Danilo Sánchez Lihón
1. Hondos
y tajantes
El
cuento Paco Yunque lo escribió César Vallejo en el mes de abril del año
1931, cuando radicaba en la ciudad de Madrid. Y lo alcanzó a concluir
motivado por el pedido que le hiciera la casa editorial Cenit de un
cuento para niños, que luego que cumpliera con darle forma definitiva y
presentarlo a la editorial, esta lo rechazó por ser “demasiado triste”,
según el testimonio de Georgette de Vallejo.
Y,
ciertamente, es un doloroso mural de la injusticia social que
contamina, corrompe y agrede incluso a nuestros propios niños y se
traslada hasta el aula escolar, como diciéndonos que este es un tema
ante el cual sucumbe hasta la misma escuela. No se dice en él en qué
centro educativo ocurren estos hechos. No se sitúa en ningún lugar o
región. No es sierra, no es selva, no es costa. Queriéndonos expresar
con ello que acontece en todas partes, épocas, lugares y direcciones de
la rosa de los vientos.
Se
perpetra en diversidad de sitios, climas y latitudes. Aquí en el Perú
como en otros lugares del mundo. Más aún en los países que ostentan o se
ufanan de ser ricos en donde son más lacerantes estos conflictos, al
punto que hasta no hace mucho la segregación racial era ley en un país
llamado desarrollado y todavía muchos años después a la fecha en que se
escribiera este cuento.
2. Nos
desafía
Es
una denuncia frontal y deja expuesta la vergüenza y humillación que
significa mantener las diferencias de clases sociales que en este caso
resultan tan radicales que dividen a la población en nuestros países.
Es
metáfora y látigo en la mano para mantenernos despiertos, desvelados y
en vigilia. Conscientes de que hay muchos casos de personas que ya
tienen incrustado en su espalda o su pecho el puñal de la discriminación
hiriendo sus entrañas, y ellos son principalmente niños y jóvenes.
Perspectiva
en la cual Paco Yunque no solo es el personaje infantil de la
literatura que ha pasado a formar parte de nuestra escena cultural, sino
que, rebasando el ámbito de un cuento, su imagen constituye ya un
símbolo de la infancia desvalida, con un perfil nítido, producto de la
invención literaria de un autor de extraordinaria significación como es
César Vallejo
E
igual, también se lo siente como un espejo de nosotros mismos, que nos
desafía a mirarnos y a reconocer por entero en el rostro antes oculto de
lo que somos y tenemos de defectos, descarríos y equivocaciones.
3. De tiza
y pizarrón
Paco
Yunque revela los abismos en que nos debatimos, que no son tanto los de
la geografía externa, abrupta e intrincada, con barrancos y bajíos de
suyo hondos y tajantes, como son las otras brechas que dividen y
enfrentan a los seres humanos en nuestras sociedades, y que están al
interior nuestro convertidos en prejuicios, convenciones y
estratificaciones entre seres humanos.
Como
es cuando reluce en el cuento la prepotencia, la soberbia y el abuso
impunes, infligidos desde un sector pudiente e insensible, confortable
pero apático, que brilla pero que es indolente, con la permisividad y
hasta complacencia de los adultos, actitudes ya tempranamente encarnadas
en los niños.
Y
ello en complicidad con la escuela y el sistema educativo vigente,
crítica hecha desde dentro por quien en su ser íntimo e íntegro siempre
fue un maestro de aula y trabajó efectivamente en su vida como tal, como
lo fue César Vallejo. Poeta esencial pero también maestro de alma y
tuétano, de tiza y pizarrón, de letra pareja y voz cordial, como lo fue
en muchas épocas y lugares, no solo en Trujillo y Lima sino también en
Huambo, en París y en Madrid.
4. Y
al frente
Donde
la escuela, en el cuento Paco Yunque, aparece cómplice de una situación
anómala. Y, es más: encubridora y consagrante de aquellas aberraciones
que se muestran en el cuento.
Y
no como las idealizaciones que se plasman en los discursos oficiales o
en los informes administrativos de escuelas o colegios aparentemente
correctos y aceptables, sean públicos o privados.
Cuando
se permite en el relato de César Vallejo que sea el lugar donde se
miden e imponen los abismos sociales, culturales y económicos. Lugar
antelado de exclusión, actitud represiva y discriminatoria, configurando
con esta imagen al Estado que permite, propicia y hasta justifica estos
y otros oprobios y atropellos.
En
donde no deja de estar también presente el develamiento de la careta y
la denuncia a la figura del profesor timorato, pusilánime y acobardado
frente a esta como a cualquier otra situación. Y
al frente, al otro lado, y como la cara opuesta a lo aparente y
convencional, lo descarnado: la humillación, la impotencia. Y el llanto
del niño humilde y desolado.
5. Sangrar
por dentro
Paco
Yunque es el personaje niño que se impone con nitidez como una herida
abierta, como lo quebrado de la niñez, como descorrer la cortina para
ver en qué andamos lesionados, contusos y mal parados en la cultura de
nuestro país y cuya propuesta ha surgido desde la literatura peruana.
Quizá
porque el problema mayor y profundo que aún nos aprisiona sea una
búsqueda angustiosa de nuestra verdadera armonía, equilibrio e
identidad. De ser una sociedad conciliada consigo misma, y no dirigida y
enfrentada como ya aparece en la infancia y entre nuestra niñez
Cuento
en el cual nos revela su autor cómo sangramos por dentro cómo nos
herimos y maltratamos. ¡Todos! Y que es desde donde devienen tantos
males de desadaptación y de inconductas que hacen tanto daño a nuestra
sociedad
En
donde en realidad no solo el afectado es Paco Yunque que se queda
llorando, y en quien el problema cala en su ser integral. Sino que todos
estamos afectos e involucrados como conciencia moral que se crispa, se
estremece y se conmueve. Y no solo por Paco Yunque sino por la
indignación que cala en contra del sistema imperante en el cual hay
roles que se tienen que cumplir como víctimas humilladas y victimarios
envilecidos.
6. La lucha
social
Paco
Yunque es un cuento de tesis, para generar debate, discusión ardua y
enfrentamiento cabal a fin de dejar tersa, diáfana y transparente una
antítesis, un esclarecimiento y una verdad que se traduzca en decisiones
a tomar.
Es
una idea primera que necesariamente provoca contrapropuestas, a fin de
que aparezca la idea segunda que será opuesta, contraria y antagónica a
la idea inicial y que fuera el punto de partida.
Es
un cuento dialéctico, escrito para provocar una respuesta en la acción,
y ya no como escritura, réplica e impugnación, movimiento y acto que
debe surgir del alma y de la mente del lector pero que se concretan en
sus pasos, y adónde camine a partir del cuento leído.
Propone,
busca y exige una solución al problema planteado. Y lo busca no en los
renglones que ya están escritos sino a través de aquellos que nacen y
parten del alma afectada del lector.
Con
lo que Paco Yunque se convierte en protagonista de un tiempo presente y
por venir, hasta que se instaure aquí un nuevo orden, efecto de la toma
de conciencia y de la lucha social.
7. País
yunque
El
cuento Paco Yunque en realidad recién empieza cuando el relato termina.
Tiene como característica principal ser un relato para la indignación,
para sublevarnos y para que cada quien busque e intente una fórmula de
resolver esta situación que ha afectado nuestra dignidad y conciencia
moral.
Es
un texto sin final, porque no puede serlo jamás el que un niño se quede
llorando inconsolable al borde del corredor o del patio. En todo caso
es el inicio para contar y emprender algo. Es más bien el comienzo de
una historia de toma de conciencia y de rebelión.
Está
escrito de la manera cómo está escrito para idear estrategias y
fórmulas cabales y certeras de acabar con todo esto y transformar la
realidad.
Es
una obra abierta, inconclusa, que incita a buscar finales distintos en
la solución del problema planteado. Es una historia para modificarla en
el texto y en el contexto de la vida real.
Con
esta obra Vallejo sigue siendo el gran poeta de lo esencial de la
humanidad, cuál es la esperanza y la redención, donde él a la vez se
erige como el autor del cuento más famoso del Perú, país yunque en el
cual tenemos el compromiso de forjarnos para todos un nuevo porvenir.
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CONVOCATORIA