BASES DEL CONCURSO LITERARIO 2014
( www.casadelpoeta.com/icp )
El
Instituto de Cultura Peruana, Inc., con sede en
la ciudad de Miami, convoca al XXIII CONCURSO DE
POESÍA Y NARRACIÓN, en homenaje al poeta Carlos Augusto Salaverry.
BASES:
1. Participantes: Hispanohablantes de
cualquier nacionalidad que no hayan obtenido el Primer Premio en
nuestros concursos anteriores.
2. Tema: Libre. Verso: Libre.
3. Extensión: 5 poesías cortas o un relato
a doble espacio en 5 páginas de 8.5” x 11” (4a), que deberán ser enviados en número de
4 copias debidamente ordenadas y agrupadas.
4. Identificación: Los trabajos se
identificarán por su título y un número que se le asignará al momento de su recepción. En el
exterior de un sobre aparte el concursante escribirá el título de su obra, y en su
interior sellará sus datos personales (nombre, dirección, email, teléfono, breve
biografía) y una nota simple certificando que su obra es original e inédita, que no fue presentada a otro concurso
pendiente de resolución, y autorizando su publicación si resulta
premiada. Si participa en ambos géneros (poesía y narración) adjunte su identificación a cada uno.
5. Fecha y lugar de recepción: Los trabajos
participantes se recibirán por correo postal (no email) con franqueo simple hasta
el 25 de junio, en ICP, Ricardo Calderón: 6105 SW
129 PL. 1808. Miami, FL 33183-5252, USA. Correo fuera de USA puede
demorar de 15-20 días.
6. Jurado: El ICP designará oportunamente al
jurado cuyo fallo será inapelable.
7. Premios: Diplomas para los triunfadores
y finalistas otorgados por el Consulado del Perú.
Publicación de los trabajos premiados en nuestra
antología Poetas y Narradores del 2014,
cuya edición del 2013 está a disposición de
los interesados (informes:
Los premios se entregarán a fines de
julio, en fecha y lugar que anunciaremos oportunamente.
CARLOS AUGUSTO SALAVERRY
Carlos Augusto Salaverry Ramírez (Sullana, 4 de diciembre de 1830 - París, 9 de abril de 1891), fue un poeta y dramaturgo peruano, considerado, en el
panorama de la literatura de su país, como el más destacado del Romanticismo, junto con Ricardo Palma. Es muy celebrado por sus
composiciones de carácter íntimo y amatorio, entre las que destaca el poema
titulado “¡Acuérdate de mí!”.
Nació en Piura en 1830. Fue hijo espurio del caudillo
Felipe Santiago Salaverry y de doña Vicenta Ramírez. Su condición de hijo
natural provocó el retraimiento y la melancolía del poeta.
Establecido en Lima, el general
Salaverry trajo a su hijo a esta ciudad para vigilar su formación y ponerlo al
cuidado de su esposa, doña Juana Pérez Infantas.
Derrotado el general por Santa Cruz,
y fusilado en Arequipa, la viuda y sus dos hijos –natural uno, legítimo el otro
– debieron huir a chile para librarse de la persecución de los enemigos de don
Felipe Santiago.
Regresaron al Perú 4 años después. A
la edad de 15 años, Carlos Augusto inicio la carrera militar, en la que
ascendió hasta el grado de teniente coronel. Se casó con Mercedes Felices,
cuando él tenía 20 años.
Fue un matrimonio efímero. Después
amó as Ismena Torres, cuya familia se trasladó a Europa para no verla vinculada
al nombre del poeta. El diario en prosa escrito por Salaverry para registrar
las incidencias de su idilio con Ismena se convirtió después, transpuesto al verso,
en su mejor obra: Cartas a un Ángel.
Fue secretario del presidente Mariano
Ignacio Prado y combatió en la batalla del 2 de mayo de 1866. Se enroló en la
diplomacia, lo cual le permitió visitar Estados unidos, Inglaterra, Francia e
Italia. Estaba en París cuando suprimieron su cargo, y durante 6 años vivió
acosado por los sinsabores. Ya en Lima, fue partidario del presidente García
Calderón.
Marchó nuevamente a París para
contraer matrimonio. Durante su viaje de bodas, en Alemania, lo atacó la parálisis.
Murió en parís en 1891.
OBRAS DE CARLOS AUGUSTO SALAVERRY
- Arturo.
- Atahualpa.
- El Bello Ideal.
- El Amor y el Oro.
- Albores y Destellos.
- Diamantes y Perlas.
- Misterios de la Tumba.
- Cartas a un Ángel.
..........
Característica
de su poesía
Salaverry, desde el punto de vista formal,
fue un poeta respetuoso de las normas clásicas. Sus sonetos son impecables en
su estructura y nada tienen que envidiar a los de Luis de Góngora o los de Francisco de Quevedo. Sus odas mismas nos recuerdan la gallarda inspiración del Divino Herrera. Sin embargo, se puede también reconocer la influencia de Gustavo Adolfo Bécquer en el uso de la rima asonante y la métrica multiforme:
Cuando veas que un ave solitaria
cruza el espacio en moribundo vuelo,
buscando un nido entre la mar y el cielo,
¡Acuérdate de mí!
cruza el espacio en moribundo vuelo,
buscando un nido entre la mar y el cielo,
¡Acuérdate de mí!
Acuérdate de mí
¿Por qué cae de tus ojos esa lágrima,
en las rosas encarnadas del rubor,
desprendida de aquel cielo en que las vírgenes
en las rosas encarnadas del rubor,
desprendida de aquel cielo en que las vírgenes
cubren, tras velo púdico,
el alma del amor?
Capricho
Es en el fondo de su poesía,
predominantemente amorosa, en donde encontramos el romanticismo. Los temas los
halla sucesivamente en el erotismo, el dolor y la angustia. La erótica,
principal tema de sus primeros años, comienza entre candorosa y lozana para
desembocar en el lamento y el desengaño. Su dolor viene cargado de un
filosofismo fatalista:
La humilde flor que el delicado broche
abre bajo el rocío de la noche
y en las tinieblas sus aromas vierte,
seméjase a mi musa desolada
cantando las grandezas de la nada
y el resplandor sombrío de la muerte.
abre bajo el rocío de la noche
y en las tinieblas sus aromas vierte,
seméjase a mi musa desolada
cantando las grandezas de la nada
y el resplandor sombrío de la muerte.
El crítico Antonio Cornejo Polar
interpreta así su poesía:
A partir de una
actitud existencial impregnada de escepticismo (se llama a sí mismo
"triste cortesano de la tumba"), Salaverry entiende el amor como la
búsqueda de una felicidad o imposible o apenas entrevista y perdida de
inmediato. Sin detenerse en el siempre opaco presente, su poesía se desplaza
entre el deseo y la esperanza, pronto frustrados, y el recuerdo,
inevitablemente dolorido. En "Ilusiones" alude a ambos extremos como
"mentiras venideras", y "mentiras del pasado". Para
Salaverry el amor parece oscilar entre la imposibilidad y el fracaso.