Un saludo muy especial por el DÍA DE LA MADRE. Y digo especial porque existen madres muy interesantes pero sacrificadas que dejan y dan todo por el bienestar de su familia o hijos.
Mi saludo a la madre que sin haber parido entrega su valioso tiempo por la existencia de un ser humano.
Mi saludo a la madre que sin haber parido entrega su valioso tiempo por la existencia de un ser humano.
A la madre, dizque clasemediera, que labora como secretaria y tiene que hacer de todo para tener trabajo y no ser despedida por edad para que sus hijos terminen la universidad, inclusive hacer sacrificios mayores.
A la madre que nos limpia las calles de la ciudad en su mismo día, para que nuestras casas luzcan más bonitas.
A la madre que entrega su cuerpo para que su familia coma, en especial sus hijos sin padre conocido.
A la madre que se ha casado para salvar el honor, status y economía de su familia, llegando al sicólogo por falta de existencia.
A la madre que pide ser amante porque su marido lo es solamente en el papel, y necesita un hombre que la quiera y le alegre la vida antes de tomar una decisión fatal.
A la madre que sacrifica su belleza por dársela a lo negativo de la vida en beneficio de sus hijos que ya son mayores y siguen durmiendo al mediodía.
A la madre serrana que junto al fogón cocina alegre desde antes que cante el gallo para dar el desayuno a su familia.
A la madre selvática que sin zapatos compra ahorrando: vestidos, cuadernos y zapatos a sus hijos.
A la madre que nos brinda una sonrisa sin alma al hablar de sus hijos que son maravillosos y muy humanos a pesar de ser malvados con ella misma.
A la madre orgullosa que perdió a su único hijo en defensa de la vida o de la patria, reconfortándola que no fue un cobarde.
A la madre que tiene que abrazar al marido a pesar que se apagó el amor, pero calladita, porque se puede estropear el futuro de sus hijos.
A las madres de distintos colores y sabores, especialmente a las madres escritoras y poetas, todas bellas y peruanas, que estoicamente aceptan un camino pedregoso pero con la esperanza de una luz al final del camino sin machismo.
A mi madre que en un acto de amor con mi padre, dieron existencia a este ser que tiene multiples defectos y se supone, algunas virtudes, logrando matar a la muerte y al silencio.
También mi saludo a las otras madrecitas, a las que tuvieron hijos y hoy son abuelas, a las que son y a las que serán, que por inteligencia, suerte o bendición del Señor tienen una vida humana más humanizada.
¡Feliz Día de la Madre!
JOSÉ BELTRÁN PEÑA
Presidente-Fundador de la
"Sociedad Literaria Amantes del País".
