sábado, 21 de noviembre de 2015

DÍA UNIVERSAL DEL NIÑO - POR LUZ SAMANEZ PAZ, PRESIDENTA DE LA ASOCIACIÓN DE LITERATURA ANDINA INFANTIL Y JUVENIL (ALAIJ)






DÍA UNIVERSAL DEL NIÑO
 
LUZ SAMANEZ PAZ,

 Presidenta de la Asociación de Literatura Andina Infantil i Juvenil (ALAIJ)

Las Naciones Unidas, celebra el 20 de noviembre, como el Día Universal del Niño. Fecha en la que la Asamblea General de la ONU, aprobó la Declaración de los Derechos del Niño, en 1959.

Es un Día dedicado a todos los niños del mundo. El objetivo principal es recordar a la ciudadanía, que los NIÑOS son el colectivo más sensible i vulnerable de nuestra sociedad i por lo tanto, son los que más sufren, ante las crisis i los problemas mundiales.




Los NIÑOS, tienen derecho a la salud, a la educación i la protección.
 
La Asociación de Literatura Andina Infantil i Juvenil, en este Día Especial, rinde un homenaje a todos los NIÑOS del MUNDO, con la presentación de mi libro:

"GOTITAS DE TERNURA",
que guarda en sus páginas
i en su memoria,
los momentos de gloria,
en su Mundo de Ensueños.
 
Todo tiene alma que habla,
que ríe entre las flores
i que vierte su perfume,
para los pájaros que anidan
en su verde ramaje.
 
Mi pluma mágica,
les infunde vida
i les prodiga mucho amor.
 
En este mundo queridos NIÑOS,
Acunen el canto
de todas las aves.
 
Con el verde follaje
de sus hojas suaves.
 
Raíces profundas
i ramas cariñosas.
 
Queridos NIÑOS,
corran i salten
entre piedrecitas de colores.
 
Miren al arroyo transparente,
que va dejando un aire de frescura,
al salpicar tan travieso i juguetón.
 
Son tu payasito,
con su traje tornasol.
 
Son las mariposas en flor
o tu trompo bailarín...
 
Que parece que va a volar,
como una ave al cielo. 
 
 Son tus juegos eternos,
que están
llenos de magia i ensueños.

 

EL MUNDO DEL SAPITO SALTARÍN

LUZ SAMANEZ PAZ

El SAPITO Saltarín, cantaba a las chask´as o estrellas, en el cielo de la tarde. Sus ojos marrones donde dormían pájaros de sueños que parecían volar  cuando su mirada se perdía en el azul del cielo,  en busca de las estrellitas más fulgurantes.

Los charcos se iban llenando de agua, con el llanto de la lluvia. El SAPITO Saltarín, cantaba alegremente: croac, croac, croac, lleno de ilusión.

 En el azul del cielo jugaban las nubes, siempre traviesas i alegres, i de la ronda de las nubes, se desprendía el bullicioso aguacero i el viento se convertía en alegre campanero.

Un amanecer, cuando la señora Noche, dejaba su chal de plata bañada por la Luna o killa morena, se oyó el canto de los grillos, trovadores del campo, monótono i lloroso, bajo la sombra de los rosedales.

El espíritu del aire, creó a las multicolores mariposas andinas o pilpintos i el corazón de la Pachamama a las bellas tik´as o flores.

El SAPITO saltarín, siempre jugaba con las flores o tik´as i con las mariposas de seda o pilpintos i quería jugar también con las chask´as o estrellas del cielo. Mientras el árbol perezoso, tendía sus ramas de encaje i el cielo caía tendido, i la killa o Luna Niña, bajaba a jugar a la tierra. Era de noche i la Luna Niña, estaba tan cansada de tanto correr, saltar i jugar, con su amigo el SAPITO saltarín i con sus juguetes que trajo del cielo. Se sacó sus zapatitos i destrenzó su pelo con la suave brisa i se subió de prisa i llena de risa a un árbol de hojas muy verdes. Jugó tanto que se quedó dormida i soñó que la mecían blancas estrellitas.

Estaban invitados, a la Fiesta de Cumpleaños de la señora Araña. Los grillos afanados, trasportaban las hojas más hermosas; las hormiguitas en sus canastitas, llevaban flores i hojas de trébol; los escarabajos, raicillas silvestres; las abejitas, su rica miel. Las cigarras, bolsitas de granitos de arroz; las mariposas, pétalos de rosas; los pajarillos alegraban con sus cantos; mientras la orquesta de don sapo, llenaba de sones el charco i las verdes ranas, cantaban con ganas a coro. Todo era alegría i felicidad en el Mundo Vegetal.

El Verano, travieso i juguetón se trepaba en los manzanos i naranjales. Para el SAPITO Saltarín, la Luna era un queso i el Sol era de miel. Jugaban los pajarillos sobre las aguas azules. Era del SAPITO Saltarín, una "estrella secreta" su corazón. Seguía a las tik´as i se perdía en el tiempo, seguía a las chask´as i se perdía en la noche.

Las arañas, tejían primores  en las sombras solitarias, donde la Noche esparcía, sonrisas de campanitas, sueños que aleteaban en el cristal del ensueño. Las mariposas floreadas volaban de flor en flor, con sus sombrillas de felpa. Del SAPITO Saltarín, brotaba a raudales su risa, cuando caía la lluvia. Cantaba el viento ligero, anunciando su presencia. La cinta azul de los lirios, estaba formada de estrellitas de rocío. Las blancas margaritas i los alegres jilgueros, presentían la llegada de la señora Lluvia.

Más allá, una luciérnaga  que salía por las noches para alumbrar como un semáforo, el tránsito del mágico i maravilloso Mundo Vegetal. Llena de curiosidad le dijo:

  -  ¿Quién eres i por qué miras tanto al cielo?  -

De inmediato le contestó:

  -  Yo soy el SAPITO Saltarín, salto, entre flores i mariposas de seda, que dan su pincelada de belleza a la tierra. Vuelo en alas de mi fantasía, me siento libre i vuelvo a soñar... Quiero jugar con las estrellas del cielo. No sé, si se podrá convertir algún día, mis sueños en realidad. Es mi dicha, como una rosa que mi noche, vistió de primavera. Estoy lleno de cielos i estrellas, traigo la piel mojada de rocío i mi cabeza repleta de sueños, de pedazos de cristal i lámparas rotas, porque a veces mis sueños se alejan como barquitos de papel. Llevo en el corazón una estrella dormida, que la dibujo en mi mente i en mis sueños... DIOS, inventó la noche con estrellas, para soñar con sueños imposibles  - 

  - Realmente, estoy muy sorprendida -  Exclamó la luciérnaga.

  -  Hasta ahora, no había visto, tanta belleza i misterio, con los ojos del alma. Tú, mi pequeño SAPITO Saltarín, eres un verdadero soñador i poeta, le dijo muy emocionada, con lágrimas en los ojos. Mereces que se cumplan tus sueños  -  indicó entre suspiros.

El espíritu del Charco, que estaba escuchando muy atentamente i sabía el deseo del SAPITO Saltarín, decidió cumplir su sueño i en una pompa de cristal, el SAPITO Saltarín, voló i voló por los aires  ... Qué linda i grácil, se asomaba su carita de ensueños, entre las estrellas del cielo.

I así, cumplió su sueño, el SAPITO Saltarín, que quiso ir al cielo a jugar con las estrellas.