HOY
Rodolfo Ascencio Barillas
Hoy es el sueño del presente
Y ayer fue el futuro edificado
Hoy es el lejano recuerdo
Atrapado por mis manos,
Agujerado por la noche,
Asolado por las sombras
Y escarpado por el llanto
Hoy puedo reconocer,
Lo incomprendido
También lo inmensurable
Y los destellos del frio amanecer.
Y ayer fue el futuro edificado
Hoy es el lejano recuerdo
Atrapado por mis manos,
Agujerado por la noche,
Asolado por las sombras
Y escarpado por el llanto
Hoy puedo reconocer,
Lo incomprendido
También lo inmensurable
Y los destellos del frio amanecer.
Hoy tengo la oportunidad
De ver el rostro de incognoscible
Y el dolor que me ata
la ilusión que se escapa
Hoy es hoy, y es ahora
Impregnado por extremos inconscientes
Y sueños inexpugnables
Que se esfuman en el fuego de mi pasión
Hoy volveré a soñar con imposibles
Hoy soñare en el triunfo de mis derrotas
Y en las derrotas de mis triunfos,
Hoy dormirán mis esperanzas
En el solitario corazón humano.
Hoy nacerá la antorcha de la libertad
Y los hombres que una vez fueron hermanos,
Hoy es un día que el mundo recordara
Y los niños que sueñan jugar felices
Hoy pude escuchar la voz solitaria
Y el trémulo devenir de los senderos
Hoy vi caminando luceros
Y un mar que bañaba mis horizontes
Hoy los pájaros se estremecieron
Y los vientos que revoloteaban en sus nidos
Hoy quise detener el cielo de aguaceros
Y las estrellas que iluminan mis tinieblas
Hoy la noche ha visto donde muero
Y el corazón que vaga solitario
Hoy, me encuentro crucificado
Bajo un mundo modernizado
Que ha mi corazón le debe,
Su aliento inmaculado…
De ver el rostro de incognoscible
Y el dolor que me ata
la ilusión que se escapa
Hoy es hoy, y es ahora
Impregnado por extremos inconscientes
Y sueños inexpugnables
Que se esfuman en el fuego de mi pasión
Hoy volveré a soñar con imposibles
Hoy soñare en el triunfo de mis derrotas
Y en las derrotas de mis triunfos,
Hoy dormirán mis esperanzas
En el solitario corazón humano.
Hoy nacerá la antorcha de la libertad
Y los hombres que una vez fueron hermanos,
Hoy es un día que el mundo recordara
Y los niños que sueñan jugar felices
Hoy pude escuchar la voz solitaria
Y el trémulo devenir de los senderos
Hoy vi caminando luceros
Y un mar que bañaba mis horizontes
Hoy los pájaros se estremecieron
Y los vientos que revoloteaban en sus nidos
Hoy quise detener el cielo de aguaceros
Y las estrellas que iluminan mis tinieblas
Hoy la noche ha visto donde muero
Y el corazón que vaga solitario
Hoy, me encuentro crucificado
Bajo un mundo modernizado
Que ha mi corazón le debe,
Su aliento inmaculado…
VOLVERÉ
Rodolfo Ascencio Barillas
Rodolfo Ascencio Barillas
Volveré a mi mundo paralelo de fantasías
Y al creciente grito de la mustia noche fría
Volveré al constante lamento de mis cristales
Y al desolado tormento que en el corazón persiste
Volveré al cuerpo silencioso de mis encantos
Y a los placeres que solo el alma resiste
Volveré aquellos momentos que agitaron mis emociones
Y a las sensaciones que apresuraron mis pasiones
Volveré a las voces libres del viento
Y a la insaciable tortura de mi aliento
Volveré a las prisiones de mi llanto
Y a la esclavitud encadenada del aposento
Volveré a construir castillos de sueños
Y empezare en las cenizas del recuerdo
Volveré a la fuerza que al dolor inunda
Y al deseo ardiente de vivir triunfante
Volveré sin la saña de mi cruel venganza
Y perdonar el terrible tiempo que me reta
Volveré, mañana con el agravio que me ata
Cual saeta castiga en la honda grieta
Volveré a mis viejas ilusiones del pasado
Y a la bella mujer que a mi carne mata
Volveré a los palacios de mi infancia
Y a las entrañas que a mi pesar provoca
Volveré con la potestad de mi locura
Y con el rencor que a mi corazón maltrata
Volveré al límpido amanecer del mundo
Y a las fortunas del oro, y de la plata
Volveré envuelto en un ciclón inesperado
Que ahoga el corazón de la mujer ingrata
Volveré a la quietud de la muerte imprevista
Y al dulce sueño que acobija mi dolor…
Y al creciente grito de la mustia noche fría
Volveré al constante lamento de mis cristales
Y al desolado tormento que en el corazón persiste
Volveré al cuerpo silencioso de mis encantos
Y a los placeres que solo el alma resiste
Volveré aquellos momentos que agitaron mis emociones
Y a las sensaciones que apresuraron mis pasiones
Volveré a las voces libres del viento
Y a la insaciable tortura de mi aliento
Volveré a las prisiones de mi llanto
Y a la esclavitud encadenada del aposento
Volveré a construir castillos de sueños
Y empezare en las cenizas del recuerdo
Volveré a la fuerza que al dolor inunda
Y al deseo ardiente de vivir triunfante
Volveré sin la saña de mi cruel venganza
Y perdonar el terrible tiempo que me reta
Volveré, mañana con el agravio que me ata
Cual saeta castiga en la honda grieta
Volveré a mis viejas ilusiones del pasado
Y a la bella mujer que a mi carne mata
Volveré a los palacios de mi infancia
Y a las entrañas que a mi pesar provoca
Volveré con la potestad de mi locura
Y con el rencor que a mi corazón maltrata
Volveré al límpido amanecer del mundo
Y a las fortunas del oro, y de la plata
Volveré envuelto en un ciclón inesperado
Que ahoga el corazón de la mujer ingrata
Volveré a la quietud de la muerte imprevista
Y al dulce sueño que acobija mi dolor…
