sábado, 20 de octubre de 2018

GRACIAS, CARLOS - POR RICARDO AGUIRRE ARRIZ





 GRACIAS, CARLOS

Por Ricardo Aguirre Arriz



Después de su primer paso por el Ministerio de Economía y Finanzas, hemos tenido más de veinte ministros de Economía y me atrevo a retar a quienes me leen a mencionar uno cuya labor a cargo de la economía del Perú haya sido más trascendental que la de Carlos Boloña Behr.

Carlos Boloña fue un excelente ministro de Economía. Fue alguien que tuvo la valentía de asumir el cargo en el momento económico más difícil que podamos recordar los peruanos y alguien que puso en práctica sus convicciones económicas.

Veníamos del desastroso gobierno de García y no hacía mucho habíamos escuchado la famosa frase de Juan Carlos Hurtado Miller después de anunciar el fujishock: “que Dios nos ayude”. Sufríamos de hiperinflación y de terrorismo, no teníamos crédito con la banca extranjera y el país estaba literalmente quebrado. Fue en estas circunstancias que Carlos Boloña optó por ayudar a rescatar al Perú.

Carlos Boloña logró reinsertar al Perú en el mundo financiero internacional, creó las AFP y fue el principal artífice de la privatización de las empresas públicas, que solo perdían dinero. También desapareció la banca de fomento, al ver que era un hueco sin fin, y se inmoló al quedarse al lado del presidente Fujimori luego del autogolpe del 92. Él, al igual que muchos, fue un gran partícipe en la creación del Congreso Constituyente Democrático post autogolpe, que logró cortarle las alas al entonces expresidente García. García torpedeaba al Ejecutivo cada vez que podía y, en gran medida, fue la capacidad de diálogo de Boloña con Luis Alberto Sánchez lo que llevó al país a una salida ordenada después del cierre del Congreso en 1992.

Carlos Boloña, y pocos seguramente le dan crédito por ello, fue también una pieza clave en la captura de Abimael Guzmán al haber permitido el otorgamiento de recursos al general Ketín Vidal para que, en su función como director de la Dirección contra el Terrorismo (Dircote) pudiera llevar a cabo las labores de inteligencia que finalmente dieron con su captura.

Carlos Boloña fue un patriota, un gran economista y alguien que tuvimos el honor de tener al servicio de nuestro país. Como pasa con todo lo que tenga que ver con la época fujimorista, algunos lo quieren y otros lo odian, pero lo hecho, hecho está y lo que nos ha dejado Carlos Boloña lo vemos y vivimos a diario. Gracias Carlos.

Fuente:

Diario EXPRESO