CORREO DE SALEM DE EDUARDO GONZALES VIAÑA
A modo de comentario
Por. Víctor Nolberto Unyén Velezmoro (*)
Ha transcurrido casi treinta años en que nuevamente tengo el honor de comentar un libro de mi amigo Eduardo Gonzales Viaña, notable escritor nacido en Chepén (La Libertad), el 13 de noviembre de 1941, por lo tanto, pertenecemos a la misma generación de las añejas aulas de Simón Bolívar y Sánchez Carrión, la vieja casona de la Universidad Nacional de Trujillo; yo nací en Chimbote el 22 de enero de 1943; y digo han transcurrido casi treinta años, porque el 03 de abril de 1985, en mi calidad de director del Instituto Nacional de Cultura de Chimbote, presenté en el local de la Asociación “Wha Yoi”, su libro: “El Tiempo del amor”, con el que empezaba su vertiginosa carrera como docente y escritor que lo llevó a traspasar las fronteras de la patria amada, para radicar en Salem, capital del Estado de Oregón en los Estados Unidos de Norteamérica.
Al leer casi corriendo los dos libros “Caminar entre las nubes” y “El norte del norte”, para poder cumplir con el compromiso asumido con mi amiga la rectora Dra. América Odar Rosario, que se comunicó telefónicamente conmigo el día martes 3 por la tarde de este mes de febrero, solicitándome que comente los dos libros de Eduardo, lo que ya para mí era un privilegio; desde ya pido disculpas por las falencias que pudiera incurrir en esta hermosa responsabilidad; de incursionar en el mundo de las letras, privilegio de aquellos que pueden viajar a las diferentes dimensiones del espíritu y dialogar con los dioses .
Dos libros de relatos, sobre experiencias vividas, contadas o comentadas, resaltando acontecimientos varios, de personajes meritorios, filosofando y analizando la realidad de Estados Unidos y por supuesto el Perú, del que jamás se ha desligado pese a la distancia que separa a ambos países; y lo hace con la autoridad que le da su condición de respetado escritor, periodista y maestro universitario, desde septiembre de 1993 en la que ingresó a enseñar en la Universidad de Western Oregón en los Estados Unidos de Norteamérica. Escribo –nos dice Eduardo- “un ‘Correo de Salem’ cada semana para varios miles de amigos en el mundo y para unos cuarenta periódicos de las Américas y España”; soy uno de esos privilegiados amigos que recibe cada semana un “Correo de Salem”, el último “Pulpines y pulpones”, sobre los acontecimientos en que la juventud peruana salió a las calles a protestar y defender sus derechos.
El Primer Libro “Caminar entre las nubes” 83 crónicas, distribuidos en seis secciones, con títulos sugestivos, con un estilo diáfano, que denota el manejo del idioma, compenetrándonos con los relatos, algunos de ellos, atentados contra niñas indefensas, y crímenes de lesa humanidad, como el “Dios y el demonio de Acomarca”, que jamás deben repetirse en nuestra patria, ni en ningún lugar del mundo, y menos prescribir sin sancionar a esos criminales sin nombre.
“En un héroe norteamericano”, describe a través del heroísmo de los hermanos Dolan, la vivencia de los jóvenes soldados de ese país peleando en lugares remotos y su contacto permanente con la muerte; que lo hace filosofar: “Todos los días la muerte nos muestra su cara, pero si hemos creído en la justicia y hemos sabido amar a nuestra gente, seremos nosotros quienes la esperemos y le digamos: bienvenida, hermana Muerte”. Nos trae al presente al pelirrojo Archie de las revistas comics de los años sesenta, para describirnos “el pacifismo por el que muere Archie Gómez”.
Según el Papa Francisco, “el capitalismo neoliberal ha sido construido como una idolatría del dinero. El supuesto liberalismo de ese sistema y el fin de las regulaciones ocasiona el lucro excesivo de unos pocos y a la destrucción material y moral de los pobres”.
Me hizo recordar nuestro tiempo de dirigentes universitarios, a Wálter Palacios Vinces por el MIR y a D´Angelats por el APRA; grandes oradores que enervaban a las masas estudiantiles de la década del sesenta, a Wálter Palacios, con sus incendiarios discursos mencionando citas bíblicas: “Más fácil es que ingrese un camello por el ojo de una aguja, que un rico en el reino de los cielos”; así conocí a Manuel Ibáñez Rozaza por el APRA y al candidato opositor Eduardo Gonzales Viaña, por la Secretaría General de la Facultad de Letras. Dos años después -1966- tuve el privilegio de compartir la Federación Universitaria de Trujillo (FUT), con Wilfredo Kiaman y Marco Antonio Barboza Medina, Presidente y Vicepresidente de la FUT.; con Rufo Cárcamo de la Facultad de Derecho; Pompiú de Ciencias Económicas, Franklin Ayala de Biológicas, entre otros conspícuos dirigentes estudiantiles; Jorge Ruiz Dávila, que llegó a ser rector de la UNT, Ernesto Barriga del Barco, y quien les habla, fuimos los representantes de la Facultad de Farmacia y Bioquímica.
Por R. Nº 282-90 ANR, el Dr. Marco Antonio Barboza Medina, integró con el Dr. Juan Manuel Cisneros Navarrete, la Comisión Organizadora de la Universidad Nacional del Santa, en calidad de Vice Presidente Académico; incorporándome como profesor contratado en la Facultad de Ciencias, Escuela de Enfermería, del que tengo gratos recuerdos.
Eduardo Gonzalez Viaña, en “Correos de Salem”, resalta frases anecdóticas pero terriblemente ciertas sobre el pensamiento de algunos líderes políticos, como la de Alan García al designar a nuestros hermanos de la selva: “ciudadanos de segunda clase” p20.; el “milagro del amor” refiriéndose a nuestra paisana huarasina la beata Sarita Colonia, p.23; “Mi mejor amiga cumple 127 años”, una sequoia sembrada el año de 1887, y que para Navidad la adornan e iluminan sus 100 m. de altura; recoge la opinión de Antonio Melis, escritor italiano, que “opone nuestra América en la que los creadores e intérpretes culturales prolongan la pasión de una cultura sumergida pero rebelde” p.31; rescata del olvido al gran poeta Oscar Imaña, “uno de los mayores del famoso Grupo Norte”, conocido también como “Bohemia”, que tuvo vigencia entre los años 1916 a 1926, en Trujillo, integrado entre otros por César Abraham Vallejo Mendoza, Víctor Raúl Haya de la Torre, Antenor Orrego, Alcides Espelucín, Macedonio de la Torre, José Eulogio Garrido, entre otros ilustres peruanos.
Nos alcanza unos versos que reflejan la dimensión e intensidad de la poesía de Oscar Imaña, “¿Por qué te ocultas, Dios? Yo te interrogo / con la ansiedad de todo lo que llora … hasta cuándo será silenciosa la Muerte… … hasta cuándo tus manos la ocultarán, Señor…”; comparable con la del poeta universal César Abraham Vallejo Mendoza: “Dios mío, si tu hubieras sido hombre, / hoy supieras ser Dios”, del poema los “Dados eternos” dedicado a Manuel Gonzales Prada, autor de “Pájinas Libres” y “Horas de Lucha”.
Chimbote le rinde permanente homenaje a César Abraham Vallejo Mendoza, haciendo historia, el 16 de noviembre de 1958, el Dr. Darío Chávez de Paz, mi brigadier general en el Colegio Nacional “San Pedro” (1956), obtiene el 1er Premio en el Concurso Literario organizado por el Centro Cultural Universitario “César Vallejo” de la UNT, con el poemario “Si, Hermano Vallejo”, presentado con el seudónimo “Tino” y que fuera editado el año 1960 por la Federación Universitaria de San Marcos, aquí un fragmento de: Si, Hermano Vallejo...
De: Darío Chávez de Paz
I. Sí, hermano Vallejo, mayor de mis hermanos
déjame que te diga el mensaje de mi alma.
He venido a pedirte a solas y a decirte,
¡dame un poco de tu agua para la tierra, hermano!
Hay un campo sagrado que yo poseo en mi alma
donde roseo el trigo que ha de nacer mañana.
Quiero darle a los hombres que coman,
quiero darles , sólo un poco de trigo
que haya nacido en mi alma.
He venido a pedirte agua para su riego.
¡Mírame que no temo tu profunda mirada!.
También le dedica en “Resiste, compañero Víctor”, al cantor Víctor Jara asesinado por la dictadura de Pinochet: “Mataron al cantor, pero el cantor no se calla. Torturaron al antiguo seminarista, pero Cristo lo había hecho inmortal. Le cortaron las manos, pero su guitarra sigue sonando. 25 años después, la seguimos escuchando. Resiste, compañero Victor: “Venceremos, venceremos, socialista, será el porvenir”.
“Ser Maestro en el Perú”, se refiere al maestro José Ramos Bosmediano, uno de los fundadores del Sindicato Unitario de Trabajadores de la Educación Peruana (SUTEP), el año 1972. “Las manos de Rosa”, dedicado al ejemplo de lo que debe ser un médico, Rosa Guerzoni Chambergo, inmensidad de amor a sus pacientes quemados, sobre todo a los más pobres, a los más necesitados; las palabras del Cardenal Romero, refiriéndose al Nazareno “Podrán matarnos, pero la palabra queda. Y la palabra es Cristo”.
Pero, también “Correos de Salem” es denuncia en “Otro sol es el sol de Pacasmayo”, refiriéndose a la empresa BEFESA de España, que viene construyendo en Cerro Chico a 2 km. del mar, sin autorización alguna, un basurero tóxico que en caso de un desastre, destruiría toda la vida marina afectando las poblaciones comprendidas entre la zona de Pimentel y Chimbote.
Evoca a la que fue su esposa Nancy madre de sus tres hijos, que murió de cáncer. Yo sé lo que es luchar contra ese mal, a mi me diagnosticaron el año 2005 un carcinoma III en la vejiga, seguí un tratamiento con unas vacunas francesas de BCG durante 4 años, a partir de esa fecha sigo con controles anuales; en mi blog he publicado diez Testimonios de “Mi lucha contra el cáncer”, que sería interesante leer. También menciona a Juan Vicente Requejo, a quien conocí en los claustros universitarios de Trujillo.
Lo que alteró mi sensibilidad, fue el relato “Todos somos lo mismo, sólo nos diferencia el amor”, donde menciona “Una novela en Chepén, la pequeña Cantón”, que trata sobre una pareja de jóvenes Tus San, hijos de chinos, en su travesía de la tierra de los dragones al Perú, ella embarazada, se ven en la difícil situación de tener que dejar en su país de origen a su hijita de tres años de edad al cuidado de una tía, en la seguridad de poder pronto recogerla, pero una serie de obstáculos se van a presentar que harán imposible ese reencuentro ante el dolor permanente de los padres; relato que refleja la inmigración, sus consecuencias, el resquebrajamiento de las familias. Ese enternecimiento será, porque yo soy Wha Yoi, Hijo de Tu San y nieto de Chino natural de Cantón.
Sobre el bicentenario de la Independencia de España el 2021, nos dice Eduardo Gonzales Viaña, “Este año se cumplirán 190 años de la proclamación de la independencia del Perú realizada en Trujillo, y si se olvidaron las pasadas gestas, por lo menos es aquí donde debe comenzar ahora a celebrarse el Bicentenario”; al que yo añado, querido amigo Eduardo, durante la independencia de España los pueblos se fueron liberando de sur a norte: Huarmey lo hizo el (16), Casma (17), Nepeña y Moro (18), Santa el 20 de noviembre de 1820. Huaraz lo hace el 29 de noviembre de 1820, todas pertenecientes al departamento de Ancash. Trujillo lo hace un mes después, el 29 de diciembre de 1820; antes de la Proclamación de la Independencia del Perú por Don José de San Martín el 28 de julio de 1821.
“El patriota don Manuel Pomiano, cura de Moro, Capellán voluntario de nuestras tropas, presente en la jura de la Independencia de Trujillo, expresa en su expediente que por orden de Torre Tagle, marchó desde Nepeña el destacamento comandado por el Sargento Mayor don Juan Franco y el Capitán Félix Olazábal, más tres alféreces y 166 soldados para auxiliar a la ciudad de Trujillo.
En “Vallejo y los telegramas de Antenor”, se refiere a los urgentes telegramas del poeta y filósofo Antenor Orrego, urgiéndole a César Vallejo viaje a Paris que se negaba hacerlo; el último decía “En París espérate destino stop Perú la cárcel stop Antenor”. El juicio contra Vallejo había sido reabierto y le esperaba probablemente la cárcel “Salir del Perú era escapar de los infiernos”.
Aquí en Chimbote radican familiares del poeta universal César Vallejo Mendoza; aquí vivió y trabajó como docente don Jorge Vallejo Ciudad, hijo de Manuel Natividad Vallejo Mendoza, el sexto hermano, y sus descendientes. Ellos poseen cartas originales de César Vallejo, una fechada el 16 de julio de 1916, enviada desde Trujillo; y la otra el 16 de junio de 1923, desde Lima, que entre otras dice: “Mi queridísimo hermanito Manuel: Dios te conserve bueno, lo mismo que a Juanita y todos tus chiquitos. Te pongo esas líneas para anunciarte que mañana me embarco con rumbo a Paris. Voy por pocos meses, seguramente hasta Enero o Febrero y nada más. Voy por asuntos literarios, y ojalá me vaya bien”. Esta carta luego que la publiqué en mi revista “Futuro”, en el mes de mayo de 1992, sirvió de portada en la revista cultural del Diario oficial “El Peruano”, y luego que le comenté a Jesús Cavel, durante el I Encuentro Andino de Escritores, organizado por la UNT y realizado en Santiago de Chuco del 10 al 14 de junio de 1997; me visitó en Chimbote, posteriormente las publicó en su libro “César Vallejo. A lo mejor soy otro. 27 nuevas cartas”, y en otro libro sobre Vallejo editado por la Universidad Católica del Perú”, indicando la fuente. Esas dos cartas las volví a publicar en mi libro “Ancash, un viaje por la historia – La Enciclopedia de Ancash”.
Nos habla también de Javier Heraud, de Ciro Alegría. “Todos somos lo mismo solo nos diferencia el amor”; el amor como uno de los más altos pilares para forjar un mundo mejor donde impere la PAZ Y LA JUSTICIA.
El libro II “El Norte del Norte”, dividido en cuatro secciones conteniendo 73 relatos, cada uno siguiendo la misma temática estructurada de “Correos de Salem”, cortos, dinámicos, entretenidos, con una gran técnica literaria, estilo peculiar, impregnados de nostalgia, evocaciones familiares; como el buen vino que ha alcanzado su tiempo, en esta caso, la edad exacta.
“De la Puente y Don Quijote”, semblanza al guerrillero paisano de Vallejo; del que tengo un vivo recuerdo de mis tiempos de estudiante en la UNT. La novedad y la noticia fue en ese tiempo, el juicio a Luis de la Puente Uceda en la Corte Superior de Justicia de Trujillo, por un crimen contra un partidario aprista, que lo atacaron en grupo frente a la Plaza de Armas. Esa mañana escuché una de las defensas magistrales del abogado Luis Castro Lavarello, el defensor de la Brea y Pariñas contra la International Petroleun Company; dio una perfecta cátedra de anatomía criminalística, describió la forma del disparo, de abajo a arriba, el recorrido de la bala por los diferentes huesos del cráneo, demostró la defensa propia y consiguió la libertad de Luis de la Puente Uceda.
Y en “Mi primer canillita, un senador de la república”, se refiere a don Octavio Alva, cacique político de Cajamarca durante más de medio siglo, diputado, senador, ministro de varios regímenes, hacendado todopoderoso y, por cierto acérrimo conservador. Relata Eduardo Gonzales Viaña, “interrumpió mi discurso para preguntarme quién era mi padre, descubrir de inmediato que era su primo hermano, un parentesco que yo ignoraba”.
Lo que es la vida, Octavio Alva fue primo de mi abuelita materna Mercedes Alva León, natural de Cascas – Contumazá, cuando pertenecía al Departamento de Cajamarca, la cuna de los Alva. Mi madre es Victoria Velezmoro Alva, natural de Cascas, hoy pertenece a la región La Libertad. Precisamente su sobrino Javier Alva Orlandini, Vicepresidente de la república, senador de la república, Ministro de Estado, presidente del Tribunal Constitucional, fue uno de los gestores de la creación de la Universidad Nacional del Santa; y particularmente fue quien me presentó al Dr. Luis Felipe Alarco, que prologó mi libro “El Despertar de un coloso” el año 1979.
En este recorrido fascinante por los “Correos de Salem”, me he permitido compartir vivencias, traer a la memoria pasajes escondidos en algún recodo de mi ser a través del tiempo, pensar que la edad vivida no ha sido en vano y que aún podemos seguir volcando nuestras experiencias, a través de Testimonios, o en “Un viaje por la historia”.
Estoy seguro que esta saga, tratándose de vivencias del autor; o varios libros con diferentes títulos, temática, con el mismo estilo descriptivo, diáfano, pero que forman parte de lo que Eduardo Gonzalez Viaña, los ha unificado con el título de “Correos de Salem”; próximamente saldrán otros a la luz, para deleite de sus lectores; que nos permitirá compartir sus vivencias, conocimientos; sus denuncias, tratando de filosofar y construyendo nuestra propia historia. Libros que los invito a leerlos y formar parte de su selecta biblioteca.
BIENVENIDO A CHIMBOTE EDUARDO GONZALES VIAÑA. BENDICIONES ESTIMADO AMIGO Y QUE CONTINUEN LOS ÉXITOS Y PRODUCCIÓN LITERARIA, EN EL QUE ERES UN MAESTRO.
(*). Director de IFLAC en Perú
Delegado Honorario y Embajador de la Paz de IFLAC en Perú