CAPULÍ,
VALLEJO Y SU TIERRA
Construcción
y forja de la utopía andina
2014 AÑO
DE LA BATALLA DE LA LECTURA
Y
ESCRITURA POR LA
CONSTRUCCIÓN
DE UN MUNDO MEJOR
MAYO:
MES DE LOS TRABAJADORES,
DEL
LEGADO DE LA PAPA DEL PERÚ
AL
MUNDO, Y DEL MAESTRO ENCINAS
CAPULÍ ES
PODER CHUCO
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CELEBRACIÓN A CÉSAR VALLEJO
HECHA POR REZADORES DE
SANTIAGO DE CHUCO
PRESENTA CAPULÍ, VALLEJO Y
SU TIERRA DE MADRID,
FILIAL DIRIGIDA POR EL DR.
CARLOS BENITES SÁNCHEZ
ABRIR AQUÍ:
https://www.youtube.com/watch?v=oeYvb1nP9r8
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POETA PLANETARIO
En memoria de
César Vallejo Ynfantes,
cuyo espíritu
peregrinó con nosotros,
en este
Capulí 2014.
Nació un poeta, como
otros, éste también cantó a las piedras; pero, las piedras que aludía este
poeta eran caravanas de gorriones de alas azules, dispuestas a levantar
murallas, para que no avancen los malvados.
Y nunca una piedra
trenzó de luz y huellas el caminar del hombre. Y nunca una piedra inspiró tanto
amor a un poeta, como a este Poeta de los Andes.
Nació un poeta, como
otros, éste también cantó a la madre; pero, la madre de este poeta, además de
ser escapulario de fe, senos de hostia, también fue libertadora. Abrió de par
en par las puertas de la cárcel, donde el poeta estuvo recluido con grilletes
de tristeza y de pesares. Y nunca una madre fue mejor guerrera libertaria.
Nació un poeta, como
otros, éste también cantó a la amada; pero, la amada de este poeta no era musa
del Parnaso, no tenía el perfil de diosa griega. La amada de este poeta era una
mujer de pueblo. Sus manos eran flores silvestres de noviembre. Tenía la forma
de junco y olía a río. Su rostro era de capulí color de tierra.
Desde entonces, la
franela les sirvió a los poetas para hacerle poesía a las musas estrellas.
Nació un poeta, como
otros poetas, éste también cantó a la justicia; pero, la justicia que demandaba
este poeta, nada tenía que ver con las voluntades leprosas de los jueces
vestidos de harapos elegantes.
Este poeta creía en
una justicia redentora de los pueblos. Soñaba ver “al borde de una mañana
eterna, desayunados todos”.
Nació un poeta, como
otros poetas, éste también confesó sus anhelos; pero, los anhelos de este poeta,
eran contundentes. Quería que los pobres "Saqueen a los ricos sus
viñedos", porque mucho tiempo habían esperado ya, “al borde de una mañana
eterna”.
Nació un poeta, como
otros poetas, éste también habló a Dios, pero, este poeta, increpó de modo
horizontal a Dios, como nadie hasta entonces lo había hecho:
"Si tú hubieras
sido hombre, hoy supieras ser Dios".
(Y Dios aún piensa en esta frase que le dijo este poeta). Poeta
esencialmente de Ande. Universalmente Humano.
Se echó a andar por
los caminos de los parias, atizando sus sueños y estuvo ahí donde los hombres,
con sus manos y el alma, se esmeraban en construir un orden nuevo.
Y estuvo con los
milicianos de España, que luchaban por tomar "el cielo por asalto". Y
en ese intento fueron decapitados.
César Abraham
Vallejo Mendoza, es el nombre del poeta de Santiago de Chuco, del Perú al pie
del orbe.
El poeta se ha hecho
planetario por obra y gracia de vida y de su obra. Poeta sinónimo de Fuerza, de
lucha, de combate. Comandante del alma y la esperanza.
¡Luz de los pueblos
que se levantan como el sol cotidiano! ¡Es guía que conduce la senda libertaria!
JULIO YOVERA
Integrante
del colectivo
Capulí,
Vallejo y su Tierra
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31
DE MAYO, 1970
EL SISMO
DE
ANCASH
FOLIOS
DE
LA
UTOPÍA
DOS
MANOS
UNIDAS
Danilo
Sánchez Lihón
1
Por eso,
es un milagro dos miradas
que
se encuentran, y
más dos manos que se
juntan,
¡que
no importaría si acaso no
sepan
el prodigio
en que viven y que los ha
traído
a ser
dos manos unidas,
conscientes
o no!
No interesa si presienten o
no
los cataclismos,
maremotos y tifones que
ambas
han tenido
que vencer para que lleguen
a
esta hora
en punto, a encajar una
mano
en el cuenco
de la otra. Y no interesa
que
ignoren
que se hundirán para
siempre
en la noche que
nos espera hasta la
eternidad
de los tiempos.
2
Las dos manos juntas
tampoco
se percatan
de los peligros que las
acechan:
por encima
por detrás y debajo. En
realidad
en todo sentido.
Así, él y ella conversan
libres y
simples,
sin que nadie les avise que
hay
un abismo
y turbión encima y al pie
de sus
manos
entrelazadas, erigidas solo
por
un breve
instante frente a tanta
tiniebla
y catástrofe,
frente a tantos barcos que
se
hunden
y aviones que explosionan
en
el aire.
¡A caminos que se juntan
¡es
cierto!
pero también a otros que se
van
se alejan, se cortan y
separan;
como
destinos que dividen,
bifurcan,
y separan!
3
Dos
manos indefensas que
mezclan
sus latidos,
como el temblor
acompasándose
en sus venas,
y en el pecho la voz que
emerge
límpida
para nombrarse con paz y
con
ternura.
Es tan mínimo e inmenso
este
prodigio
cuando dos manos permanecen
siquiera
un instante unidas, que de
ello
depende
toda la marcha del el
universo:
que el mundo
se salve para siempre o
ruede
indetenible
hacia el vacío, olvido y la
nada
definitiva.
4
¡No!
Es solo por esa razón que no
se hundirá
el mundo en el oscuro
torrente
de la noche
que nos asedia, en donde
todo
cae
y se pierde.
¡No se hundirá si es que
solo
dos
manos permanecen unidas y
sin
doblegarse. Solo aquellas
dos
pueden
redimirlo salvando todo. Basta
con que se
junten este mediodía la
suerte
del universo
entero habrá cambiado. Y
aún
más
si es que permanecen y no
se
separan.
Esta esquina donde te evoco
y
te reclamo
tanto en este atardecer,
amor
mío, entonces
habrá sobrevivido a todos
los
naqufragios.
YO
TE
BUSCO
Danilo
Sánchez Lihón
1
Cuando
sientes que alguien de
improviso
te llama,
y no sabes cómo es que
cinceló
tu nombre. Y
lo pronuncia. Y alrededor
tuyo no
hay nada, ni
nadie que lo sepa, ni te
expliques
un hecho así,
¡Inusitado cómo es este!
Porque
no hay nadie
en tu recuerdo. Soy yo
quien en
verdad
te estoy llamando tanto de
cerca
y de lejos.
2
Cuando
súbitamente te sientes
contenta,
mientras
alrededor tuyo nada ha
ocurrido.
O bien
cuando de golpe y
tenazmente
te llenas
de melancolía sin mediar
causa
evidente,
soy yo quien en verdad vine
a
verte y
a estar contigo, aunque
también
me apene.
3
Cuando
estás cierta que puedes
quedarte
sola,
aunque hay oscuridad y
amenace
la tormenta,
No es que te equivoques en
que
algo no
entre en la lógica de los
hechos.
Cuando
te sorprende una corazonada
en
una
calle o al salir o al
entrar en una
tienda,
Soy yo quien en verdad te
cuida
desde
lejos y estoy prodigándote
mi
amparo.
4
Cuando
te observas al espejo,
sonríes y te
estremeces
haber pendido súbitamente
sobre
un abismo,
cuando no sabes si has
regresado
o si tal vez
fue inevitable que cayeras
al vacío,
no dudes
soy yo quien permanezco en
vela
cuidándote.
5
¡Siento
que te llamo tanto! ¡Nos
llamamos
tanto!
que es por eso que también
la vida
existe.
Que por eso quizá morí un
día. Hoy
siento
que tantas veces hemos
estado al
borde
y sin soltarnos de este asidero
que
es la vida,
que es sólo por eso que aún
camino,
y voy
abrazada contigo en la
lejanía como
en la cercanía.
*****
El texto anterior puede ser
reproducido, publicado y difundido
citando autor y fuente
Teléfonos: 420-3343 y
602-3988
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danilosanchezlihon@gmail.com
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