ERNESTO KAHAN
y el gran
sueño de la Paz Mundial
LA VERDADERA PAZ
QUE LOS ESCRITORES PODEMOS CONSTRUIR
Por: Samuel Cavero Galimidi,
Presidente la Asociación de Escritores y Artistas del ORBE (AEADO)
E-mail: cavero2012@hotmail.com
1.
Introducción
La motivación
de escribir este ensayo comparado es presentar la biografía de un investigador para
la paz, médico y poeta de gran reconocimiento y prestigio internacional, como es
el caso del Dr. Ernesto Kahan([i]) y de otro pensador
no menos importante, el del académico y pacifista alemán de fama mundial Ekkehart
Krippendorff, de este último siguiendo las líneas de investigación de Francesco Pistolato.
He elegido
la biografía intelectual comparada, de dos seres muy espirituales, de gran mundo,
de dos pensadores académicos, uno argentino-israelí y el otro alemán, como modalidad
de presentación, porque ello permita comprender (y aprehender entre nuestros poetas,
escritores y académicos) el desarrollo del pensamiento de ambos pensadores de talla
mundial, en especial su sapiencia y sus conocimientos nos lleguen a los escritores
y poetas, que anhelamos la paz. Y qué mejor en el caso de Ernesto Kahan, hacerlo
desde su propuesta poética, académica y existencial teniendo en cuenta, en el marco
de un país como es Israel donde él ha vivido muchos años, una nación en permanente
alerta después de haber sufrido la llamada Diáspora Judía, así muchas guerras, hostilizaciones
y permanentes conflictos con el mundo árabe. Pero también reconocemos que Israel
tiene entre sus filas
colonos israelíes ultra-fundamentalistas perpetuadores e instigadores de crímenes
y hay delicados problemas que resolver con los palestinos. Desde esta tribuna condenamos,
pese a ser descendiente de Judíos y amar al pueblo de Israel, los excesos cometidos
por las fuerzas de ocupación israelí en la aldea de Beit Lahiya al noreste de la
Franja Gaza bloqueada, donde continuamente se vienen cometiendo asesinatos y graves
represalias.
Nuestro
homenaje repensando en La Paz que todos queremos, lo hacemos además a través de
una lúcida entrevista que aquí recogemos, de Ernesto Kahan, del mexicano Agustín
Orihuela, de María Eugenia Caseiro
y de Marietta Cuesta Rodríguez, quien no puede
hablar; nosotros hablemos por ella. Y de Alemania, nación ahora gratamente sensible a La Paz acogedora de inmigrantes
desplazados de la guerra, pacifista, recogemos la voz contemporánea, la voz que
se redime después de dos guerras mundiales vividas por los alemanes y toda Europa,
representada por Ekkehart Krippendorff.
En
este artículo se estudian y analizan además las distintas definiciones y categorías
de conflicto de paz, para intentar determinar qué rasgos son comunes a todas ellos.
La globalización y las sociedades complejas hacen que existan distintos niveles
de intensidad en los conflictos y que el rango de situaciones que se producen sea
muy amplio, por lo que es importante intentar encontrar los elementos comunes y
configurar un modelo metodológico que ayude a establecer una aproximación a una
teoría de los conflictos estudiando a estos dos autores en mención: Kahan y Krippendorff.
Además, se propone la relación conflicto-poder
como un elemento clave en el origen de los conflictos, entendiendo el poder como
un potencial humano para hacer algo, para conseguir objetivos específicos e intereses
personales o para superar resistencias, que determinan tanto el surgimiento del
conflicto como el posterior desarrollo del mismo en base a los distintos niveles
de poder de que puedan disponer las distintas partes que interactúan. Por último,
siguiendo el estudio que presentamos de Ekkehart Krippendorff,
gracias a la valiosa investigación del académico Francesco Pistolato, se exponen los métodos más
usuales de gestión de conflictos analizando la dificultad de poder desarrollar una
teoría general de los conflictos que tenga carácter universal y, por tanto, la dificultad
de explicitar un método general de gestionar, transformar y/o resolver los conflictos.
2. Sobre nuestro
Homenajeado Ernesto Kahan, cómo lo define espiritualmente el escritor peruano Samuel
Cavero:
¿En casa (en mi país y en mi ciudad)
siempre los niños, las mujeres y los ancianos me preguntan quién es el Dr. Ernesto
Kahan? Yo,
muy firme en mis convicciones, seguro de lo que digo, les muestro por lo menos su
foto, sonriendo, porque a veces hay que tomar en tiempos de tantas catástrofes,
indiferencia y conflagraciones, mis comentarios (mis humildes modestos comentarios)
con humor, con mucho humor. Entonces, me alzo como un Cóndor y les digo: “Ernesto
Kahan es Inteligencia hidroscópica.
Es un ser humano que viene de la luz
y va a la luz. Tiene la mirada de sanación, seráfica, de total ternura; su sola
mirada es una especie de masaje espiritual, sus palabras una bendición al alma,
con dones académicos, intelectuales y espirituales que se diría que si se hubiese
propuesto ser sacerdote, Dios mío, probablemente El Vaticano podría pensar en crear
una sucursal del Cielo en Buenos Aires. Ya lo tendríamos en el Vaticano, como Papa…
o a punto de serlo. Y claro, qué hermoso sería perpetuar la tradición de tener dos
papas argentinos (o muchos más seguidamente). A veces pienso que de ser así el propio
Vaticano ya hubiese puesto una sucursal del Cielo nada menos que en Buenos Aires”.
Es empresa de los caballeros andantes, decía don Quijote, “deshacer entuertos y socorrer y acudir a los miserables” e imagino a Ernesto Kahan cual hidalgo manchego montado a lomos de Rocinante acometiendo lanza en ristre contra los esbirros de la Guerra y de la Violencia. Imagino al querido poeta Ernesto Kahan hablándonos además de la Biblia y del pueblo escogido, haciendo honor a la procedencia de su apellido hebreo, cual sacerdote a sus peregrinos. Imagino al querido poeta Ernesto Kahan hablándonos además de los animales que nos hacen ensoñar, poetizar, cantarles, y muchas veces parecen más civilizados que los seres humanos. Mahatma Gandhi decía: "Un país, una civilización se puede juzgar por la forma en que trata a sus animales".
"Debo
confesarlo sinceramente. La vista de cualquier animal me regocija al punto y me
ensancha el corazón, sobre todo la de los perros, y luego la de todos los animales
en libertad, aves, insectos, etc. Por el contrario, la vista de los hombres excita
casi siempre en mi una aversión muy señalada, porque con cortas excepciones, me
ofrecen el espectáculo de las deformidades más horrorosas y variadas: fealdad física,
expresión moral de bajas pasiones y de ambición despreciable, síntomas de locura
y perversidades de todas clases y tamaños; en fin, una corrupción sórdida, fruto
y resultado de hábitos degradantes. Por eso me aparto de ellos y huyo a refugiarme
en la naturaleza, feliz al encontrar allí a los brutos".
Como muchos de nosotros seguramente Ernesto Kahan también
ha reflexionado sobre la trascendencia y el poder (en el Mundo Contemporáneo) de
la Divina Palabra, no una sino muchas veces. La Biblia enseña que un día, cuando
el Señor Jesús regrese e instaure su reino en la tierra, ya no habrá más llanto
ni dolor. ¡No habrá más guerra! Hay quienes afirman, desde sus templos, que ese
día vendrá pronto.
Ernesto Kahan sabe que los diferentes gobiernos del
mundo gastan miles de millones de dólares anualmente en armamentos. Pero él como
nosotros poco puede (y podrá) hacer por detener esta carrera armamentista en algunos
continentes y muchos países. Lo imagino a él hablando en los foros internacionales,
hablándonos ya más en confianza a los escritores que hemos gozado de su confianza,
preocupado, ensimismado, preguntándose: ¿Se
imaginan lo que sería de este mundo si esos recursos fueran dirigidos a tratar de
obtener igualdad social, a la construcción de acueductos, puentes, mejores y más
seguras carreteras, mejor educación y alimentación, erradicación de enfermedades,
irrigación…? Amigos y hermanos… ¡La guerra es el infierno en la tierra!
Ahora bien, como paciente a médico, me hubiese gustado
hacerle una consulta, en nombre de mis hermanos escritores peruanos.
“¿De los escritores
peruanos?”
Sí, en efecto,
a estas alturas, qué duda cabe. Lo he comprobado muchas veces.
Ernesto, después de invitarme a ponerme cómodo seguramente
me hubiese dicho: “¡Cuénteme, en qué lo puedo ayudar!”
No se sonrojen, no se avergüencen, como no me avergüenzo
yo en confesarlo. Le hubiese dicho, retomando fuerzas, volviéndome el Alma al cuerpo:
“Intuyo doctor
Kahan que la verdadera paz comienza de nosotros mismos. No puede haber paz en nosotros
si no hemos curado nuestros propios males, nuestras propias enfermedades, nuestra
mezquindades y nuestros propios resentimientos”.
Ernesto Kahan, sonriente, como apurando un diagnóstico
me hubiese preguntado: “¿Pero cuál es su consulta, escritor Cavero?”
Yo, no se sonrían, le hubiese dicho: “Cada vez que voy
a un recital poético o a una presentación de libro, en Lima, se me acercan los escritores,
los poetas, los académicos para conversar. Entonces, estando cara a cara con ellos,
comienza mi tortura. He comprobado que exhalan un tufillo rancio, fecal, a veces
con olor a desagüe. Imagino, querido doctor, que entre nosotros hay muchos seres
irascibles, flemáticos, que además de estar mal de las tripas, perdón: los intestinos,
están mal del hígado. Cuando ellos hablan es imposible mantenerse un minuto más
cerca de ellos, parece que se hubiesen muerto. La última vez, en Viernes Literarios,
cuando varios escritores me hablaron a la vez sentí que estaba dentro de una Sala
de Autopsias”.
Por eso digo mi paz debe comenzar de saber soportar
a mis compatriotas. Y la paz de mis compatriotas intelectuales debe comenzar por
NO CONTAMINAR el AIRE que respira su vecino. También, por hacer un Mea Culpa, lavarse
los dientes, curarse las caries, hacerse
lavativas gástricas, aplicarse purgantes, probar extractos de frutas y verduras,
hacer ayunos, probar con el vegetarianismo, dosificarse con cápsulas de alcachofa, tomar diuréticos para desinflamar el foco contaminante pestífero (QUE ME HACE HUIR DE ELLOS) y evitar
la comida grasosa llamada Chatarra.
3.
Israel, un
país en el Corazón, la Sangre y la Espiritualidad de Ernesto Kahan:
Probablemente el apellido Kahan sea de origen hebreo.
Kahn es un apellido de origen judío-alemán que tiene su raíz en la voz hebrea "Cohen"
que remite al oficio del sacerdocio. Por otra parte, su significado literal en el
contexto alemán es "barco pequeño". Los escritos y la plena identificación
de Ernesto Kahan nos hacen pensar que así sea. Hay pues una comunión espiritual
para los que llevamos esa sangre, la judía. Muchas veces no se necesita gritarse
a los cuatro vientos, es como una logia secreta que nos identifica, nos une, nos
emparenta. Máxime si mi padre es también Médico de profesión y yo intenté ser médico,
hasta obtuve una Beca del INABEC para estudiar Medicina en Argentina y otra en Rusia,
pero mis padres que quería fuese Aviador no me dejaron optar por esa carrera aduciendo
que era de muy largos estudios. ¿Y la literatura
no es lo mismo? Es un oficio y una actividad de permanentes estudios, de nunca acabar,
de prácticamente toda la vida.
Mi abuelo, Moisés Galimidi Susén, padre de mi madre Regina,
también fue judío sefardí, nacido en Istambul, pero una vez que se unificó el Estado
de Israel su familia se fue a residir a Jerusalem y Tel Aviv. El nombre de mis hermanos
y el mío son igualmente bíblicos, en honor a esa vinculación hebrea que tenemos.
Mis hermanos se llaman: Moisés, José, Daniel, Miriam y yo, Samuel. El nombre de
mis tías Rebeca, Esther.
Ahora bien, es interesante escuchar
la voz de Avishai Margalit, profesor de la Escuela de Estudios Históricos
del Institute for Advanced Study, en Princeton, Nueva Jersey, quien sabe que la guerra es la antítesis de la paz, es una tautología.
Él ha analizado durante años el
dilema moral y político de la guerra israelí-palestina desde dos puntos de vista:
primero, como uno de los principales filósofos políticos del mundo, estudiando lo
que es y no es aceptable en tiempos de guerra; y segundo, como miembro prominente
del movimiento Paz Ahora, que ha pensado cómo se puede transmitir el mensaje de
paz a los ciudadanos judíos sin parecer un derrotista.
Dice Margalit, “pero hoy la gente está más interesada
en conocer la respuesta a la pregunta: ‘¿Dónde estabas tú cuando se celebró la primera
manifestación de protesta antiguerra?”
Por lo que respecta a la justificación, Margalit sostiene
que la guerra debe ser un último recurso. A su modo de ver, el gobierno israelí
no agotó todas las demás opciones antes de embarcarse en la operación militar en
Gaza. El llamado al patriotismo y la solidaridad
indiscutidas representa un abrazo de oso para quienes cuestionan los méritos y la
moralidad de la última embestida de Israel contra Gaza.
El gobierno convenció a la ciudadanía de que Israel se
había retirado de la Franja de Gaza a pesar del hecho de que un millón y medio de
personas ha estado viviendo en una cárcel gigante durante años. La experiencia de
Israel en el Líbano debería haberle enseñado la futilidad del concepto de “grabar
con fuego un mensaje en la conciencia” de la población civil por medio de castigos
colectivos que tratan de incitarles a rebelarse contra las fuerzas hostiles a Israel. Resulta difícil suscribirse al credo de la paz cuando
el plañir de las sirenas y el sonido ensordecedor que producen los misiles defensivos
de la Cúpula de Hierro al chocar contra los cohetes entrantes exacerban las emociones
nacionalistas y cuando el juicio racional se moviliza en aras de la guerra y aplasta
toda evaluación razonable de sus repercusiones.
Acerca de la conducta justa o injusta de esta campaña
militar, Margalit considera que ninguna guerra puede librarse sin cometer crímenes
de guerra. A su juicio, el bombardeo israelí de las ciudades junto al Canal de Suez
en la Guerra de Desgaste fue un crimen de guerra, como lo fue el bombardeo británico
de ciudades alemanas durante la Segunda Guerra Mundial, que acabó con la vida de
setecientos mil civiles inocentes.
Margalit se pregunta si uno puede hablar de proporcionalidad
cuando un misil es disparado indiscriminadamente a un denso vecindario residencial
de Gaza en respuesta al disparo indiscriminado de cohetes Qassam a la ciudad israelí
de Sderot. El principio de “ojo por ojo”, dice Margalit, no puede aplicarse a sociedades
como las nuestras, que creen en “un ojo por un diente”.
4.
La Asociación
de Médicos que fue distinguida con el Premio Nobel de la Paz:
La Asociación
Internacional de Médicos para la Prevención de la Guerra Nuclear, AIMPGN (en inglés International
Physicians for the Prevention of Nuclear War, IPPNW) es una organización creada por médicos y organizaciones
médicas soviéticos y estadounidenses en los tiempos de la guerra fría para la prevención
de la guerra nuclear y abolición de las armas nucleares. La AIMPGN, que mereció
el Premio Nobel de la Paz en 1985 y ahora
está presente en más de 60 países, fue fundada en 1980 por
los doctores Bernard Lown (EE. UU.) y Evgueni Chazov (Unión
Soviética).
Los programas y campañas prioritarios de la AIMPGN son
los siguientes:
·
Campaña por un
Mundo Libre de Armas Nucleares
·
Preventiva: Campaña
Internacional para prevenir la violencia con armas menores
·
Investigación,
educación, y defensa de la conexión entre paz y salud.
La AIMPGN se define como una federación independiente
de organizaciones médicas nacionales de 58 países, representando a decenas de miles
de médicos, estudiantes de medicina, trabajadores de la salud y ciudadanos comprometidos
con la meta común de crear un mundo más seguro y pacífico libre de la amenaza de
la aniquilación nuclear.
Prof. Dr. Ernesto Kahan MD MPH
Médico – epidemiólogo - poeta
Universidad Tel Aviv, Israel y Universidad.
Bar Ilan, Israel
Vicepresidente- Academia Mundial Arte y Cultura
Presidente-Médicos Israelíes por la Paz y
la preservación del Ambiente y ex Co – Vicepresidente
de IPPNW
(Org. Recipiendaria del Premio Nobel de Paz 1985)
Vicepresidente de IFLAC (ForumInt. Por la
Literatura y la Cultura de Paz.
Presidente Adjunto Unión Hispanoamericana
de Escritores – UHE
5.
El amor
espiritual en el Poeta y Médico Ernesto
Kahan:
Poema DESPIERTA, es una llamarada de amor
infinito:
¡Ven hacia mí, ahora!
para que saltemos,
tú y yo por encima de mí mismo
y nos llenemos de amor
hasta la aurora.
Poema DOS PINTURAS Y EL DIARIO DE HOY, son
poemas de denuncia social:
¡Mundo sangre!
Persuasiva urbana tinta...
violaciones interminables…
odio, ruindad, ego racista…
Marietta Cuesta Rodríguez, notable poeta
ecuatoriana de gran trayectoria, que lamentamos su partida, al comentar POEMAS DE
PAZ Y GUERRA de Ernesto Kahan, ha dicho:
“Porque la guerra es el veneno de la paz,
porque la guerra no tiene derecho a subsistir, porque los mares sean sin olas furibundas
y sin destinos de submarinos contaminados de químicos que empetrolan las aguas y
los peces. Porque los cielos no se llenen de nubarrones y misiles. Y es que según
Ernesto Kahan, Premio Albert Scheitzer de la Paz 1991, los poetas nos encadenamos
a los sufrimientos que sufren los demás, y nos quemamos el alma, el corazón, sintiendo
infinitamente las sensaciones de dolor y de impotencia, por no poder subsanar la
violencia que surge de continuo entre los hombres y los pueblos. Ernesto en este
poema doloroso y tan real, no puede escaparse de la historia escrita por las generaciones
que pasaron y que giran alrededor nuestro como una presencia obligada de muerte
y desolación, con ese olor a desesperanza, con ese polvo imperceptible de cenizas,
grises rezagos de las confrontaciones belicistas, producto de circunstancias nacidas
por el odio y la incomprensión que intoxican el mundo”.
Este es el poema comentado. Paz… y Guerra…
Por Ernesto Kahan
Laxo, me embarco por los mares
en busca de clarividentes lances,
algo de indagante historia,
la vida, genes del hombre
y más sobre la guerra que lo ultima…
6. Lo que en homenaje
de Ernesto Kahan los escritores del mundo podemos hacer por La Paz a futuro:
Me pregunto: ¿En realidad qué hemos hecho los escritores
del mundo contemporáneo para detener las guerras y conflictos del presente? ¿Qué
sabemos de la Teoría de los Juegos?([ii]) Muchos, en realidad
de esta metodología y aplicación en el mundo no saben posiblemente nada. ¿Qué hicieron
los escritores a lo largo de la historia para detener estos cataclismos propiciados
por las mentes humanas? ¿Qué podremos hacer a futuro y
en corto y mediano plazo? ¿Somos en realidad
los escritores capaces de crear conciencia de paz en el Mundo con nuestra
prédica y nuestra palabra? ¿Nos hemos preparado para ello? ¿Qué hemos hecho, por
ejemplo, por los estudiantes desaparecidos en Iguala, México o en Venezuela, con
la dictadura chavista? ¿Hemos contribuido
con algún granito de arena para que Colombia vuelva a la ansiada paz, que por fin
parece darse después de los acuerdos en Cuba del Presidente de Colombia Juan Manuel
Santos y las FARC? Octavio Paz desde su extraordinaria lucidez nos decía: “Las
masas humanas más peligrosas son aquellas en cuyas venas ha sido inyectado el veneno
del miedo.... del miedo al cambio”.
Hay honrosas excepciones,
claro, voces de iluminados que parecen salidas
de inmortales. Nos predicen que los tiempos malos cambiarán: "Ni los dioses ni los diablos han condenado a Colombia
a pena de violencia perpetua. La violencia tiene causas terrestres, y no es una
fatalidad del destino. Yo amo a ese país, y soy uno de los muchos que queremos dar
fe de la solidaridad que merece ese pueblo y su contagiosa capacidad de belleza
y alegría. Ojalá podamos ayudar a que los
colombianos rompan esas jaulas de la violencia, nacida de la injusticia social,
la impunidad y el miedo, y a pleno pulmón respiren los vientos de libertad que con
tanto sacrificio han ganado. Vuela mi abrazo, desde Montevideo, abril del año 2013,
Eduardo Galeano".
Debemos preguntarnos además:
¿Qué habría sido del mundo si alemanes y
japoneses no son vencidos en la Segunda Guerra Mundial? ¿Qué habría sucedido en
Europa si las huestes islámicas no hubiesen sido detenidas cuando intentaban diseminar
las enseñanzas de Mahoma a través de la invasión y la opresión europea? ¿Qué habría
sucedido si el Sur esclavizador no hubiese sido obligado a aceptar la abolición
de la esclavitud por parte de los ejércitos del Norte, en Estados Unidos? ¿Qué habría
sucedido en el mundo árabe si a Sadam Hussein no se le hubiese puesto en claro el
mensaje de que su agresión contra sus vecinos no sería tolerada? ¿Qué sucederá en
el mundo si Corea del Norte ataca a Corea del Sur?
Recuerdo que hace años,
cuando me hallaba residiendo en Australia, una poeta cusqueña, a quien no conocía
personalmente, me designó vía Internet Embajador Plenipotenciario de la Paz de su
Asociación, nada menos que en la Isla Malta. Yo, entristecido, apenadísimo, no quise
contrariarle a la distinguida poeta por haberme conferido tan Alto Honor, mediterráneo,
la mismísima Orden de Malta Inka, una condecoración inmerecida venida desde el ombligo
de lo que fue el Tawantinsuyo. Tampoco pude decirle que se había equivocado en mi
designación, al irrogarse ella soberanos poderes universales y dictatoriales de
nombrar cual Majestad Real, a sus súbditos
y Representantes en el Mundo, y nunca pude decirle que no es lo mismo vivir en Australia(país-Continente
muy inmenso y cosmopolita) que vivir en el diminuto archipiélago maltés, isla que
no conocía, que hasta la fecha no conozco ni su bandera, tampoco su moneda, nomás
sé que existe La Valeta, su capital, y mal hizo ella por conferirme, erróneamente,
tal distinción. Desde esa vez, corriéndome de la Embajada de Malta, pues no sé qué
haría en una isla tan pequeña, me consuelo bebiendo de vez en cuando algunos vasos
de espumosa cerveza malta Cusqueña.
Por eso, sostengo: Nos
declaramos poetas pacifistas, amantes de la paz, escribimos hermosos versos hablando de la libertad, la paz, el amor, la fraternidad,
la compasión, la solidaridad universal y la justicia, así con pomposos nombres conformamos
Asociaciones vinculantes con la Ecología, la Cultura y la Paz de nuestros pueblos.
Tal es caso de U.M.E.C.E.P, que valoramos sus interesantes esfuerzos y propuestas
y el deseo de abarcar con filiales, pero es básicamente un esfuerzo regional para
fortalecerse desde el periodismo ecológico. Ellos dicen: Promocionar el desarrollo sostenible,
y concienciar sobre las principales temáticas ambientales. ¿Se puede concientizar sobre el cuidado del Medio Ambiente reuniendo firmas y adhiriéndose
a pactos mundiales? Por supuesto que no, el hecho de “concientizar”, de tomar conciencia,
de hacer cambiar de pensamiento a grandes poblaciones, así de motivar conciencia
poblacional por la Ecología, por La Paz, es un trabajo de campo de educadores, de
gestores culturales, de gobiernos regionales, de padres de familia, muy intenso,
sistemático, programado, y demanda muchas cosas más que la representación.
Sabemos que: “La imaginación en libertad
transforma al mundo y hecha a volar las cosas”. Si
hasta gente que poco sabe de estas cosas (o la sabe a medias, eso sí bienintencionada)
nos nombra Embajadores Universales de La Paz, a sabiendas que poco sabemos de Derecho
Internacional humanitario y otros temas relevantes. Igualmente nombran representantes
nacionales y se designan con tal motivo, Embajadores Plenipotenciarios, como si
aquellos hubiesen sido nombrados por un Gobierno, un Jefe de Estado, una Cancillería
de algún Ministerio de Relaciones Exteriores. Pero esto que ya resulta una perogrullada
(un buen gesto, en realidad) no es suficiente, más si nos hemos vuelto volátiles
de las redes como el Internet, pero además: personalistas, frívolos, insensibles,
apáticos. Y hemos demostrado, salvo honrosas excepciones (como las del Dr. Ernesto
Kahan que trabajó incansablemente en esta línea y obtuvo importantes premios por
la paz), que no interactuamos eficazmente
para resolver en el mundo ningún conflicto, menos los domésticos, los nuestros.
Además él,
por su formación espiritual, por haber vivido
entre varios continentes, cotejando muchas realidades, sabe que el amor es también
oración, respeto, seguimiento. Es entrega absoluta y desinteresada por las creencias
heredades o adoptadas por propia voluntad.
Para Ernesto Kahan el amor es naturaleza que se expande,
que se recrea a sí misma cada día para ser integración en el Amor de nuestro Divino Creador. Él sabe, como
Benjamin Franklin, que “nunca ha habido una buena guerra, ni una mala paz”. Y con
su sola mirada (y sus versos, que es una invitación a la reflexión) él desde donde
está sabe que el Amor (lo pongo con mayúscula, personificándola) es energía libre
y como tal, nada ni nadie puede ejercer sobre ella, tampoco pueden ocultarla o destruirla.
Ernesto, el hombre golpeado por la vida, redimido por
su capacidad de lucha y por sus valores, reconocido mundialmente, sabe que ella
es eterna, navegante del cosmos, no conoce límites, ni ideologías, ni diferencias,
en ella no existe la dualidad, no puede ser reemplazada. Para él: El amor es Amor.
“Si en medio de las adversidades persevera el corazón
con serenidad, con gozo y con paz, esto es amor”, nos dice: Santa Teresa de Jesús
Mientras tanto el poeta Ernesto Kahan, ya sabemos, por decisión propia va despidiéndose
de algunos circuitos oficiales. ¿Es el otoño de la vida? En el fondo nos cuesta
pensar que esto es así, que para él no habrá invierno literario, con cierta candidez algunos, como yo, lo imaginábamos eterno. Mientras
tanto: ¡Aquí todo sigue igual! Es más, todo lo que hacemos y en todo lo que participamos no es sino una caricatura (gozosa mascarada propiciada por
las redes sociales) de lo que en el fondo se deberíamos hacer por la paz. Pero no
solamente la paz, pues no se puede aceptar un escritor, un poeta, que no asuma una
real conciencia por la defensa del Medio Ambiente, la Ecología y no muestre su preocupación
por el Cambio Climático Mundial.
Me pregunto: Ernesto Kahan, siendo como es, un talentoso
y singular Ángel, por qué no nos dice: “¡Quítense la careta de la mediocridad, de
la desesperanza y la indiferencia, hermanos míos! ¡Vamos a trabajar todos, todos
los escritores por La Paz! ¡Trabajemos por todos estos problemas! ¡Seamos participativos”
Si seguimos así poco podremos hacer para
que estos se reduzcan o se transformen en oportunidades de mejorar. La comprensión
de los conflictos exige construir una Conflictología (Resolución de Conflictos y
Mediación) desde los Escritores, a través de nuestra activa participación en Congresos,
Encuentros y Foros Internacionales propiciados con este único fin. La Paz, capacitada para entender el origen y las
causas de los conflictos, su evolución y comportamiento. Para ello no podremos desdeñar
ninguna aportación racional, científica o de cualquier otra índole del conocimiento
humano, ya sea intuitiva o emocional.
Si no es así, queridos amigos, convocándonos, fomentando
una Cultura de Paz más allá de nuestros escritos y pensamientos, no podremos nunca detener ningún conflicto de
magnas dimensiones sociopolíticas, tampoco podremos dejarnos sentir como seres mediadores
o de influencia para solucionar estos conflictos. Es verdad que no somos una fuerza
global cohesionada, pero si nos proponemos podemos serlo. Los conflictos están presentes constantemente
en la vida humana, tanto individual como colectivamente. Pero si los escritores y poetas siempre nos hemos caracterizado
por ser desunidos y pelearnos entre nosotros mismos, hasta por cosas más banales.
¿Cómo, entonces? Sin embargo, seguramente nos diría Ernesto Kahan, tan seguro de
sus convicciones pacifistas, consolándonos, pidiéndonos como el poeta chileno Alfred
Asis seguramente lo haría, convocando una vez más a una Antología que hablemos de
“la paz”, que sigamos escribiendo más poemas, mientras vivimos en un mundo donde
la violencia en todas sus formas aumenta a niveles escandalosos en vez de disminuir. ¡Entonces, cómo no participar!
Una parte importante de la actividad económica
no respeta ninguno de los principios básicos expresados por las morales religiosas,
ni por las declaraciones éticas resumidas en la Declaración Universal de los Derechos
Humanos que la mayoría de gobiernos del mundo suscriben. La sistemática destrucción
del hábitat humano, la contaminación generalizada de los elementos fundamentales
que sustentan la vida como el agua, la tierra o el aire con el único objetivo de
obtener beneficios comerciales rápidos, fáciles y para unos pocos, genera niveles
de inseguridad y enfermedad que hacen que una parte importante de la actividad económica
y productiva sea cómplice de la desgracia humana. Así pues, la noción de conflicto
corre paralela a la de crimen, la forma silenciosa de hacer la guerra. También podríamos
calificar de actividades criminales conflictivas aquellas que llevan a cabo determinadas
industrias farmacéuticas que procuran que algunos de sus medicamentos cronifican
enfermedades y eviten la curación de enfermos, cosa que, evidentemente, redundaría
en una pérdida de beneficios comerciales. También lo es la violencia doméstica,
el maltrato psicológico y la crueldad con niños y niñas, ancianos, mujeres, hombres
y personas con limitaciones físicas o psicológicas,... Y todo ello obedece a pautas
y comportamientos que necesitamos saber explicar, analizar y prever acciones de
remedio.
El castigo resuelve muy pocos comportamientos
que están profundamente enraizados en las emociones humanas y en las políticas sociales.
Tampoco podemos olvidar que en ocasiones, la Administración de Justicia se utiliza
como sistema de venganza, con la finalidad de reprimir la libertad personal y de
reducir o reprimir a las minorías sociales o nacionales. Tampoco podemos olvidar
ciertas ideologías y colectivos que diseminan a través de los medios de comunicación
social el miedo, el odio y la inseguridad con la finalidad de conseguir la sumisión,
la represión y la manipulación. En ocasiones, el sistema judicial se transforma
en una práctica de violencia legalizada destinada a producir perjuicios, limitar
la libertad o impedir la participación democrática más que hacer Justicia y resolver
conflictos.
Nuestras sociedades, amigos escritores y
artistas, suelen contener actitudes y comportamientos violentos que se expresan
de maneras diversas: limitar la libertad, engañar, difundir rumores con la finalidad
de perjudicar y, evidentemente, golpear, reprimir, perjudicar, son maneras de ejercer
violencia. Normalmente, la manera de proceder frente a la violencia acostumbra a
consistir en reacciones igualmente violentas con la finalidad de dominar, reducir
o eliminar aquella persona o entidad que nos agrede.
Sin embargo, frente a la violencia, lo importante
no solo es acusar, juzgar y condenar a quienes la practican que, seguramente, somos
todos, en una u otra medida. Pues hay
muchas formas de propiciar la violencia. Lo importante será procurar evitarla, encontrar
otras maneras de relacionarse, de solucionar los problemas, hacer justicia y, previamente,
tratar de entender -que no quiere decir estar de acuerdo- las razones de la violencia
y del conflicto, única manera de poder actuar de manera eficaz en la desactivación
de la violencia.
Lo que realmente importa no es tanto estar
de acuerdo, sino aprender (todos) a convivir incluso en el desacuerdo. Los acuerdos
son elementos temporales, metodológicos. Para muchos, la violencia se combate con
más violencia, con lo cual se está contribuyendo a que la violencia no se acabe
nunca. Normalmente, las agresiones y actos de violencia entre marido y mujer, en
nuestra cultural actual, son calificados de violencia machista y la respuesta suele
ser mediante la fuerza judicial, más que con procesos para resolver el conflicto
fundamentado en el conocimiento científico sobre la violencia y el conflicto de
manera pluridisciplinaria
Vivimos, recordémoslo, en un mundo donde los países más pobres toman
préstamos de los países más ricos, los políticos de estos países más pobres, en
vez de cuidar con celo estos recursos prestados, se roban la mitad o más de dichos
recursos, con lo poco que dejan, construyen obras con los materiales más baratos,
a menudo hacen obras contrarias a las necesidades sociales, simplemente porque éstas
quizás proporcionan mayores beneficios.
Este círculo vicioso, acompañado por la gula insaciable
de las sociedades más ricas, nos muestra que el mal en el corazón del hombre es
en realidad el verdadero responsable de la situación de miseria por la que están
pasando muchas sociedades. ¿Nuestra palabra escrita y nuestras invocaciones como
intelectuales, como escritores y artistas, podrán hacer algo a futuro para detener
la guerra?
7.
Cómo define a
Ernesto Kahan espiritualmente Agustín Orihuela:
En el mes de noviembre de
2014, nos dice Agustín Orihuela([iii]), viajé a Israel para
asistir a un curso en el Galilee International Managemet
Institute. Entre los profesores se encontraba el doctor Ernesto Kahan,
quien recibió el premio Nobel de la Paz en 1985, como delegado de la Asociación
Internacional de Médicos para la Prevención de la Guerra Nuclear (IPPNW). El doctor
Kahan nació en Argentina en 1940 y emigró a Israel durante el golpe militar en su
país de origen. Es profesor emérito en la Facultad de Medicina de la Universidad
de Tel Aviv, vicepresidente primero de la Asociación Mundial por la Armonía Global
y presidente de la asociación ISRAEL IPPNW.
Nos dice, con mucha razón
Agustín Orihuela: Además de médico, académico y promotor de la paz, el doctor Kahan
es poeta, y por su obra literaria tiene diversos reconocimientos: es académico de
honor por la Academia Internacional de Ciencias, Tecnología, Educación y Humanidades,
vicepresidente primero de la Academia Mundial de Arte y Cultura (Congreso Mundial
de Poetas), presidente honorario de la Asociación Israelí de Escritores en Lengua
Castellana, vicepresidente del Foro Internacional para la Literatura y la Cultura
de Paz y presidente ejecutivo colegiado de la Unión Hispanoamericana de Escritores.
Muy rápido, su sencillez,
carisma y conocimientos atraparon la atención de su auditorio. Descubrí en sus libros
de poesía: Paxaporte y Ante-Réquiem y En camino,
a un poeta renovado con un espíritu pleno de inclinaciones por la humanidad.
¿Cómo fue su infancia y su acercamiento con la literatura?
Mi infancia, en un pueblo
rural de la Patagonia Argentina, estuvo empapada por la intelectualidad de mis padres.
La biblioteca de la casa estaba atiborrada de libros de filosofía de mi padre, quien
era médico, y de novelas y poemarios de mi madre, quien fue poeta y pintora.
En sus poemarios existe una espiritualidad cargada de imágenes en las que
el horror, la autodestrucción y también la esperanza están presentes. ¿Cuáles son
las obsesiones literarias de Ernesto Kahan?
No tengo obsesiones literarias,
simplemente soy muy sensible al dolor humano, la injusticia y la perspectiva histórica
en irradiación hacia el futuro de la humanidad.
La identidad cultural se transmite a través de las generaciones. En su caso,
como miembro de una generación de escritores nacidos en los años cuarenta del siglo
pasado, ¿con qué autores o corrientes literarias se identifica?
Obviamente uno va cambiando
a lo largo de la vida y las circunstancias que lo rodean. Me identifiqué mucho con
los escritores latinoamericanos que continuaron
la llamada Generación de Mayo en Argentina (Echeverría, Mármol…), los poetas del
llamado Harlem Renaissance antirracistas como Langston Hughes, en
EE. UU., y Lorca y la conocida como la Generación del 27. Posiblemente el poeta
que más influyó mis comienzos, y sigue haciéndolo hoy día, es Walt Whitman. Ahora,
a medida que voy respondiéndole, van surgiendo más y más nombres de escritores y
poetas. No quiero dejar de mencionar en esa lista a la poesía del Popol Vuh, el
libro de la creación del pueblo Maya.
Ante-Réquiem y En camino está escrito con una compleja estructura compuesta de coros. ¿Cómo fue el
proceso de construcción de esta obra?
Entiendo que su pregunta está
más dirigida a la forma que al contenido humanista y ecológico de esta obra, que
en mi opinión y la de muchos expertos, es de lo mejor que he escrito. Pues bien,
su estructura tiene mucha similitud con otros réquiems, y muy especialmente con
los de Verdi y Mozart.
Estamos viviendo un período
histórico en el que se necesita compromiso y educación por la tolerancia para salvar
los aspectos positivos de la civilización y trabajar por el progreso social en libertad,
paz y armonía.
En el 2014 escribí que “debemos actuar para que la palabra tenga la fuerza necesaria para
reemplazar a la ira. Ella es la base del diálogo democrático y de la enseñanza para
cambiar actitudes violentas y ciegas, como el odio racista, la violencia de género
o religiosa y la intolerancia política o de clase social. Cuando la palabra no tiene
libertad o es ineficiente, deviene la ira.”
Ernesto Kahan es un reconocido médico y un apasionado
defensor de la paz mundial. ¿Cómo combina sus actividades médicas con la poesía?
Escribí en el 2008 que “el médico debe ser humanista y promover el humanismo([iv]). Debe amar profunda
y generosamente a los pacientes individuales y a la población de todos los pueblos,
etnias, sexos, razas, creencias y condición social. Debe amar y respetar el cuerpo
humano sano y enfermo. Debe preguntarse todos los días por sus conocimientos y aprender.
Debe preguntarse todos los días por lo que sienten sus pacientes y aprender. Debe
preguntarse todos los días cuáles son los peligros que acechan a sus pacientes y
a la humanidad. Debe participar responsablemente, tanto ética como socialmente,
y generar diálogos y propuestas para una humanidad con vida digna y segura. El enfoque
es antropocéntrico.” ¿Cómo no habría entonces de combinar
la poesía con la medicina?
Agustín Orihuela: Entrevista con Ernesto Kahan: un poeta universal.
Fuente:
Nocturnario es una revista electrónica trimestral de creación literaria,
fundada en 2012 por egresados del Centro de Creación Literaria Xavier
Villaurrutia (CCLXV) Agustín Orihuela: Es narrador. Internacionalista por El
Colegio de México y maestro en políticas públicas por el ITESM. Estudió en el
Laboratorio de Novela con Celso Santajuliana y el Diplomado en Creación
Literaria en el INBA.
8.
Las naciones
cambian en sus Procesos Sociales:
Según el destacado
investigador y académico Francesco Pistolato([v]) que me inspiró
gran parte de las reflexiones acerca de Ekkehart Krippendorff, debemos tener en cuenta que las naciones cambian
en sus procesos sociales. Recordemos lo que pasó antes con Rusia y lo que hoy pasa
con Cuba, que hoy reclama el fin del embargo norteamericano. Alemania, por ejemplo, en tan sólo una generación ha pasado de ser la
nación más belicosa a la más pacifista de Europa. Esta Europa, recordemos, ha vivido varios siglos sin parar de hacer guerras,
conquistando pueblos y destruyéndolos muchas veces. Basta leer los libros de Alejandro
Dumas, León Tolstói o a Victor Hugo, para comprobar la historia absolutista de Europa.
De esta generación, la de los nacidos bajo el nacionalsocialismo, Ekkehart Krippendorff
es uno de los pensadores más influyentes en el movimiento por la paz. Además, su
enfoque es absolutamente original y asombrosamente culto, lo que, junto a un estilo
elegante e incisivo, confiere un atractivo peculiar a sus escritos. Según su concepto
de la cultura de paz, la estética se une a la ética para fomentar la libertad y
el desarrollo individual y colectivo. Ekkehart Krippendorff piensa que muchos conflictos tienen su origen en la manera de pensar, en mitos y certezas
construidos mentalmente por impulso del miedo. Y no le faltan razones. Está en la
mente y los corazones de las personas donde reside la programación que nos llevará
a vivir de una manera u otra, a vivir en estado de guerra permanente o de manera
pacífica y serena
9.
La formación de Ekkehart Krippendorff, según Francesco Pistolato:
Ekkehart Krippendorff
nació el 22 de marzo de 1934 en Eisenach, la ciudad de Martin Lutero y de Bach.
El nazismo había llegado al poder en 1933, un año antes de su nacimiento. Su educación
inicial fue esencialmente nazi y, en consecuencia, compartió el espíritu bélico
de toda la nación. Acabada la guerra, los alemanes estaban cansados de todo cuanto
tuviera que ver con los conflictos armados. Cuando en 1956 el canciller Adenauer,
el Zorro, consiguió reconstituir el ejército con una astuta maniobra
en contra de la voluntad de la mayoría de los alemanes y de las protestas de la
SPD, el partido socialdemócrata de la oposición, Ekkehart Krippendorff todavía no
había desarrollado una conciencia suficiente del rol del ejército como para involucrarse
personalmente en las protestas contra el rearme alemán. Sin embargo, su postura
política estaba ya en vías de maduración. Para alejarse de casa, decidió estudiar
en el Friburgo alemán. Fue allí que, como estudiante entusiasta de Germanística,
descubrió las ciencias políticas con Arnold Bergstraesser (1896-1964). Se trataba
de una disciplina nueva en Alemania, que el cultísimo docente presentaba desde una
óptica a la vez filosófica y literaria, característica que se encontrará de forma
magistral en el Krippendorff de la madurez. En los dos años que vivió en Friburgo
(1954-56) estudió con gran entusiasmo,([vi]) motivado por
la calidad de la enseñanza y las perspectivas que en aquella época de posguerra
se abrían para todos y, particularmente, para los jóvenes talentos. El hecho de
que muchos profesores de aquella época fuesen ex nazis o ex Mitläufer, oportunistas
que se habían alineado al régimen, no preocupaba a los estudiantes, quienes ni siquiera
se interrogaban sobre el pasado de sus docentes.
Después de Friburgo
y aconsejado por Bergstraesser, quien había sentenciado: “Usted va a estudiar ciencia
política”, Krippendorff se trasladó a Tubinga, en la histórica región de Suabia,
para estudiar un enfoque diferente de la disciplina, el de Theodor Eschenburg (1904-1999).
Alejado del vuelo pindárico, Eschenburg tenía una visión pragmática de la política,
con preguntas del tipo: “¿Quién ha decidido qué vendedor de pescado puede estar
en la sombra del mercado, mientras que otro tiene que quedarse bajo el sol?” (Krippendorff,
2007: 88). Para Ekkehart Krippendorff el cambio significó una ducha fría y muy
saludable: pensamiento sofisticado, visión elevada por un lado, enfoque concreto
por el otro, en un equilibrio que habrá de enriquecer su espíritu radical.
En Tubinga, donde
en 1959 obtuvo su doctorado, Krippendorff tuvo su primer contacto con el marxismo,
que en aquel tiempo era muy estudiado en Alemania del Oeste con el propósito de
alejar a los jóvenes de la tentación de caer en él. En el caso de Ekkehart Krippendorff,
la estrategia no funcionó: la visión crítica del socialismo no le impidió inspirarse
en las ideas marxistas de justicia social. En verdad, Krippendorff desarrollará
a lo largo de los años un interés particular por la figura, al mismo tiempo relevante
intelectualmente y muy humana, de Rosa Luxemburg, quien, en contraposición a Lenin
y a Trotsky, estaba convencida de que el socialismo tenía que ser construido poco
a poco y no impuesto por la fuerza (Krippendorff, 1985: 13).
Recordemos el Muro de Berlín. En aquellos años,
el debate político en la República Federal Alemana estaba dominado por la división
de Alemania, considerada la clave para comprender las relaciones internacionales,
visión que Krippendorff reconocerá como provinciana después de llegar a los EE.UU.,
con una beca en 1960.
Existe una línea
de predeterminación simbiótica entre lo militar y lo político que empieza ya con
la conquista de Florida en 1818, prosigue con las expediciones de la mitad del siglo
XIX en el Pacífico y en Asia, con las dos guerras mundiales y con las guerras del
sudeste asiático. La misma Segunda Guerra Mundial, presentada y recordada como la
lucha contra las dictaduras, fue para los estadounidenses principalmente una guerra
contra Japón, y no sólo como venganza por Pearl Harbor.
En 1970, año de
la publicación de Die amerikanische Strategie, los EEUU ya habían combatido
en 160 guerras y sin embargo creían haber participado sólo en 5 y, además, obligados
por el enemigo. Un caso llamativo de conciencia retorcida. Como siempre, el trabajo de Ekkehart Krippendorff
es científicamente inatacable: los datos son ciertos, las deducciones rigurosas.
El libro Die amerikanische Strategie se basa por completo en documentos oficiales
estadounidenses que desmienten toda una mitología de propaganda de libertad y respeto
a los derechos humanos. La historia de los últimos 40 años - basta pensar en la
presidencia de Bush Jr. y en el increíble número de bases militares de los EEUU
hoy presentes en el mundo - ha confirmado las afirmaciones sobre la política estadounidense
de los primeros trabajos de Krippendorff.
A lo largo de
toda la década de los sesenta y hasta el comienzo de la década de los setenta, los
escritos y el compromiso de Krippendorff como activista político le granjean ataques
académicos y políticos de todo tipo, de los cuales el episodio de Constanza no es
más que un ejemplo.
Los problemas
de Ekkehart Krippendorff con el establishment([vii]) se ponen de manifiesto
en la paranoia política de los países occidentales en la segunda posguerra, pero
no afectan el rigor de su producción científica. En el periodo comprendido entre
el final de la década de los sesenta y el comienzo de la década de los setenta destacan
dos publicaciones: la antología Friedensforschung (Investigación para
la paz) (Krippendorff, 1968)([viii]) y el ya nombrado
“Zum Imperialismus-Begriff” (Krippendorff, 1972: 177-203) de 1970, publicado en
1972. Presentando su antología Friedensforschung, Krippendorff no va más
allá del concepto de paz como ausencia de guerra (Krippendorff, 1968: 13-23)([ix]) y básicamente
considera la investigación para alcanzar la paz a nivel macro, según su propia formación
intelectual de especialista en relaciones internacionales. En esa época, su más
llamativa contribución a los nuevos estudios interdisciplinarios de paz consiste
en su actitud rigurosamente científica, anticonformista y crítica en cuanto experto
de política internacional. En síntesis:
“La No Violencia no es pasividad, ni condescendencia ni una utopía. La utopía es,
justamente, creer después de siglos de historia de la Humanidad, que con violencia
se resuelven los conflictos y se consiguen niveles de seguridad para poder vivir
en libertad y con justicia”([x]).
10.
Los difíciles
años ochenta:
El 12 de diciembre
de 1979, la OTAN propone al Pacto de Varsovia la limitación de los misiles atómicos
de medio alcance: soviéticos y estadounidenses. En caso contrario, la OTAN instalaría
misiles de última generación (Pershing II y Cruise) en la Europa del Oeste. Dos
semanas después, la URSS invade Afganistán. En muchos países, incluso en el este,
hay manifestaciones pacifistas. Frente a la posibilidad de una guerra nuclear en
el mundo el movimiento pacifista en los años ochenta([xi]) organiza grandes
manifestaciones en Alemania, por ejemplo (10.10.81, 10.6.82, 22.10.83, 11.10.86),
recoge (1980-83) cuatro millones de firmas para pedir al gobierno que no acepte
la instalación de los misiles y protesta durante años con sentadas permanentes en
Mutlangen, donde a pesar de las manifestaciones y de esta petición se habían instalado
los misiles. El movimiento se desarrollaba en un país en el que, desde 1971, la
investigación para la paz estaba financiada con fondos públicos. Por ello, existía
un contexto idóneo donde los temas de actualidad podían ser debatidos y de hecho
lo eran, en muchas publicaciones, artículos y ponencias.
Quizás el tema
central del debate sea el desarme unilateral. Krippendorff elabora sus reflexiones
respecto a ello en su ensayo “Füreinseitige Abrüstung” (En favor del desarme unilateral)
(Krippendorff, 1993a: 159-180). “Lo fácil, que es difícil hacer”: Krippendorff,
citando a Bertolt Brecht, se refiere a “una Realpolitik necesaria y factible”,
una terapia radical para una enfermedad social: los armamentos. Éstos y la estructura
sobre la que descansan: el ejército, están interconectados con el Estado, como explica
en su obra Staatund Krieg (El Estado y la guerra) (Krippendorff, 1985). ([xii])http://www.ugr.es/~revpaz/articulos/Ekkehart
Krippendorff.html - _ftn11 Como ya se ha
demostrado, no sólo la preparación de la guerra no ayuda a la paz, sino que la existencia
de alianzas entre países aumenta la probabilidad de la guerra. Los armamentos significan
preparación para la guerra; otra argumentación es hipócrita. En el origen de la
carrera armamentística hay una paranoia: nuestros vecinos están preparando una invasión.
Para demostrar esa locura, Krippendorff la compara con el caso de cualquier político
(en un país occidental en paz) que, frente a la posibilidad abstracta de ser asesinado
por algún adversario, siempre vive con miedo y toma medidas para defenderse constantemente.
Además, el hecho de que haya una tradición armamentística cada vez más sofisticada
no implica que no se pueda acabar con ellos. Y sobre todo:
El aparato militar
es como una bomba a punto de estallar, y por ello tiene que ser desactivada lo más
pronto posible. ¿Es esto una utopía? Más utópica (y al mismo tiempo nada amable)
es la hipótesis de que se pueda… impedir la guerra preparándola de forma cada vez
más intensa. Utópico y desmentido por toda la historia moderna es también el hecho
de que las guerras se impiden con la carrera armamentística. A lo mejor… se retrasan…
Nuestra competencia histórica es la de acabar con esta historia: atacar de raíz
el peligro de la guerra. La raíz de la guerra es el aparato militar… (Krippendorff,
1993a: 167).
Lo que los ciudadanos
tienen que comprender es que evitar la guerra no es el fin prioritario de los gobiernos,
como queda patente en el conflicto armado de las islas Malvinas/Falklands, iniciado
por un principio -más que discutible- de soberanía territorial.([xiii])
Entonces, ¿qué
hacer? La propuesta de Krippendorff no es la abolición de toda clase de armas, sino
de los grandes armamentos y, sobre todo, de las armas atómicas. El primer resultado
de esta iniciativa sería la eliminación del falso dilema de la seguridad, que como
queda demostrado no es tal en el caso de los misiles. Además, esta iniciativa, para
que sea efectiva, tiene que ser unilateral: condicionarla a priori a la reciprocidad
significa no tomarla en serio, sino hacer propaganda. La gran excusa para la carrera
armamentística se basa en el hecho de que la otra parte se está rearmando. Si una
parte acaba de hacerlo y empieza el proceso contrario, la otra no puede continuar
basándose en esta justificación.
Todo el rearme
en el oeste y en el este está justificado por la misma razón. Y es hipócrita, o
por lo menos contradictorio, decir por un lado, que no se tienen intenciones agresivas
y, al mismo tiempo, alcanzar diálogos para un desarme recíproco, reconociendo que
el miedo de la otra parte está justificado. De hecho, por un lado, se atribuye siempre
a los demás malos propósitos y, por el otro, indirectamente se admite que nosotros
también los tenemos. ¿Qué lógica es ésta?
Todo el tema del
rearme, del equilibrio del terror no tiene sentido, es enormemente peligroso y la
probabilidad de que tarde o temprano estas armas terribles puedan ser utilizadas,
con la destrucción del territorio de la RFA, es suficientemente alta como para justificar
su eliminación. Y el rearme además está en contra de la Ley Fundamental.([xiv]) La verdadera
causa de toda esta insania es la competitividad entre los Estados, que les obliga
a dejar que los demás den el primer paso y suponer que el otro tiene malas intenciones.
Es una actitud mental perversa, y la perversidad tiene otras caras.
El antimilitarismo
del autor sigue articulándose en la década de los ochenta de forma siempre muy incisiva,
con la intención de contribuir a una mayor conciencia en el movimiento por la paz.
En “Die Friedensbewegungkannnicht Friedensbewegungbleiben – odersieistauch das nichtmehr”
(El movimiento por la paz no puede permanecer como movimiento para la paz, de lo
contrario desaparece) (Krippendorff, 1983). Krippendorff intenta explicar que los
poderosos tienen intereses diferentes de los de los ciudadanos. Mientras que éstos
quieren vivir en paz y disfrutar de su propia vida, para los gobernantes de un Estado
lo más importante es ser parte del juego en la política internacional, que además
es lo único que les permite entrar en la Historia. Y por ello necesitan guerras,
como demuestra la experiencia a lo largo del tiempo. Bismarck, Federico II de Prusia,
Thatcher, Reagan y demás políticos, todos ellos saben dónde se cosechan los laureles.
Por eso la política exterior y la militar son parte de los arcana imperii,
algo en lo cual los ciudadanos no pueden entrometerse. Si los políticos se lo permitieran,
si acogieran la petición del movimiento por la paz, sería el final para ellos. Mostrar
debilidad, mostrar que tal vez las personas comunes saben algo más que ellos, sería
terrible. Así, los políticos hablan de realismo frente a las visiones utópicas de
los pacifistas. El movimiento por la paz de los años ochenta cree concentrarse en
un aspecto importante: la instalación de los misiles y, en consecuencia, cree pedir
lo justo y lo razonable, pero el instinto de supervivencia advierte a los políticos
de que en dicho movimiento hay un potencial subversivo de la lógica del poder. Y
esto es verdad, porque: 1) el pacifismo reclama participar en el tema de la “seguridad”,
algo que siempre se ha presentado como “técnico”, como para “expertos”, es decir,
para los militares; 2) la experiencia histórica muestra que para ser tomado en serio
a escala internacional se debe ser militarmente poderoso: un Estado “no existe”
si no es fuerte y no puede amenazar con intervenciones bélicas; por ello 3) el aparato
militar no es una institución del Estado, es el Estado; en consecuencia 4) criticar
al militar significa criticar al Estado y 5) el pacifismo activo es enemigo del
Estado porque lo ataca en su raíz. Pero el
movimiento pacifista moderno no es activo, es reactivo: reacciona a una decisión
e intenta curar el síntoma, no el mal, se opone a los misiles, no al aparato militar
y al Estado. Si el movimiento no comprende que el mal es el militar y no se convierte
en antimilitarista, no tiene futuro.
Debemos decir
que la llamada “modernidad” se estructuró con la subdivisión del trabajo: cada ser
humano se convierte en algo mecánico, se encaja en un rol y es más fácil controlarlo
y llevarlo a compartir los razonamientos del poder. La lógica de los gobernantes
está llena de lugares comunes y funciona en categorías abstractas: “equilibrio”,
“confines naturales”, “disuasión”. Los poderosos se encuentran, toman un mapa de
un país que quizás nunca antes hayan visto y dibujan sus límites. A estas abstracciones
que deciden sobre la vida de millones de personas las llaman Gran Política. Las
universidades, las escuelas, los medios de comunicación se encargan de difundir
este modelo de política, y la conclusión es que todo aparece como normal: los Estados
han existido siempre, el aparato militar es necesario, las guerras son parte de
la naturaleza humana, etc.
La institución
militar y la guerra como medio legítimo de la política son la expresión de la insensatez
del Estado. ¿Quién toma la decisión de empezar la guerra y, sobre todo, de qué manera?
Krippendorff ilustra con varios ejemplos. El más eficaz de ellos es el relato del
historiador AJP Taylor en su obra La Guerra planeada: así empezó la primera guerra
mundial (Taylor, 1970), que merece la pena resumir:
La chispa que
hizo estallar la guerra fue el asesinato en Sarajevo del archiduque Francisco Fernando
y de su mujer morganática Sofía perpetrado por el estudiante de Bosnia, Gavrilo
Princip, el 28 de junio de 1914. Todos sabían más o menos que no se trató de un
complot, que el asesinato fue una iniciativa individual que se utilizó como pretexto
para iniciar la guerra. Pero la crónica de Taylor nos permite ver la locura detrás
de esta decisión, que conllevará millones de muertos además de la destrucción de
gran parte de Europa.
En tiempo de paz son leones, pero
en la guerra son ciervos. Guerra con frecuencia surge de las diferencias entre
las personas, o de la voluntad de un grupo de aumentar su poder o su riqueza por
tomar el control de las tierras del otro grupo. A menudo los agresores se sienten
que son superiores a los del grupo que quieren dominar: ellos creen que su religión,
cultura o incluso de raza es mejor que la de las personas que desean derrotar. Este
sentimiento de superioridad les hace sentir que es aceptable para combatir a tomar
la tierra, posesiones e incluso vidas del grupo inferior, o para forzar sus caminos
en el pueblo dominado por lo que se asemejan a sus conquistadores. Este relato es un ejemplo de cómo una guerra puede depender de hechos casuales,
del orgullo de algunas personas o de mecanismos de planificación, más allá de la
intención de combatir.([xv]) La política internacional
es un juego peligroso de unos pocos,([xvi]) para satisfacer
deseos y pulsiones personales.([xvii]) Lo que es verdaderamente
importante para los políticos, es ser parte del juego, no ser excluido y, al mismo
tiempo, que todo sea considerado normal por el pueblo, hecho en el que intervienen
los “pequeños”: la prensa, los historiadores conformistas, que impiden que la gente
se dé cuenta de que no hay nada necesario, nada en el interés de la nación, que
todo es básicamente un juego fatal. Krippendorff no se limita al ejemplo de la Primera
Guerra Mundial para explicar la estupidez del poder y analiza una guerra más reciente,
la de Vietnam: 1,6 millones de muertos, 360 mil mutilados, 10 millones de expatriados
y un país destruido. ¿Para qué? Para nada. La guerra, que duró 20 años, fue iniciada
oficialmente por el peligro que la pérdida de Vietnam supondría para la seguridad
política, económica y militar de los EEUU, una justificación de la cual nadie hablará
más después de la derrota.([xviii]) La unión del
Estado con el ejército es una constante en la Historia.
Krippendorffnos
recuerda que los EEUU, después de la Guerra de la Independencia, no tenían ejército.
Es así que, a finales del siglo XVIII, ante la preocupación de una posible anarquía
interna, se aprobó una pequeña guarnición con 840 soldados y 46 oficiales. Para
el gobierno, tal guarnición no era suficiente y así lo demostró propiciando una
derrota ante los indios, con el propósito de convencer al Congreso de que eran necesarias
tropas más numerosas. Al mismo tiempo se fundó la marina de guerra. En la URSS,
la revolución había tenido objetivos de justicia social, pero Lenin y Trotsky consideraban
muy importante la unión entre Estado y ejército para construir una nueva república.
Pensaban que sin ejército no era posible gobernar; es decir, también en la URSS
la primera función del aparato militar era controlar a los ciudadanos.
Un proceso análogo
se repitió en Sudamérica, África y Asia. Antes del colonialismo, no había Estados,
sólo pueblos y etnias. Los Estados son una herencia de los occidentales, por supuesto
con sus ejércitos coloniales compuestos por soldados locales bajo el mando de la
potencia colonial. Una vez independientes, los Estados coloniales mantuvieron la
estructura jerárquica heredada, la única que les parecía concebible, con el aparato
militar como elemento imprescindible. A menudo, la independencia fue concedida a
condición del mantenimiento del ejército y de una estructura estatal. Como el Estado
es el único actor reconocido a escala internacional, las potencias coloniales no
estaban dispuestas a renunciar a interlocutores fiables en el futuro. Además, el
país que había sido colonial estaba listo para intervenir a favor del Estado local,
cada vez que había problemas contrarios a sus intereses.([xix]) Pero estas intervenciones
directas son sólo son la punta del iceberg. El centro del problema es la exportación
de armas: los occidentales producen armas y las venden a los gobiernos corruptos
en las antiguas colonias. Se mantiene y perpetúa así el parasitismo del ejército
y la pobreza de estos países, donde las armas no sólo se compran, sino que se utilizan.
Además, se suceden los golpes de Estado organizados por militares y represiones
del ejército, una lista larguísima en todo el mundo ex colonial.
“El pretexto para
todas las guerras: conseguir la paz”, nos dice el dramaturgo español Jacinto Benavente.
La misma lógica se incorpora al Estado y se convierte en la razón de Estado. Funk - Bretano y Alberto
Sorel escribieron: "La guerra es un acto político por el cual varios Estados,
no pudiendo conciliar lo que creen son sus deberes, sus derechos o sus intereses,
recurren a la fuerza armada para que esta decida cuál de entre ellos, siendo más
fuerte, podrá en razón de la fuerza, imponer su voluntad a los demás." En el caso de Chile, respecto a la Guerra del Pacífico, reza: “Por la razón
o la fuerza”. ¿Y los reclamos de Bolivia sobre sus derechos de mar, y las promesas
(más bien mecidas) gubernamentales del país del Mapocho que por años sufrió, qué
decir? La guerra, dice el Marqués
de Olivart, es el litigio entre las naciones que defienden sus derechos, en el cual
es el juez la fuerza y sirve de sentencia la victoria. Así tenemos, por ejemplo, a MargarethThatcher y sus consejeros que, por la
razón de Estado, deciden una guerra absurda en el otro hemisferio –la guerra de
las Malvinas- para castigar a los argentinos “como deber hacia nuestro pueblo y
a todo el mundo civilizado” (Krippendorff, 1985: 242).
Qué duda cabe que la historia se repite, se copia a sí misma, una y otra vez, un círculo negro que no
acaba. Pero de las lecciones de la historia los pueblos aprenden, con sangre, como
que la letra entra con sangre([xx]). Dice que cuando a Einstein
le preguntaron sobre algún arma capaz de contrarrestar el poder de la bomba atómica
él sugirió la mejor de todas: La paz.
¿Recuerdan las guerras en
la Antigüedad? ¿Recuerdan las guerras napoleónicas? ¿La guerra de la Triple Alianza?
Pero poco sabemos de las guerras civiles de Venezuela entre 1830 y 1903, con un
millón de muertos, cifra nada despreciable, si comparamos con la Guerra del Pacífico
que involucró a Perú, Bolivia y Chile, con 14,000 muertos. ¿Qué sabemos del genocidio
de los indígenas de Norteamérica? Con 370,000 muertos. Casi nada. Solo por las películas
de vaqueros. ¿Recuerdan
la llamada Paz de Westfalia? Nos enseñaron a estudiarla, también de las guerras
mundiales, así la guerra en Corea y Vietnam, pero no a tomar conciencia de lo que
en verdad significa una guerra, la destrucción total y la muerte de cientos de miles
de seres inocentes. La paz de Westfalia significa la legitimación de la guerra como
medio de la política; es una paz provisional. En aquella época, empezó a establecerse
el principio del equilibrio de la fuerza entre los Estados, que siempre tenía que
ser mantenido o restablecido con la guerra. En todo el siglo XVIII, el primero en
el que se establece el Estado, sólo hubo 7 años de paz.([xxi]) Bajo el Rey Sol,
Luis XIV (1638-1715), Francia hizo estallar 29 guerras que arruinaron al Estado
y que cobraron 9 millones de vidas. Lo mismo sucedió con Federico II de Prusia (al
que todavía se le llama “el Grande”): en 1740, en una carta a su amigo Jordan (Krippendorff,
1985: 290), confesaba que la verdadera razón de sus guerras era su deseo de pasar
a la Historia. Después de la guerra de los Siete Años (1756-1763), las arcas del
Estado estaban vacías como las del Rey Sol; solamente Federico tuvo el tiempo de
trabajar por su país en condiciones de paz. La unión de Estado y ejército facilitó
entonces hacer estallar guerras cada vez más grandes, impulsadas por la patología
del poder. La gente dice:
“¿Quién nos va a garantizar la seguridad cuando se suprima el orden establecido
actual? ¿Cuáles van a ser y en qué van a consistir las nuevas costumbres que sustituirán
a las actuales? Hasta que no sepamos cómo será nuestra vida, no avanzaremos ni nos
moveremos del lugar”. Esta exigencia es la misma que comportaría, por ejemplo, el
requerimiento de informes detallados de un país desconocido por parte de un explorador
que se dispusiera a explorarlo.
11.
La madurez: 1990-2010
Asumirme como
judío. No se puede renegar ni menos aborrecer
de tu sangre. ¡Y a mucho orgullo! En la década de 1990, justo cuando residía en
Chile y estuve de casualidad de visita por Lima falleció mi querido abuelo Moisés
GalimidiSusén, hombre orgulloso de ser descendiente del imperio otomano, judío en
Lima, que vino huyendo de la Segunda Guerra Mundial. Según la tradición de la Comunidad Judía en el
Perú esa vez, entristecidos por su partida, lo velamos sin mucha pompa, sin vino,
sin fotografías, sin adornos florales, en la sinagoga de Santa Beatriz. Debía hacerse
así, siguiendo las disposiciones de la Comunidad Judía, sin mucha pompa, con total
sobriedad, sin adornos florales, por ejemplo.
Al día siguiente mi abuelo fue enterrado por un persona asistido de la Comunidad
Judía, cada quién usando su respectiva Kipá sobre la cabeza, en el Cementerio Británico
de Lima, donde la Comunidad Judía tiene su propio cementerio. Allí no se ven santos,
cruces, pabellones para los nichos. Todo es en contacto con la tierra. Lo que recuerdo,
lo digo a manera de buscar perdón, es que
esa noche que debíamos velarlo yo venía de la universidad de una agotadora semana
de exámenes, de tanto cabecear me dormí frente al Altar de la Sinagoga, pues en
pleno velorio a toda la familia nos habían echado llave y toda la noche debíamos
estar velando, cosa que (cuando me encierran) no estoy acostumbrado.
Pero sigamos con Krippendorff, para evitar
seguir contándoles de mis entrañables recuerdos de joven bisoño, descendiente de
judíos.
Krippendorff continúa
con su análisis del aparato militar como peligroso y parásito, pero sobre todo se
concentra en la búsqueda de modelos positivos de política ética. Después de demostrar
la locura de la razón de Estado, y el daño inevitable que provoca el aparato militar
junto a un Estado que se tutela a sí mismo en detrimento de los ciudadanos. ´Por
su parte Ernesto Kahan entre los años 1990 y 2010 residió en Israel y no solo profundizó
sus conocimientos en medicina, sino que además su conciencia de paz y su humanismo
universal se dejó sentir con mayor efecto en esta época. Pero también vivió de cerca
los conflictos árabes-israelís, que no son un tema de hoy, sino de siempre.
Recuerdo bien, identificado por los problemas de los inmigrantes
en el Mundo, sobre todo el de los ilegales y de los pueblos desplazados, que allá
por el año por el año 2003 cuando desde Australia organicé y promoví el Concurso
Internacional de Cuentos y Testimonios “Nosotros los Inmigrantes, nosotros los emigrados”,
que resultó un éxito no solo porque tuvimos en la primera convocatoria más de 300
trabajos enviados, sino además por la calidad de los trabajos presentados y la trayectoria
literaria de muchos concursantes. Una buena cuenta de ellos, por los menos el 30%
provenía de Argentina. Allí supe del valor
que le otorgan los argentinos al inmigrante, porque es un país que se hizo fundamentalmente
con inmigrantes. Pero además hubo escritores concursantes con envíos hechos desde
Israel, que el solo ver los matasellos y aquél idioma tan indescifrable me dejó
más que conmovido, me hicieron saltar las lágrimas, yo diría en estado de Shock.
Recuerdo bien que entre los premiados hubo dos escritores Argentinos Israelís, quienes
probablemente trabaron entrañable amistad con Ernesto Kahan allá en Israel. Se trata
del Dr. José Luis Najensón, autor de numerosas publicaciones de gran valor literario,
quien fue Director del Instituto Cultural Israel-Iberoamérica de Jerusalén y editor
de la Revista Cultural “Carta de Jerusalén”.
El segundo caso es el de Edith Goel, quien emigró
de Argentina a Israel en 1972. Graduada en
Literatura Española por la Universidad hebrea de Jerusalén. Poeta en español y hebreo,
traductora, ilustradora, quien también obtuvo una Mención Honrosa en nuestro Concurso
Internacional y ambos trabajos, de argentinos-israelís, fueron publicado en el libro
Cuentos y Testimonios del Mundo([xxii])
Kant expresó básicamente
la misma idea: antes de actuar en política es necesario honrar la ética (Krippendorff,
1999 147).Toda la vida de Gandhi, a quien Krippendorff dedica un capítulo entero,
se basa en la práctica concreta del mismo principio, que Gandhi expresa en la imagen
de que “los frutos no pueden ser diferentes a la semilla”: desde el mal (la violencia)
no puede surgir el bien. La política debe ser intrínsecamente ética; los medios
determinan los fines.
Otras culturas
han reflexionado sobre la política justa. En Lao-Tse (siglo VI a. C.) leemos:
Cuando el gobernante es indulgente
el pueblo se halla en la abundancia.
Cuanto más severo es un gobernante
más se encuentra el pueblo en la indigencia. (Lao Tse, 1972: 58)
el pueblo se halla en la abundancia.
Cuanto más severo es un gobernante
más se encuentra el pueblo en la indigencia. (Lao Tse, 1972: 58)
En la problemática
e incierta traducción de un texto, que además en su origen era de tradición oral,
“indulgente” y “severo” pueden ser interpretados([xxiii]) respectivamente
como “moderado y discreto” y “malicioso e inconveniente”. Menos problemático es
interpretar lo siguiente:
El pueblo sufre
hambruna
porque el rey cobra impuestos en demasía.
Por eso hay hambruna.
El pueblo es difícil de gobernar
porque el rey actúa
en beneficio de sus propios intereses.
porque el rey cobra impuestos en demasía.
Por eso hay hambruna.
El pueblo es difícil de gobernar
porque el rey actúa
en beneficio de sus propios intereses.
(Lao Tse, 1972: 75, cit. en
Krippendorff, 1999: 137)([xxiv])
Y, en el tema de la guerra y de la paz (Krippendorff,
1999: 137):
Instrumentos de desgracia son las armas,
no son instrumentos para el príncipe;
sólo si está obligado las maneja,
para él, la paz está antes que todo.
Por lo tanto, si vence no celebra su victoria.
Aquel que celebra la victoria
es el que se regocija con la matanza.
Éste jamás debe gobernar sobre la tierra. (Lao Tse, 1972: 31) ([xxv])
no son instrumentos para el príncipe;
sólo si está obligado las maneja,
para él, la paz está antes que todo.
Por lo tanto, si vence no celebra su victoria.
Aquel que celebra la victoria
es el que se regocija con la matanza.
Éste jamás debe gobernar sobre la tierra. (Lao Tse, 1972: 31) ([xxv])
Y además (Krippendorff,
1999: 160):
El que está en el camino del Tao
no refuerza el imperio con las armas.
Toda acción provoca reacciones.
En el lugar donde acampó el ejército,
sólo nacieron zarzas y espinos.
Después de los grandes ejércitos
siempre siguieron años de hambruna.
El buen general vence y allí se queda,
no se atreve a abusar de su poder.
Vence y no se sobrestima.
Vence y no se jacta.
Vence y no se enorgullece.
Vence porque ese es su oficio.
Vence pero no busca fama. (Lao Tse, 1972: 30)
no refuerza el imperio con las armas.
Toda acción provoca reacciones.
En el lugar donde acampó el ejército,
sólo nacieron zarzas y espinos.
Después de los grandes ejércitos
siempre siguieron años de hambruna.
El buen general vence y allí se queda,
no se atreve a abusar de su poder.
Vence y no se sobrestima.
Vence y no se jacta.
Vence y no se enorgullece.
Vence porque ese es su oficio.
Vence pero no busca fama. (Lao Tse, 1972: 30)
Con palabras sólo
parcialmente diferentes de las de Lao Tsé, también Confucio (551‑479 a.C.) invita
a los gobernantes a ser moderados y un buen ejemplo para los ciudadanos sobre todo
evitando la violencia. El rey Aśoka (304-232 a.C.), considerado el fundador de la
India, renuncia a las guerras de conquista para conquistarse a sí mismo. “El rey
considera el honor y la fama de poco valor, con la excepción de la obediencia al
Dharma.
La ciencia no
es políticamente neutral. Los físicos que desarrollaron la bomba atómica eligieron
conscientemente una posibilidad de muerte, en el caso extremo, la destrucción del
planeta entero. Oppenheimer, antes de la explosión de Hiroshima, contemplaba tres
posibilidades: además de lo que ocurrió (200 mil muertos, algunos tras años de sufrimiento),
que no sucediera nada o que todo el planeta fuera destruido.
La escuela más
sutil de libertad, sin embargo, no es la Filosofía, sino el Arte, y dentro de ello
indudablemente está la poesía. El verdadero arte siempre critica al poder y sobrevive
a éste. Aunque necesitamos otro enfoque de la Historia – estudiar más a Gandhi y
menos a Napoleón – no son los poderosos quienes sobreviven a la Historia, sino los
artistas. ¿Quién visita o se interesa en Italia para conocer a Garibaldi y a los
ridículos reyes de Savoia, anteponiéndolos a Miguel Ángel o Leonardo? El poder esconde
sus intenciones y se expresa con monólogos; el arte es naturalmente público y de
diálogo. En el caso de Beethoven, se observa una doble cara: el coro de su Novena
Sinfonía habla de fraternidad, pero su potencia expresiva puede incitar a la agresividad([xxvi]) Mozart sólo puede
ser interpretado en el sentido de la libertad e igualdad: el Così fan tutte
es también un “Così fan tutti”, los hombres no son mejores que las mujeres, el Figaro
es antimilitarista y democrático.
12. Sobre nuestro
Homenajeado Ernesto Kahan, cómo lo define espiritualmente María Eugenia Caseiro:
La
UNIÓN HISPANOAMERICANA DE ESCRITORES, al
referirse a Ernesto Kahan, Un Hombre
de Paz, lo hace en la voz de María Eugenia Caseiro. Según el IFLAC, FORO INTERNACIONAL POR UNA LITERATURA Y UNA CULTURA DE LA
PAZ([xxvii])
hay también grandes rasgos de la personalidad de Ernesto Kahan recogidos en su notable
poema con reminiscencias bíblicas, judías,
y en la reseña biográfica de total adhesión al Pueblo Judío, “igualmente mi pueblo, nuestro pueblo”, que citamos:
PEDAZO DE PAN EN AUSCHWITZ
Implacable cadalso
que
se abre al pueblo
mío
en el campo de
la muerte...
Y Ruth la judía
rapada en las
puertas
de la cámara de
gas...
¡Silencio!
Es fin de su vida
Es la renuncia
a El...
E inexplicable
hastío
con desesperado
ardor,
¡Ay! por un pedazo
de pan.
Ernesto Kahan, nos dicen estas
fuentes citadas, es un hombre lleno de entusiasmo, sus palabras y su personalidad,
transitando suavemente en la mansedumbre de un río impoluto como esa luz que queremos
alcanzar, lo dibujan como un alma preclara y generosa.
Nuestro hombre vibra en cada
nota de la palabra. Paz, familia, hogar, hijos, son conceptos que lo identifican.
Cuando habla de su taller, de sus amigos, que son sus hermanos en vida y obra, habla
del hombre, de todo hombre, de toda buena obra del hombre. Es un privilegio saberlo
allí, en su lugar que está en todas partes, como protagonista de nuestro tiempo,
dispuesto siempre al abrazo y a la palabra conciliadora.
El Profesor Ernesto Kahan
es reconocido exponente en el campo de la salud y la paz mundial. Su conducta y
su profundo sentimiento de amor hacia sus semejantes le han llevado a ser ejemplo
y guía para todo el que se proponga metas en beneficio de la humanidad. Es un hombre
diáfano y sencillo, cuyo carácter fundamentado en la disciplina, y profundos lazos
de amor al ser humano, a la naturaleza y a la vida, ejemplifica esa paz que desea
para todos, y logra establecer un íntimo contacto con la fibra sensible de cada
persona que toca con su palabra entusiasta. Su carisma y potencial de trabajo, le
imprimen esa peculiaridad que tienen los grandes hombres, de dar la impresión de
estar en muchos sitios a la vez, y es que su emoción se despliega en todo momento
y lugar.
“… no hay en mis
mundos nada que me una más a las gentes, que los sueños y la poesía”. Ernesto Kahan
Sus cálidos y vibrantes poemas
no nacen del poeta que crea para sí desde un universo propio, sino que, contrariamente,
brotan como nacidos del corazón de sus semejantes, con la naturalidad que le brinda
su infinita necesidad de proveer, de asistir, y de llegar a cada ser humano, prescindiendo
del orgullo que podrían darle todos sus lauros y distinciones, sólo para crear el
vínculo con lo verdaderamente humano, lo que considera materia prima elemental para
crear un lazo de afecto, la magia de transmitir por los cauces directos de su entrega.
Poesías de su libro PAXAPORTE
fueron traducidas a nueve idiomas, compilador de la "Antología "Los Escritores
del Alba" Editorial Certeza, España y seleccionado autor en 6 antologías poéticas,
sus textos llenos de incentivo y esperanza son muestra de percibir su propia vida
como componente de una unidad de la que nos hace sentir parte y que se desborda
en su universo de infinito amor.
UNA PALABRA
Si mi especulativo ser
no tuviera llanto ni poesía,
ni reflejos ancestrales,
ni arrebatos de pasión
por saltar las barreras
del derecho privado,
las estrellas no brillaran
y el sonido fuera sordo...
aun así gritaría,
AMOR...
en viva voz que te amo.
Y si la tierra temblara
con lujuria encendida,
y si en proyecto de vida
obligado mi ser debiera
a componer y escribir,
paso a paso y día a día
y una sola palabra
debiera ser nacida...
AMOR...
Sólo amor por
ti escribiría.
Y si me encierro
en el yo
y la pluma, sola,
estuviera
galopando por
el tiempo…
Y si no tuviera
yo, espacio...
Y si fuera cuerpo
flotante
sin rumbo, en
el viento...
Y si pudiera ver
en la nada...
y después y mañana...
También, AMOR...
por ti escribiría.
Que yo, pensamiento
y barro,
nostalgia en poesía,
músculo y energía,
música, baile,
historia,
agua pura de manantial,
o espejo agrio
de mentira...
Con hambre o sonrisa,
meditación, corrida,
decisión dolida,
o prisa
Pienso en ti,
AMOR..!
En viva voz que
te amo.
Ernesto Kahan es asimismo
autor de más de 100 libros y artículos sobre temas de su especialidad: Seguro nacional
de salud, medicina del futuro, epidemiología, atención primaria de salud, violencia,
conflictos bélicos, responsabilidad social y ética médica en publicaciones científicas
y literarias de gran renombre. En cada uno de sus pronunciamientos, Ernesto transmite
un mensaje que a todos alcanza:
“… esta bienvenida
me llevó a diferentes lugares y circunstancias. Voy a ser más específico. "La
Ceiba" me transportó a Guatemala, unos 15 años atrás, a un ingenio azucarero
golpeado entonces, como toda América latina por la epidemia de cólera y yo tratando
de enseñar mis conocimientos y experiencia para estudiarla y controlarla y aprovechando
la fuerza de la naturaleza para aventurarme por las laderas de los volcanes en erupción.
La Ceiba se erguía majestuosa en el centro urbano del ingenio y nos ofrecía su sombra
acogedora. "La armonía" me llevó por las calles de la Ciudad Prohibida
del imperio de la China donde el tiempo marchaba en acordes de amor, concubinatos
y guerras legendarias y con sonidos en total simbiosis con la naturaleza. También
"La armonía" me preguntó quién soy y que hago... Básicamente me preguntó
qué es lo que no estoy haciendo….”.
Ernesto Kahan
(9 de abril del 2005, en respuesta a la bienvenida a
un grupo de poetas amigos)
Ernesto Kahan, poeta y humanista
Fuente: http://www.laprimeraperu.pe/online/cultura/ernesto-kahan-poeta-y-humanista_25726.html
Volvamos a la entrevista que le hicieran para Nocturnario, Revista de Creación Literaria, dirigida por el mexicano Agustín Orihuela([xxviii])
¿Qué está leyendo ahora?
Estoy leyendo por tercera
vez El principito, de Antoine de Saint-Exupéry, y Demián de Hermann Hesse, pienso que en función de mis próximas
obras. Obviamente, también estoy leyendo los textos de autores a los que me comprometí
evaluar o prologar y otros que son parte de concursos en los que soy juez.
¿Está escribiendo? ¿De qué trata su próximo libro?
Escribo todos los días muy
disciplinadamente y con objetivos y planes definidos. En perspectiva hay dos libros
y no sé cuál saldrá primero. Uno es para niños y el otro con poesía sugestiva y
en cierto modo, enigmático.
¿Qué recomienda a los jóvenes que están aprendiendo a contar historias?
Hace ya tiempo que entendí
que el amor propio y los deseos de trascender solamente se pueden satisfacer con
obra y trabajo común, especialmente por medio de la humildad y el amor. Muchos sostienen
que la poesía es belleza y armonía y tienen razón, mas sin amor es perfume vacío…
es aire solamente. Cuando la belleza está casada con el amor al pueblo, la justicia,
la verdad, la paz… cuando el amor es el rechazo de la guerra, el racismo, el genocidio,
el odio… la poesía es cultura y civilización.
Mi recomendación, nos dice
Ernesto Kahan, es que lean y escriban y no pierdan tiempo en escuchar mis consejos.
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Esbozo biográfico de nuestro homenajeado:
ERNESTO KAHAN. Argentino. Médico, poeta,
doctor honorario en literatura. Debido a la dictadura emigró a Israel (1976).
Profesor en Universidades: Tel Aviv-Israel, UNBA-Argentina,
Patagonia-Argentina, UCE-Dominicana, Católica-Perú, UNAM-México, y Salamanca-España.
En Argentina fue Director General del Ministerio de Salud de la Nación y
Profesor de Salud Pública y Epidemiología en las Universidades de Buenos Aires
y de la Patagonia.
En Israel fue durante diez años
Vicedirector del Centro Médico Beilinson (actualmente Rabin), reconocido como
uno de los más importantes complejos médicos en Israel. Desde 1985 hasta 1997
se desempeñó como Director del Departamento de Epidemiología y Estadística del
Instituto de Salud Ocupacional en la Facultad de Medicina de la Universidad de
Tel Aviv. Desde 1992 orienta y asesora en las investigaciones de la cátedra de
Medicina de familia de esta Universidad y a la Red de Investigación de
Pediatras de Israel. En 1996 fue designado además, Director Académico de los
cursos para médicos y Director del Centro de Estudios Estratégicos en Sistemas
de Salud del Instituto Internacional de la Histadrut. En 1998 fue designado el
jefe del equipo evaluador de proyectos del Banco Mundial para atención médica
primaria en el Ecuador. Actualmente es el director del programa Master en
Medicina de Familia de la Universidad de Tel Aviv.
Director de cursos sobre reforma de los
sistemas de salud, investigación médica, situaciones de emergencia, medicina
comunitaria y salud en el trabajo en universidades de Israel, América Latina y
Europa. Reconocido mundialmente por su visión analítica de los sistemas de
atención primaria de salud en Israel y otros países y por su concepción de la
responsabilidad médica, fue Investigador Invitado en la Universidad de Washington
(USA) Fue designado Huésped Ilustre en varias ciudades históricas y capitales
de América por su contribución a la paz y la salud de los pueblos.
Publicó 7 libros y más de 200 artículos en
revistas de renombre internacional. Poesías de su libro “PAXAPORTE” fueron
traducidas a 11 idiomas. Su libro "Genocidio" fue traducido a tres
idiomas y elegido por los festivales del Libro en Mongolia, Alemania, España,
Yugoslavia y Argentina. Autor seleccionado en 15 ediciones del libro
"Nueva Poesía hispanoamericana" por Lord Byròn ediciones una
publicación en la que se encuentran los más destacados exponentes de la poesía
contemporánea en castellano; poemario universal "POESÍA IBEROAMERICANA
SIGLO XXI"; todas las 4 ediciones de la
"Stand@rt World Anthology of Contemporary Poets"; "Contemporary Poetry"
en Chino e inglés; seleccionado para el libro "Diccionario Internacional
de Poetas", Hangchon Literature Complete Collection Vol. III y XII, y
muchas otras publicaciones. Fundador de “Médicos por la Paz” (Israel, Uruguay,
Chile y Bolivia). Vicepresidente de “Médicos contra la Guerra Nuclear”
(Institución premiada con el Premio Nobel de la Paz 1985). Presidente de la
Asociación Israelí de Escritores en Lengua Castellana – AIELC. Miembro del
Comité y Jurado en más de 30 concursos internacionales incluido el prestigioso
CRANE Summit Siglo 21. Presidente del Taller Literario BRASEGO. Vicepresidente
del Fórum Internacional de Literatura y Cultura para la Paz. Vicepresidente del
Congreso Mundial de poetas y Academia Mundial de Arte y Cultura. Vicepresidente
de los Congresos Mundiales de poetas, Los Ángeles 2005, Mongolia 2006 y México
2008. Presidente Adjunto de UHE- UNIÓN HISPANOAMERICANA DE ESCRITORES.
[ii] Sobre Teoría de los Juegos, ver: Esquivel, Francisco
J. y Esquivel, José A. Los nuevos paradigmas de la Teoría de Juegos desde la globalización.
Op. Cit. Fuente: http://www.ugr.es/~revpaz/numeros/revpaz_8_1_completo.pdf
[iv] Sobre el humanismo el psicólogo norteamericano
Carl Rogers (1902-1987) es uno de los autores más conocidos del movimiento humanista. Esta definición
se encontraría más cerca de lo que debemos entender como humanismo, teniendo presente
que representa una definición más abarcadora, no reductiva ni limitadas sólo al
campo de las letras o a un periodo determinado de la historia. n efecto, en la actualidad
se empieza a tener la percepción que el humanismo es un concepto filosófico antes
que una forma histórica de existencia o que un ideal meramente particularista de
la conducta. Es, por tanto, un conocimiento valorativo del hombre destinado a sustentar
el espíritu de una cultura que no se detiene en un determinado tiempo histórico
(Renacimiento), ni tampoco en una determinada estética o una religión antropomórfica,
ni en el iluminismo de una elite intelectual que pierde su vitalidad cuando se desvanece
el espíritu que lo ha representado. Gentile, incluso, nos aporta otra interesante
arista al exponer la idea que la orientación general del Renacimiento es algo distinto
a la del humanismo, porque el humanista se encierra en el estudio y en la celebración
de lo que es estrechamente humano; el hombre del Renacimiento, en cambio, gira la
mirada fuera del hombre y abraza con el intelecto la totalidad del mundo en el cual
el hombre vive y del cual forma parte. El punto de vista es el mismo pero tan amplio
que comprende toda la naturaleza.
En el sentido más amplio, el fenómeno humanista
no puede ser considerado sólo a la luz de ciertas expresiones que arrancan del mundo
clásico, sino que sus raíces se hunden en el suelo abonado ya por las más antiguas
sociedades. Por eso, los estudios y teorías más nuevas sobre el humanismo tienden
a aceptar que
emerge
paralelo con el estadio de desarrollo del hombre que lo determina y especifica como
un horno sapiens.
[v] Francesco Pistolato: Alumno del Máster en Cultura
de Paz, Conflictos, Educación y Derechos Humanos del Instituto de la Paz y los Conflictos
de la Universidad de Granada en el año 2009-2010. Nacido en 1952 en Roma, licenciado
en Derecho (1975) y en Idiomas Extranjeros (1983) en la Universidad La Sapienza
de Roma, Diploma de la Universidad de Klagenfurt: Curso de Educación para la Paz
“Eured” 2004-2006, profesor de Alemán en la escuela secundaria en Italia, cofundador
en 2007 del Centro de Investigación para la Paz IRENE de la Universidad de Udine
(Italia). Principales publicaciones de Cultura de Paz: Como editor: (2006) Per un’idea
di pace, Padova, CLEUP; (2007) Die verborgene Tugend. Unbekannte Heldenund Diktatur
in Österreich 1938-1945 / La virtùnascosta. Eroisconosciuti e dittatura in Austria
1938-1945. Treviso, Europrint Edizioni; (2009) Le rose sbocciano in autunno. Pisa,
Gandhi Edizioni. Como traductor: (2008) Krippendorff, Ekkehart. Lo Stato e la guerra,
Pisa, Gandhi Edizioni.
Fuente:http://www.ugr.es/~revpaz/articulos/Ekkehart%20Krippendorff.html
[vi] Los informes oficiales al respecto, por ejemplo
del PNUMA, también tienden a identificar conflicto ambiental con conflicto armado
originado por condiciones ambientales. Sin embargo desde el campo de estudios de
la Investigación para la Paz se está ampliando la visión sobre los mismos, como
demuestran las agendas de los principales centros de investigación, como el International
Peace Research Institute (PRIO) de Oslo, Noruega; el Stockholm International Peace
Research Institute (SIPRI); o en España el Centro de Investigación para la Paz de
Madrid (CIP), que ha cambiado su denominación a CIP Ecosocial, remarcando así sus
nuevas prioridades de investigación.
[vii] Aun en los ejemplos más radicales de la ecología
profunda siempre subyacen los intereses de esos defensores de la «naturaleza pura»,
ya sean estético-contemplativos o una simple convicción moral (Martínez Alier, 2007)
[viii] En esta etapa, los conflictos mineros son un ejemplo
paradigmático como se expone en Martínez Alier (2001)
[ix] El informe original, con el título ¿Es la energía
atómica sostenible? Fue preparado para la Comisión de Naciones Unidas para el desarrollo
sostenible de 2001, y discutido de nuevo durante la continuación en Bonn en julio
del mismo año. El informe concluyó básicamente que la energía atómica no es sostenible,
y desde entonces se ha citado repetidamente por detractores de la opción nuclear.
El texto está disponible con sus distintas revisiones en http://www.stormsmith.nl/. Una
revisión exhaustiva del mismo realizado por la Universidad de Sidney y denominado
Life-Cycle Energy Balance and Greenhouse Gas Emissions of Nuclear Energy in Australia
de 2006, se puede encontrar enhttp://www.dpmc.gov.au/publications/umpner/docs/commissioned/ISA_report.pdf
[x] Vinyamata Camp, Eduard. Conflictología. En:
Revista de Paz y Conflictos, Volumen 8, enero-junio, Universidad de Granada, España,
2015. Vinyamata, Eduard (2007) La conflictología, Barcelona, Editorial UOC. Fuente:http://www.ugr.es/~revpaz/numeros/revpaz_8_1_completo.pdf
[xi] Sólo hace falta echar un vistazo a la web de
la WNA o la de cualquier asociación industrial nuclear, como Foratom a nivel europeo,
o el Foro Nuclear Español. En ellas se destaca
de forma visible la no emisión de CO2 por las centrales nucleares. Ver también
Sánchez Vázquez (2010).
En realidad no se puede destacar como un fenómeno exclusivo de las empresas nucleares, aunque estas fueran de las pioneras y con un mensaje claro y más directo. Se enmarca en una corriente más amplia extendida en el mundo empresarial y conocida como greenwashing, un término que describe el uso engañoso de marketing verde para promover una percepción errónea de que las políticas o los productos de una compañía son adecuados desde el punto de vista medioambiental. http://www.greenwashingindex.com
En realidad no se puede destacar como un fenómeno exclusivo de las empresas nucleares, aunque estas fueran de las pioneras y con un mensaje claro y más directo. Se enmarca en una corriente más amplia extendida en el mundo empresarial y conocida como greenwashing, un término que describe el uso engañoso de marketing verde para promover una percepción errónea de que las políticas o los productos de una compañía son adecuados desde el punto de vista medioambiental. http://www.greenwashingindex.com
[xii] Dicha evolución ha transcurrido a través del
análisis de la obra de grandes pensadores y científicos como Linneo, Darwin o Thoreau,
y de «ecologistas clave» del siglo XX como Rachel Carson, la autora del emblemático
libro Silent Spring; Frederic Clements, autoridad en la descripción y clasificación
científica de los vegetales; Aldo Leopold, considerado el padre de la gestión de
la vida salvaje en los Estados Unidos; James Lovelock, prestigioso científico famoso
por la hipótesis Gaia; y Eugene Odum, uno de los más importantes promotores de la
ecología contemporánea. Worster (1994).
[xiii] La matanza de los manifestantes a cargo del ejército
el 4 de febrero de 1888, como se detalla en Martínez Alier (2007).
[xiv] Entre los diversos y heterogéneos incidentes,
se pueden destacar la contaminación radiactiva del buque atunero Mitsu en Japón
en 1954; los vertidos contaminantes de explotaciones petrolíferas en California
o el incremento del uso de pesticidas a principios de la década de los sesenta en
Estados Unidos; así como los problemas de contaminación atmosférica de Londres que
derivaron en la promulgación de la una nueva ley por la limpieza del aire en 1956
o diversas protestas contra la construcción de infraestructuras en el resto de Europa
(Mc Neill, 2003: 15).
[xv] Por ejemplo, se ha constatado la contaminación
de aguas subterráneas y superficiales con radionucleidos (como el plomo-210, el
polonio-210 y el radio-226), metales pesados (arsénico, manganeso y níquel) y otros
contaminantes en las inmediaciones de minas de uranio canadienses. Winfield (2006): 32-33.
[xvi] La literatura específica sobre esta problemática en otros países
es mucho menos extensa si se compara con el caso estadounidense. En el contexto
europeo los principales estudios se centran en la situación de los trabajadores
de las minas en Francia y la República Checa, los dos países con mayor tasa de
producción. Ver Rogel et al. (2002) y Tomasek (2002). Sorprendentemente, no se
han encontrado estudios de este tipo para el caso español. Sí existen trabajos
sobre la mortalidad en las áreas colindantes a plantas de tratamiento del
uranio y centrales nucleares (López-Abente, Aragonés y Pollás, 2001), o el
conocido estudio sobre la mortalidad entre antiguos trabajadores de la Junta de
Energía Nuclear, coordinado por Rodríguez Artalejo (1997).
[xvii] http://www.ugr.es/~revpaz/articulos/Ekkehart
Krippendorff.html - _ftnref20Sobre la incidencia de los impactos de la
minería en grupos vulnerables ver Maxwell (2004).
[xviii] El enriquecimiento de uranio en EEUU se realiza por difusión y
parte de sus requerimientos energéticos son cubiertos por plantas de producción
eléctrica basadas en el carbón obteniendo una contribución a la emisión de
gases invernaderos de cerca de 40kg/MWh, según la WNA (2010). Por el
contrario, la misma WNA puntualiza que en Francia, que tiene la mayor planta de
enriquecimiento por difusión, la energía necesaria es suministrada por una
central nuclear anexa, por lo que la contribución de gases invernaderos de los
reactores que usan el uranio enriquecido francés es de menos de 20 kg/MWh en total.
[xix] Para profundizar en esta cuestión es destacable el capítulo «Guerra
‟hightech”, desastre humanitario y ecológico» en Bernard et al.(1999). Véase también
Vucksanovic et al. (2001): 222-229.
[xx] Desde el año 1700 han muerto en conflictos armados unas 100 millones
de personas, el 90% durante el siglo XX y un 13% desde 1945 al presente. Durante la mayoría de la historia de
la Humanidad cerca del 10% de las víctimas directas de una guerra eran civiles,
estas aumentaban a la mitad si se incluían las causas indirectas (hambrunas,
pestes, masacres y demás). Durante los años 1970 los civiles pasaron a
ser el 73% de las víctimas y en la siguiente década el 85%, actualmente son
cerca del 90% de las bajas de las guerras. En este cálculo entran las muertes
producto de batallas, masacres, hambrunas, pestes y genocidios durante los
conflictos. Fuente: Wikipedia (Guerras por número de muertos).
[xxi] El plutonio extraído del reprocesado del combustible gastado en
los reactores sería usado como combustible en una nueva generación
de reactores, llamados de alimentación rápida o Fast Breeder Reactors(FBR). Se esperaba
que resultara un proceso de alta eficiencia energética si lograba ser controlado
a nivel tecnológico, por lo que muchos países buscaron acceso al plutonio para poder
participar en el desarrollo de los FBR. Walker (2006).
[xxii] Samuel Cavero: Cuentos y Testimonios del Mundo.
Nosotros los inmigrantes, nosotros los emigrados. Terra Austral Editores, 274 págs., Sydney, setiembre 2004
[xxiii] Aquí se expone el enfrentamiento entre la traducción
en español y en alemán.
[xxiv] De hecho “actúa en beneficio de sus propios intereses”
parece ser una legítima pero restrictiva interpretación de una frase que en el origen
suena “actúa demasiado”, es decir, alejándose del recto principio de moderación
que es la vía del Tao.
[xxv] Sobre Lao Tse, se le considera uno de los filósofos más
relevantes de la civilización china. La tradición china establece que vivió en el
siglo VI a. C., pero muchos eruditos modernos argumentan
que puede haber vivido aproximadamente en el siglo IV a. C., durante
el período de las Cien escuelas del pensamiento y
de los Reinos Combatientes. Se le atribuye haber escrito el Dào Dé Jing (o Tao Te Ching), obra esencial del
taoísmo. De
acuerdo con este libro, el tao (o
dao, ‘camino’) puede verse como el cambio permanente y este es la verdad universal.
[xxvi] Esto se aprecia claramente en la película La naranja
mecánica de S. Kubrick.
[xxvii] https://iflacenarg.wordpress.com/kahan/
[xxviii] http://nocturnario.com.mx/revista/entrevista-con-ernesto-kahan-un-poeta-universal/
.
CITAS TEXTUALES
[1] Esbozo biográfico de nuestro homenajeado:
ERNESTO KAHAN. Argentino. Médico, poeta,
doctor honorario en literatura. Debido a la dictadura emigró a Israel (1976).
Profesor en Universidades: Tel Aviv-Israel, UNBA-Argentina,
Patagonia-Argentina, UCE-Dominicana, Católica-Perú, UNAM-México, y Salamanca-España.
En Argentina fue Director General del Ministerio de Salud de la Nación y
Profesor de Salud Pública y Epidemiología en las Universidades de Buenos Aires
y de la Patagonia.
En Israel fue durante diez años
Vicedirector del Centro Médico Beilinson (actualmente Rabin), reconocido como
uno de los más importantes complejos médicos en Israel. Desde 1985 hasta 1997
se desempeñó como Director del Departamento de Epidemiología y Estadística del
Instituto de Salud Ocupacional en la Facultad de Medicina de la Universidad de
Tel Aviv. Desde 1992 orienta y asesora en las investigaciones de la cátedra de
Medicina de familia de esta Universidad y a la Red de Investigación de
Pediatras de Israel. En 1996 fue designado además, Director Académico de los
cursos para médicos y Director del Centro de Estudios Estratégicos en Sistemas
de Salud del Instituto Internacional de la Histadrut. En 1998 fue designado el
jefe del equipo evaluador de proyectos del Banco Mundial para atención médica
primaria en el Ecuador. Actualmente es el director del programa Master en
Medicina de Familia de la Universidad de Tel Aviv.
Director de cursos sobre reforma de los
sistemas de salud, investigación médica, situaciones de emergencia, medicina
comunitaria y salud en el trabajo en universidades de Israel, América Latina y
Europa. Reconocido mundialmente por su visión analítica de los sistemas de
atención primaria de salud en Israel y otros países y por su concepción de la
responsabilidad médica, fue Investigador Invitado en la Universidad de Washington
(USA) Fue designado Huésped Ilustre en varias ciudades históricas y capitales
de América por su contribución a la paz y la salud de los pueblos.
Publicó 7 libros y más de 200 artículos en
revistas de renombre internacional. Poesías de su libro “PAXAPORTE” fueron
traducidas a 11 idiomas. Su libro "Genocidio" fue traducido a tres
idiomas y elegido por los festivales del Libro en Mongolia, Alemania, España,
Yugoslavia y Argentina. Autor seleccionado en 15 ediciones del libro
"Nueva Poesía hispanoamericana" por Lord Byròn ediciones una
publicación en la que se encuentran los más destacados exponentes de la poesía
contemporánea en castellano; poemario universal "POESÍA IBEROAMERICANA
SIGLO XXI"; todas las 4 ediciones de la
"Stand@rt World Anthology of Contemporary Poets"; "Contemporary Poetry"
en Chino e inglés; seleccionado para el libro "Diccionario Internacional
de Poetas", Hangchon Literature Complete Collection Vol. III y XII, y
muchas otras publicaciones. Fundador de “Médicos por la Paz” (Israel, Uruguay,
Chile y Bolivia). Vicepresidente de “Médicos contra la Guerra Nuclear”
(Institución premiada con el Premio Nobel de la Paz 1985). Presidente de la
Asociación Israelí de Escritores en Lengua Castellana – AIELC. Miembro del
Comité y Jurado en más de 30 concursos internacionales incluido el prestigioso
CRANE Summit Siglo 21. Presidente del Taller Literario BRASEGO. Vicepresidente
del Fórum Internacional de Literatura y Cultura para la Paz. Vicepresidente del
Congreso Mundial de poetas y Academia Mundial de Arte y Cultura. Vicepresidente
de los Congresos Mundiales de poetas, Los Ángeles 2005, Mongolia 2006 y México
2008. Presidente Adjunto de UHE- UNIÓN HISPANOAMERICANA DE ESCRITORES.
[2] Sobre Teoría de los Juegos, ver: Esquivel, Francisco
J. y Esquivel, José A. Los nuevos paradigmas de la Teoría de Juegos desde la globalización.
Op. Cit. Fuente: http://www.ugr.es/~revpaz/numeros/revpaz_8_1_completo.pdf
[4] Sobre el humanismo el psicólogo norteamericano
Carl Rogers (1902-1987) es uno de los autores más conocidos del movimiento humanista. Esta definición
se encontraría más cerca de lo que debemos entender como humanismo, teniendo presente
que representa una definición más abarcadora, no reductiva ni limitadas sólo al
campo de las letras o a un periodo determinado de la historia. n efecto, en la actualidad
se empieza a tener la percepción que el humanismo es un concepto filosófico antes
que una forma histórica de existencia o que un ideal meramente particularista de
la conducta. Es, por tanto, un conocimiento valorativo del hombre destinado a sustentar
el espíritu de una cultura que no se detiene en un determinado tiempo histórico
(Renacimiento), ni tampoco en una determinada estética o una religión antropomórfica,
ni en el iluminismo de una elite intelectual que pierde su vitalidad cuando se desvanece
el espíritu que lo ha representado. Gentile, incluso, nos aporta otra interesante
arista al exponer la idea que la orientación general del Renacimiento es algo distinto
a la del humanismo, porque el humanista se encierra en el estudio y en la celebración
de lo que es estrechamente humano; el hombre del Renacimiento, en cambio, gira la
mirada fuera del hombre y abraza con el intelecto la totalidad del mundo en el cual
el hombre vive y del cual forma parte. El punto de vista es el mismo pero tan amplio
que comprende toda la naturaleza.
En el sentido más amplio, el fenómeno humanista
no puede ser considerado sólo a la luz de ciertas expresiones que arrancan del mundo
clásico, sino que sus raíces se hunden en el suelo abonado ya por las más antiguas
sociedades. Por eso, los estudios y teorías más nuevas sobre el humanismo tienden
a aceptar que
emerge
paralelo con el estadio de desarrollo del hombre que lo determina y especifica como
un horno sapiens.
[5] Francesco Pistolato: Alumno del Máster en Cultura
de Paz, Conflictos, Educación y Derechos Humanos del Instituto de la Paz y los Conflictos
de la Universidad de Granada en el año 2009-2010. Nacido en 1952 en Roma, licenciado
en Derecho (1975) y en Idiomas Extranjeros (1983) en la Universidad La Sapienza
de Roma, Diploma de la Universidad de Klagenfurt: Curso de Educación para la Paz
“Eured” 2004-2006, profesor de Alemán en la escuela secundaria en Italia, cofundador
en 2007 del Centro de Investigación para la Paz IRENE de la Universidad de Udine
(Italia). Principales publicaciones de Cultura de Paz: Como editor: (2006) Per un’idea
di pace, Padova, CLEUP; (2007) Die verborgene Tugend. Unbekannte Heldenund Diktatur
in Österreich 1938-1945 / La virtùnascosta. Eroisconosciuti e dittatura in Austria
1938-1945. Treviso, Europrint Edizioni; (2009) Le rose sbocciano in autunno. Pisa,
Gandhi Edizioni. Como traductor: (2008) Krippendorff, Ekkehart. Lo Stato e la guerra,
Pisa, Gandhi Edizioni.
Fuente:http://www.ugr.es/~revpaz/articulos/Ekkehart%20Krippendorff.html
[6] Los informes oficiales al respecto, por ejemplo
del PNUMA, también tienden a identificar conflicto ambiental con conflicto armado
originado por condiciones ambientales. Sin embargo desde el campo de estudios de
la Investigación para la Paz se está ampliando la visión sobre los mismos, como
demuestran las agendas de los principales centros de investigación, como el International
Peace Research Institute (PRIO) de Oslo, Noruega; el Stockholm International Peace
Research Institute (SIPRI); o en España el Centro de Investigación para la Paz de
Madrid (CIP), que ha cambiado su denominación a CIP Ecosocial, remarcando así sus
nuevas prioridades de investigación.
[7] Aun en los ejemplos más radicales de la ecología
profunda siempre subyacen los intereses de esos defensores de la «naturaleza pura»,
ya sean estético-contemplativos o una simple convicción moral (Martínez Alier, 2007)
[8] En esta etapa, los conflictos mineros son un
ejemplo paradigmático como se expone en Martínez Alier (2001)
[9] El informe original, con el título ¿Es la energía
atómica sostenible? Fue preparado para la Comisión de Naciones Unidas para el desarrollo
sostenible de 2001, y discutido de nuevo durante la continuación en Bonn en julio
del mismo año. El informe concluyó básicamente que la energía atómica no es sostenible,
y desde entonces se ha citado repetidamente por detractores de la opción nuclear.
El texto está disponible con sus distintas revisiones en http://www.stormsmith.nl/. Una
revisión exhaustiva del mismo realizado por la Universidad de Sidney y denominado
Life-Cycle Energy Balance and Greenhouse Gas Emissions of Nuclear Energy in Australia
de 2006, se puede encontrar enhttp://www.dpmc.gov.au/publications/umpner/docs/commissioned/ISA_report.pdf
[10] Vinyamata Camp, Eduard. Conflictología. En:
Revista de Paz y Conflictos, Volumen 8, enero-junio, Universidad de Granada, España,
2015. Vinyamata, Eduard (2007) La conflictología, Barcelona, Editorial UOC. Fuente:http://www.ugr.es/~revpaz/numeros/revpaz_8_1_completo.pdf
[11] Sólo hace falta echar un vistazo a la web de
la WNA o la de cualquier asociación industrial nuclear, como Foratom a nivel europeo,
o el Foro Nuclear Español. En ellas se destaca
de forma visible la no emisión de CO2 por las centrales nucleares. Ver también
Sánchez Vázquez (2010).
En realidad no se puede destacar como un fenómeno exclusivo de las empresas nucleares, aunque estas fueran de las pioneras y con un mensaje claro y más directo. Se enmarca en una corriente más amplia extendida en el mundo empresarial y conocida como greenwashing, un término que describe el uso engañoso de marketing verde para promover una percepción errónea de que las políticas o los productos de una compañía son adecuados desde el punto de vista medioambiental. http://www.greenwashingindex.com
En realidad no se puede destacar como un fenómeno exclusivo de las empresas nucleares, aunque estas fueran de las pioneras y con un mensaje claro y más directo. Se enmarca en una corriente más amplia extendida en el mundo empresarial y conocida como greenwashing, un término que describe el uso engañoso de marketing verde para promover una percepción errónea de que las políticas o los productos de una compañía son adecuados desde el punto de vista medioambiental. http://www.greenwashingindex.com
[12] Dicha evolución ha transcurrido a través del
análisis de la obra de grandes pensadores y científicos como Linneo, Darwin o Thoreau,
y de «ecologistas clave» del siglo XX como Rachel Carson, la autora del emblemático
libro Silent Spring; Frederic Clements, autoridad en la descripción y clasificación
científica de los vegetales; Aldo Leopold, considerado el padre de la gestión de
la vida salvaje en los Estados Unidos; James Lovelock, prestigioso científico famoso
por la hipótesis Gaia; y Eugene Odum, uno de los más importantes promotores de la
ecología contemporánea. Worster (1994).
[13] La matanza de los manifestantes a cargo del
ejército el 4 de febrero de 1888, como se detalla en Martínez Alier (2007).
[14] Entre los diversos y heterogéneos incidentes,
se pueden destacar la contaminación radiactiva del buque atunero Mitsu en Japón
en 1954; los vertidos contaminantes de explotaciones petrolíferas en California
o el incremento del uso de pesticidas a principios de la década de los sesenta en
Estados Unidos; así como los problemas de contaminación atmosférica de Londres que
derivaron en la promulgación de la una nueva ley por la limpieza del aire en 1956
o diversas protestas contra la construcción de infraestructuras en el resto de Europa
(Mc Neill, 2003: 15).
[15] Por ejemplo, se ha constatado la contaminación
de aguas subterráneas y superficiales con radionucleidos (como el plomo-210, el
polonio-210 y el radio-226), metales pesados (arsénico, manganeso y níquel) y otros
contaminantes en las inmediaciones de minas de uranio canadienses. Winfield (2006): 32-33.
[16] La literatura específica sobre esta problemática en otros países
es mucho menos extensa si se compara con el caso estadounidense. En el contexto
europeo los principales estudios se centran en la situación de los trabajadores
de las minas en Francia y la República Checa, los dos países con mayor tasa de
producción. Ver Rogel et al. (2002) y Tomasek (2002). Sorprendentemente, no se
han encontrado estudios de este tipo para el caso español. Sí existen trabajos
sobre la mortalidad en las áreas colindantes a plantas de tratamiento del
uranio y centrales nucleares (López-Abente, Aragonés y Pollás, 2001), o el
conocido estudio sobre la mortalidad entre antiguos trabajadores de la Junta de
Energía Nuclear, coordinado por Rodríguez Artalejo (1997).
[17] http://www.ugr.es/~revpaz/articulos/Ekkehart
Krippendorff.html - _ftnref20Sobre la incidencia de los impactos de la
minería en grupos vulnerables ver Maxwell (2004).
[18] El enriquecimiento de uranio en EEUU se realiza por difusión y
parte de sus requerimientos energéticos son cubiertos por plantas de producción
eléctrica basadas en el carbón obteniendo una contribución a la emisión de
gases invernaderos de cerca de 40kg/MWh, según la WNA (2010). Por el
contrario, la misma WNA puntualiza que en Francia, que tiene la mayor planta de
enriquecimiento por difusión, la energía necesaria es suministrada por una
central nuclear anexa, por lo que la contribución de gases invernaderos de los
reactores que usan el uranio enriquecido francés es de menos de 20 kg/MWh en total.
[18] Para profundizar en esta cuestión es destacable el capítulo «Guerra
‟hightech”, desastre humanitario y ecológico» en Bernard et al.(1999). Véase también
Vucksanovic et al. (2001): 222-229.
[20] Desde el año 1700 han muerto en conflictos armados unas 100 millones
de personas, el 90% durante el siglo XX y un 13% desde 1945 al presente. Durante la mayoría de la historia de
la Humanidad cerca del 10% de las víctimas directas de una guerra eran civiles,
estas aumentaban a la mitad si se incluían las causas indirectas (hambrunas,
pestes, masacres y demás). Durante los años 1970 los civiles pasaron a
ser el 73% de las víctimas y en la siguiente década el 85%, actualmente son
cerca del 90% de las bajas de las guerras. En este cálculo entran las muertes
producto de batallas, masacres, hambrunas, pestes y genocidios durante los
conflictos. Fuente: Wikipedia (Guerras por número de muertos).
[21] El plutonio extraído del reprocesado del combustible gastado en
los reactores sería usado como combustible en una nueva generación
de reactores, llamados de alimentación rápida o Fast Breeder Reactors(FBR). Se esperaba
que resultara un proceso de alta eficiencia energética si lograba ser controlado
a nivel tecnológico, por lo que muchos países buscaron acceso al plutonio para poder
participar en el desarrollo de los FBR. Walker (2006).
[22] Samuel Cavero: Cuentos y Testimonios del Mundo.
Nosotros los inmigrantes, nosotros los emigrados. Terra Austral Editores, 274 págs., Sydney, setiembre 2004
[23] Aquí se expone el enfrentamiento entre la traducción
en español y en alemán.
[24] De hecho “actúa en beneficio de sus propios
intereses” parece ser una legítima pero restrictiva interpretación de una frase
que en el origen suena “actúa demasiado”, es decir, alejándose del recto principio
de moderación que es la vía del Tao.
[25] Sobre Lao Tse, se le considera uno de los filósofos más
relevantes de la civilización china. La tradición china establece que vivió en el
siglo VI a. C., pero muchos eruditos modernos argumentan
que puede haber vivido aproximadamente en el siglo IV a. C., durante
el período de las Cien escuelas del pensamiento y
de los Reinos Combatientes. Se le atribuye haber escrito el Dào Dé Jing (o Tao Te Ching), obra esencial del
taoísmo. De
acuerdo con este libro, el tao (o
dao, ‘camino’) puede verse como el cambio permanente y este es la verdad universal.
[26] Esto se aprecia claramente en la película La
naranja mecánica de S. Kubrick.
[27] https://iflacenarg.wordpress.com/kahan/
[28] http://nocturnario.com.mx/revista/entrevista-con-ernesto-kahan-un-poeta-universal/
Fuente:
Escritor Samuel Gamero Galimidi
cavero2012@hotmail.com