altos i azules , con ríos de fuego que abren surcos de pasión entre los cuarzos, con besos de miel, con caricias de rosas, de azahares, de pumas i panteras salvajes,  de gaviotas i lunas enamoradas. Pero también nos encontramos con las olas del deseo i las danzas prohibidas, llenas de erotismo artístico i fino, es decir: al mundo poético que accedemos a través de sus versos.
 
Asimismo, al amor pleno i real. Es un poesía que llena de misterio, fuego i pasión, nos recuerda que somos humanos i que el amor es un arte, un don divino. que es una amalgama de torbellinos i sentimientos, unidos en el cauce de lo erótico. Pero queremos destacar en última instancia , una actitud i un resultado, es una Poesía que se resume, más que una pirueta estilística de la metáfora, en la exposición i descripción lúcida i espontánea, de una materia poética sabiamente elegida i vivida.
 
MARÍA PAZ, se enfrenta al mundo, a la vida i al amor, con una vocación de canto i con la sensibilidad erótica, de los que aún pueden asombrarse i admirar este mundo fascinante del amor, de la pasión, del deseo,  en una sola eclosión del placer i en íntima vibración, descubrimos a través de la lírica de MARÍA PAZ, una calidez humana, de sentimientos a flor de piel, definitivamente en un gesto de verdadero amor, entrega total.
 
Si tuviéramos que ubicar sus poemas en el panorama de la lírica actual, no dudaríamos en afirmar que la autora de estos versos, es la "poetisa del erotismo fino i delicado", porque se interna en la geografía del cuerpo i del alma, del amor volcánico, apasionado, para recrearlo artísticamente.

DESEOS BAJO LA PIEL

MARÍA PAZ
 
El torrente impetuosos del deseo,
ha mojado la piel de nuestros cuerpos,
bañándolos de amor y de locura...
 
Mi perfume,
ha embriagado tus sentidos
y en la apasionada siembra
de tus besos,
ha surcado mi vientre
de rosa y nácar...
y has llegado
hasta los brotes,
erguidos de mi pecho.
 
Me estremecí en tus brazos
cual una mariposa
ardiente, tímida i transparente,
perfumada i sutil,
desnuda i tibia,
que volaba sobre la flor
sedienta del deseo...
 
La gota de agua
transfigurada en lirio,
estremecida de pasión,
en la dulce eclosión
de tu ternura.
 
 Las azucenas del candor
se deshojaron,
con la lluvia salvaje
de tus besos...
 
Desatadas
por la rosa de los vientos,
en suaves torbellinos
de luz y fuego...
que iluminaban
mi cuerpo de Sirena,
en medio
de las impetuosas,
olas del deseo.
 
Enloquecida,
desaté mi cabellera
como un río de seda,
que se enredó entre tus brazos
como una enredadera...
 
Apareció el amor,
como una hoguera inmensa
y acarició la dulce,
diafanidad de mi alma.
 
Luego llegó la noche,
trayendo en sus aromas
instancias de placer...
me acurruqué en tu pecho
y dejé a la deriva,
mi cuerpo ebrio de sed.
 
Los vinos del deseo,
marean mis sentidos
y las brisas del viento,
disipan mi embriaguez
y se prenden las luces,
ardientes del deseo...
 
Cuando la noche llega
cargada de misterios,
te amarro a mi cariño
y en mi vientre se clava ,
con ansiedad profunda
toda la furia encerrada,
en tu ardiente corazón.
 
Mientras las lámparas
de mi ternura,
encienden los deseos
bajo la piel...
 
Y mis pupilas alumbran 
con su fulgor sereno,
estos deseos locos
de fundirme contigo,
en una sola
llamarada delirante,
de la vida o de la muerte.
 

OLEAJES DE LOCURA

 
MARÍA PAZ
 
Deshojas tus besos,
pétalo por pétalo
en la tersura de mi piel.
 
Camina el deseo fugitivo,
sediento de placeres...
que fluyen en los ritos,
de las danzas prohibidas.
 
Mi lengua se entretiene
despertando,
tus dormidas sensaciones
hasta llegar a la plenitud,
de tus instintos...
 
Siento tus manos
apretando mi cintura,
descendiendo poco a poco...
Quieto,
prisionero tú
y yo cautiva.
 
Mi cuerpo en tu cuerpo
rompiendo cadenas,
que excitan, arrebatan...
mis sueños de mariposa.
 
Tocas mis labios
con tu lengua,
y sigues los caminos del deseo
hasta extraviarte,
en mis oleajes de locura.
 
Te adhieres a mi cuerpo
como suplicando
de rodillas,
entrar en el triángulo
del amor y del deseo.
 
¿Cuántas cosas quisieras decirme
ahora que descubres,
el otro lado de la luna?
Quebrando todos los silencios,
cuando me ves
entregada a tus vigilias.
 
Mientras las furias de tus fuegos,
desgarran los velos del destino
y llenan de suspiros rotos,
rumores de junco
y aleteos de paloma,
en hechizos de luna.
 
Déjame mi amor,
habitarte,
con mi melodía de Sirena.
Y ahogar por momentos,
tus gritos, tus suspiros
y emociones...
mientras me lleno
de ti...
 

 
EN LA NOCHE NEGRA

 
MARÍA PAZ
 
Empiezo a buscarte en la noche negra...
cuando los demonios de mi cuerpo,
empiezan a jugar con los rastros de tu sombra...
cuando el humo de mi cigarrillo,
vuela como una mariposa gris
y los girasoles de mis ojos arden,
en la oscuridad de mi alcoba.
 
Empiezo a buscarte en la noche negra...
cuando los deseos hierven en mi sangre,
cuando las voces del tiempo,
dejan sus palabras...
en las páginas de un libro.
 
Empiezo a buscarte en la noche negra..
para que las furias
de tus relámpagos de fuego,
se entierren
en la suavidad de mi vientre.
 

 
 

EL VINO DE MI PIEL

 
MARÍA PAZ
 
 Quiero que bebas,
el vino de mi piel
y que te embriaguez de placer.
 
Quiero que bebas,
la miel de mis labios
y que enloquezcas de amor.
 
Quiero que me hagas vibrar,
de vértigos y furia.
 
Y que se encienda,
el fuego en tu sangre.
 

 
TE ESPERO COMO EL ATISBO DE UNA PANTERA NEGRA
MARÍA PAZ
 
Te espero como el atisbo,
de una pantera negra.
 
Que juega a zarpazos,
tus besos, tus caricias,
en las horas de la madrugada.
 
Te espero en la negrura de la noche,
voluptuosa y caprichosa.
 
Donde las lámparas,
se encienden de placer.
 
Iluminando,
nuestro ensueño de rosa.
 
Mientras la flor de mi boca,
espera impaciente.
 
A que se pose el colibrí de oro,
para libar su elíxir
en sus vuelos de fantasía.
 
Y las palomas de tu desvelo,
se agitan buscando calor
para construir su nido.