Danilo Sánchez Lihón
Cuando planté rosales
coseché siempre rosas.
Amado Nervo
1. Amor
seráfico
En
el calendario de efemérides de la literatura infantil, el día 31 de
julio será siempre fecha dedicada a Rosa Cerna Guardia, porque este día
del año 1926 nació en Huaraz esta avecilla herida de ternura, maestra de
niños y quien nos dejó el 10 de diciembre del año 2012.
Quien
obtuvo para el Perú diversos premios internacionales en el campo de la
literatura infantil y juvenil, entre otros el Primer Premio en el
Concurso Internacional de Literatura Infantil IBBY de Chile el año 1968,
y el Premio Lazarillo de España, también en el año 1968. Pero
igualmente es un deber rendirle homenaje el 30 de agosto fecha de Santa
Rosa de Lima que inspiró su nombre.
Pero
más, porque no hay rosa más primorosa que ella en el jardín de la
palabra iluminada y hecha fiesta, encanto y prodigio. Porque al
celebrarla recordamos exacta y cabal a esa flor mística del amor
seráfico como es Santa Rosa de Lima.
2. Ovillo
de luna
Porque
más que una autora de poemas y cuentos sorprendentes y conmovedores, en
donde los personajes dejan el marco de un cuadro antiguo y bajan a
pasearse con nosotros, es ella misma madeja de oro y ovillo de luna.
Y
quien, a partir del bosquejo de un duende hecho de un suspiro o de un
pedazo de madera, hace un duende verdadero que juega, hace travesuras y
cumple entre nosotros un destino superior.
De quien, asaltan siempre mi memoria aquellos versos que de alguna manera la definen, representan y rinden culto:
Mi voz nació de entre las cordilleras,
de tanto imitar el eco en las montañas,
de tanto enhebrar el ovillo de la luna
entre sauces y retamas.
3. Siempre
en primera voz
Y continúa en esta semblanza interior, que más es confesión y es comprometerse no con algo sino con mucho:
Me viene el canto por la paternidad del viento
la maternidad directa del agua en los arroyos,
por la lluvia, el trueno, el rayo y el arco iris.
También por la hermandad del nido con mi casa
un mismo árbol teníamos delante que avecinaba trinos
y una población de estrellas en la noche
capaz de recogerlas con las manos.
no por mí misma. Por mi tierra de origen,
tierra de cántaros sonoros. Yo recibí por refracción
entre sus altos hornos toda la ternura que hay en mis palabras,
me fue fácil: sólo dejé que mi alma alfarera
copiase hacia adentro su belleza.
4. Huellas
en el suelo
Tanto
es así que es ella, más que creadora de una literatura fantástica, que
recorre esa dimensión de lo ilusorio con solvencia y convencimiento,
como con excelente calidad, perspectiva en la cual Rosa Cerna nos ha
donado el bien excelso de una forma piadosa de ver el mundo; y de una
actitud compasiva frente a la realidad y a la vida. Ella es ejemplo de
una manera de vivir, llena de gracia y encanto, de fascinación y
asombro; capaz de hacer de un orden deleznable un instante de fina y
honda trascendencia:
Traduzco mis poemas con la escritura de las aves en el suelo.
Otras veces con el canto.
Es mágico este mi universo construido.
No sé si es mejor el canto de las aves unido a mis palabras
o mis palabras dichas en el tono de las aves.
De la escritura sí estoy segura. Todos sus garabatos en el suelo
son mis verdaderas traducciones.
Lo que levanta el viento, viento mío, original, sereno, inconfundible.
Mis palabras van siguiéndose unas a otras en vuelo continuado,
no se pierden en el aire, las huellas dibujadas en el suelo
las orientan.
5. Directo
al corazón
Tampoco
yo sabría decir, por ejemplo, en qué campo es más grande la obra de
Rosa Cerna, si en la poesía o en la narrativa, si en la literatura o en
el aula de clases, si en el centro educativo o en la vida diaria.
Quizá
en sus garabatos, como ella los llama, pero esta vez en la pizarra en
donde supo escribir la mejor literatura infantil del mundo, trazos de
muchas cosas, principalmente de sueños.
Pero más presiento que ha sido en los garabatos que ella ha ido dejando en el alma de sus niños, y como claves de existencia.
Y
lo intuyo por sus cuentos, que ella misma nos narra, cómo esos
garabatos trazados en esa superficie verde oscura hecha de piedra gris,
como es la pizarra escolar, se encienden y pueden alcanzar brillos,
fulguraciones y resplandores maravillosos y sorprendentes.
Sospecho que en la educación está su obra magistral, ahora inhallable porque fue esparcida en el tiempo y fue directo al corazón de quienes fueron sus alumnos.
6. Grabarse
en letras de oro
Y de algún modo se ha confesado en ello, reafirmándose, al decirlo así:
Si me fuera dado
volver a elegir lo ya elegido,
me quedaría como soy:
el mismo nombre,
la misma ternura agazapada
y este afán de velar por los niños
ajenos
como una lumbre en el pueblo.
Y
estas otras palabras, que a continuación cito, escritas por ella en ese
famoso y nunca suficientemente leído y releído cuento titulado “La niña
de las trenzas azules”.
Palabras que deberían grabarse en letras de oro y colocarse como un cartel que veamos todos los días en el dintel de toda escuela y de toda aula de clases.
7. Por
el cielo azul
Estas
palabras fueron dichas cuando la maestra, hablando con la niña que
representa a una vendedora de pajarillos y que anda por el escenario con
su pajarera llena de papeles de colores que se hacen avecillas,
ofreciéndolos a la gente que pasa, al ver tan perfecta la escena la
maestra le dice:
Ahora sólo hace falta que te enciendas,
que irradies, que pongas tu alma.
Estas
frases constituyen todo un lema, una bandera y un estandarte para cada
vida humana de hoy. Debe ser un grito de guerra y de paz que nos
levante, que nos eleve, que nos vivifique.
Y
tenga el poder que tienen en el cuento, de convertir los papeles
plisados, dormidos e inocentes de ingenuo origami, en impulsos fuertes
de pajarillos vivaces y pujantes en nuestras manos, posados luego en
nuestros corazones y revoloteando por el cielo azul.
*****
Los textos anteriores pueden ser
reproducidos, publicados y difundidos
citando autor y fuente
dsanchezlihon@aol.com
danilosanchezlihon@gmail.com
Obras de Danilo Sánchez Lihón las puede solicitar a:
Editorial San Marcos: ventas@editorialsanmarcos.com
Editorial Papel de Viento: papeldevientoeditores@hotmail.com
Editorial Bruño, Perú: ventas@brunoeditorial.com.pe
Ediciones Capulí: capulivallejoysutierra@gmail.com
Ediciones Altazor: edicionesaltazo@yahoo.es
*****
DIRECCIÓN EN FACEBOOK
HACER CLIC AQUÍ:
*****
Teléfonos Capulí:
393-5196 / 99773-9575
capulivallejoysutierra@gmail.com
Si no desea seguir recibiendo estos envíos
le rogamos, por favor, hacérnoslo saber.