Construcción y forja de la utopía andinaAGOSTO, MES DE LOS NIÑOS,DE LA JUVENTUD, LAS COMETAS,EL DEPORTE, EL FOLCLORE YDE LOS PUEBLOS INDÍGENASCAPULÍ ESPODER CHUCO
SANTIAGO DE CHUCOCAPITAL DE LA POESÍAY LA CONCIENCIA SOCIAL
*****10 DE AGOSTONACEMARIANOMELGAR
FOLIOSDE LAUTOPÍATROVADORYGUERRERODanilo Sánchez Lihón1. Lo cautivapara siempreEl poeta, trovador y guerrero Mariano Melgar nació en Arequipa, el 10 de agosto del año 1791, hijo del ciudadano español: Juan de Dios Melgar, y de la indígena: Andrea Valdivieso.Su hogar de infancia fue de condición humilde pero sus dotes y virtudes le dieron inmediata posición de gran categoría y honores. Y esto aun siendo niño, pues su talante era tan hermoso e inteligente en sus atingencias que inmediatamente ganaba el cariño y la admiración de la gente.Por su extraordinario talento fue inmediatamente apreciado, querido y respetado por maestros y catedráticos, por los clérigos, por personalidades del foro, y por todas aquellas personas académicas y socialmente cultivadas que lograban conocerlo, quienes se rendían ante él para expresarle su aprecio y su simpatía; y todo esto cuando él apenas era un niño.Porque fue niño prodigio, y precoz, aunque modesto en su comportamiento, quien a los 3 años ya conocía “todos los secretos de la lectura” y a los 8 dominaba el latín y el griego, siendo nombrado Auxiliar de Clases en la Escuela del Convento de los Franciscanos Descalzos de Arequipa.2. Razónpara morirSiendo apenas un adolescente traduce a los poetas, filósofos y oradores de la antigüedad; y lee aquellos textos a sus compañeros de clases en el colegio.Pero un día una niña incomparablemente hermosa, y tierna como un ángel, insufla su vida de singular arrebato y lo cautiva para siempre.Amor desventurado que finalmente lo lleva a la muerte, al abrazar, al mismo tiempo que no dejaba de amar a ese ser adorable, aunque lo había engañado, la causa de la revolución independista.Luchó convencido por esa motivación con las armas en las manos y en el teatro de la guerra, anhelando una patria liberada, pujante y pletórica, compromiso que en aquella época era poco menos que un suicidioSin dejar de amar a aquella niña, llamada María de los Santos Corrales, a quien él inmortalizó con el nombre de Silvia, sin dejar de ser su gran ilusión, su exaltación para vivir y la inspiración de sus versos.Y muy pronto también sin dejar ella de ser el motivo fundamental para su decisión, y la razón más que suficiente para morir, y a quien le dice:3. Donde los bienesson males¡Ay, amor!, dulce veneno,¡ay, tema de mi delirio,solicitado martirioy de todos males lleno!¡Ay, amor! lleno de insultos,centro de angustias mortales,donde los bienes son malesy los placeres tumultos.¡Ay, amor! ladrón caserode la quietud más estable.¡Ay, amor, falso y mudable!¡Ay, que por tu causa muero!¡Ay, amor! glorioso infiernoY de infernales injurias,león de celosas furias,disfrazado de cordero.¡Ay, amor!, pero ¿qué digo,que conociendo quién eres,abandonando placeres,soy yo quien a ti te sigo?4. Acaba,bravo marAntes de su inmolación, que ocurrió en la Batalla de Umachiri en donde cayó preso y fue fusilado, y a fin de seguir estudios de derecho y leyes en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, viajó a Lima; dejando a aquella chiquilla que luego él inmortalizó en sus versos, y quien al despedirse ambos ella hizo la promesa de no olvidarse ni abandonarlo nunca. Y ser leal por siempre, y a su retorno casarse.En el puerto de Mollendo le impresionó profundamente el océano, emoción que lo inspira a escribir su oda “Al autor del mar”, aún en versos clásicos:El mar inmenso viene enteroya parece tragarse el continente,aviva su corriente,y en eterno herviderochoca, vuelve a chocar…De aquí hasta donde raya el horizontese ve criar la blanquísima nube:se exhala, crece y sube;y al valle, al prado, al monteva a dar frescura y riego, y sus corrientessustentan y producen los vivientes…Acaba, bravo mar, tu fuerte guerra;islas sin puerto vuelve a las ciudades;y en una sola a mí con Silvia encierra.5. Levantadesos rostrosEn Lima estudia con ahínco, consagra versos de amor absoluto a Silvia, y se imbuye de los ideales independentistas. En medio de la conjura revolucionaria escribe su “Oda a Baquíjano y Carrillo” y también su “Oda a la libertad”, en donde dice:Oíd, cese el llantolevantad esos rostros abatidos,indios que, con espanto,esclavos oprimidosdel cielo y de la tierra sin consuelocautivos habéis sido en vuestro suelo…Y asume interiormente un compromiso pleno con la causa indígena y los ideales que exalta la revolución emancipadora, doctrina en la cual se torna en adalid. Su verbo se vuelve proclama de adhesión por los humildes. Su palabra se enciende a favor de los marginados y desheredados de la tierra, y su canto se llena de fervor por una patria libre y redimida. Sus ideales son de identificación con las aspiraciones populares y las poblaciones más desfavorecidas.En Lima da coherencia a sus ideas y a su vida: de amor devoto a una mujer, cual es Silvia, y de consagración a sus aspiraciones de libertad para su pueblo, cuál es el Perú su patria engrilletada bajo la dominación española.6. El amoren quejaPero al volver a Arequipa la pasión de su vida, Silvia, se ha comprometido con otra persona. Se muestra esquiva con él; y a quien aparentemente no le agradan las ideas que ahora él encarna y profesa.Y así, el destino trenza sus dedos para que el amor sublime que él siente por ella se convierta en desgarro, queja y lamento. Y, ¡en desengaño!No nació la mujer para queridapor esquiva, por falsa y por mudable;y porque es bella, débil, miserable,no nació para ser aborrecida.No nació para verse sometida,porque tiene carácter indomable;y pues prudencia en ella nunca es dable,no nació para ser obedecida.Porque es flaca no puede ser soltera,porque es infiel no puede ser casada,por mudable no es fácil que bien quiera,Si no es, pues, para amar o ser amada,sola o casada, súbdita o primera,la mujer no ha nacido para nada.6. El mundo enteroconjurarsePero su amor es mucho más que sus reproches. Quizá demasiado para escanciarse en el resentimiento. Y, más aún: en el cuenco reducido de una mujer. Pero tampoco puede quedarse con el desengaño. Mucho menos puede o quiere ocultarlo ni apagarlo. Descarta también, porque es imposible, el disimularlo. No puede tenerlo callado, lo hace público y manifiesto. Y se deshace en suspiros, lamentos y quebrantos. Y sucumbe ante las heridas que lo afligen:Bien puede el mundo entero conjurarsecontra mi dulce amor y mi ternura,y el odio infame y tiranía durade todo su rigor contra mí armarse;Bien puede el tiempo rápido cebarseen la gracia y primor de su hermosura,para que cual si fuese llama impurapueda el fuego de amor en mí acabarse;Bien puede en fin la suerte vacilante,que eleva, abate, ensalza y atropella,alzarme o abatirme en un instante;Que al mundo, al tiempo y a mi varia estrella,más fino cada vez y más constante,les diré: «Silvia es mía y yo soy de ella”.Pasión cuyo corolario fue morir en la Batalla de Umachiri, escenario en donde fue fusilado en el amanecer del día 12 de marzo del año 1815, a los 24 años de edad, y amanecer también de nuestra libertad.*****Los textos anteriores pueden serreproducidos, publicados y difundidoscitando autor y fuentedsanchezlihon@aol.comdanilosanchezlihon@gmail.comObras de Danilo Sánchez Lihón las puede solicitar a:Editorial San Marcos: ventas@editorialsanmarcos.comEditorial Papel de Viento: papeldevientoeditores@hotmail.comEditorial Bruño, Perú: ventas@brunoeditorial.com.peEdiciones Capulí: capulivallejoysutierra@gmail.comEdiciones Altazor: edicionesaltazo@yahoo.es*****DIRECCIÓN EN FACEBOOKHACER CLIC AQUÍ:*****Teléfonos Capulí:393-5196 / 99773-9575capulivallejoysutierra@gmail.comSi no desea seguir recibiendo estos envíosle rogamos, por favor, hacérnoslo saber.