miércoles, 14 de enero de 2009

GRANDES MAESTROS - POLICARPO ZUBIETA CARHUACHÍN



Por Filomeno Zubieta Núñez


Esta parte, no hace sino reforzar la historia de vida de nuestro homenajeado, publicado en abril de 1994, en base a documentos que hemos tenido la oportunidad de revisar con relativa acuciosidad. Sin lugar a dudas, es uno de los personajes relevantes del pasado siglo dentro de la historia de la Comunidad de Cuspón, con un lugar bien ganado dentro del magisterio bolognesino.


Escribir la historia de su vida cubriría muchas paginas, ésta puede abordar sus diversas facetas: hijo, padre, maestro, comunero, promotor social, creyente, agricultor, protector del folklore local, sus aficiones, etc. de manera que vamos a limitarnos a esbozar los pasajes mas saltantes de sus existencia.

Policarpo nació el 26 de enero de 1923, en Cuspón, de la unión conyugal de don Santiago Zubieta Ramírez y doña Eugenia Carhuachín Gamarra. Fue el mayor de 7 hermanos: Tecla, Graciano, Genoveva, Antonio, Humberto y Gabriel, de los cuales 3 sobreviven. Perteneció a una familia de humildes campesinos, formado dentro de un ambiente de amor y trabajo. Su abuelo, el honorable Juan Zubieta, guió sus primeros pasos y fue siempre su paradigma y prototipo de personaje a imitar y emular. Su padre a igual que sus tíos Escolástico, Espíritu ("Ishpi-Runcu") y Estanislao (“Ishta”), gozaban de reputación dentro de la provincia como constructores y albañiles, sus servicios eran requeridos constantemente; murallas y viviendas de Corpanqui, Chilcas, Raján, Huanri, Llipa, Llaclla, entre otros, conservan sus recuerdos.

A mediados de 1923 fue bautizado en la iglesia de Chiquián, oficiando de padrinos los esposos Max Hidalgo y Eloísa Díaz, vecinos del pueblo de Llaclla. Estos le tomaron especial afecto y le brindaron todo el acicate para que pudiera superarse.

El protagonista de esta nota fue un aprovechado estudiante de la que fuera Escuela Pre-vocacional Urbana de Varones N° 351 de Chiquián, alumno del maestro César Figueroa Cuentas, a la postre sus colega y compadre. Terminó la primaria con la más altas notas, obteniendo beca para seguir estudios en el prestigioso y hoy centenario Colegio Nacional "La Libertad" de Huaraz. La prematura muerte de su madre hizo que interrumpiera momentáneamente sus estudios, para después culminarlos y años mas tarde recibirse de profesor primario en la Escuela Normal de Tingua, convirtiéndose en uno de los primeros profesionales del siglo XX de los nacidos en Cuspón. Además, continuó estudios de perfeccionamiento en el Centro de Capacitación Magisterial de Huaraz. Su título profesional está registrado con el N° 63654-G.

Antes de ingresar al magisterio, sus deberes cívicos y patrióticos lo llevaron a cumplir sus servicio militar obligatorio en Lambayeque, donde fue un destacado soldado, egresando con altas calificaciones y como sargento primero, al cabo de dos años.

Inicia su carrera de docente en Acas, capital del distrito de ese nombre, de la entonces provincia de Bolognesi (hoy pertenece a la provincia de Ocros) gracias al nombramiento de fecha 26 de junio de 1950, por Resolución Directoral N° 6963, en la Escuela de Varones N° 3570. Durante dos años como preceptor y el resto, a julio de 1954, como Director. Él recodaba su primer sueldo: s/ 328,00 (s/ 288,00 como haber mensual, más una bonificación de s/ 40,00 por el 20 % de costo de vida). Aquí dio muestras del papel que debe desarrollar el maestro como promotor social. No se limitó a la simple enseñanza. Por un documento suscrito por las autoridades del lugar que tiene fecha 4 de agosto de 1954, en el que firman, entre otros: Rufino Aldave R. (Gobernador del distrito), Gaudencio Aldave (Personero Jurídico de la Comunidad), Angeles Pastrana (Alcalde), D. Salas Valerio (Juez de Paz), Porfirio Valerio (Presidente de la Comunidad de Indígenas), se detalla algunas de las obras y realizaciones del novel docente en beneficio de este pueblo:

a. Construcción del nuevo local escolar con techo de calamina;
b. Creación del auxiliarato para la Escuela de Varones;
c. Redacción de la Monografía del Distrito de Acas;
d. Adquisición de 50 carpetas bipersonales;
e. Compra de una campana para la Escuela de Varones;
f. Terminación del campo de Básquetbol.

Quien estas líneas escribe leyó con suma emoción la Monografía del Distrito de Acas, un estudio integral de las características geográficas, históricas, económicas, sociales, educativas y folklóricas (fiestas patronales, tradicionales, costumbres, cuentos, leyendas, canciones, etc.) de este acogedor distrito; y quienes conocen de nuestras inquietudes académicas no pueden negar la enorme influencia de nuestro padre con este tipo de aportes.

El 22 de julio de 1954, por Resolución Directoral N° 13803, fue trasladado a la Escuela de Varones N° 3580 de Llaclla, como Director. Entre la recepción de este documento y otro que se emitió poco después, no estuvo ni tres meses en este caluroso pueblo, tierra de sus padrinos y escenario de parte de su infancia.

En efecto, por Resolución Directoral N° 20030 del 2 de octubre de 1954, fue reasignado a la Escuela de Varones N° 357 de Congas, como auxiliar. Se desempeñaba como Director, el maestro Isaac Alcántara Ellacuriaga, a quien en la década del 80 lo ubicamos en la Escuela Primaria de Varones de Supe Pueblo. En ese pueblo desarrolló labores extra-escolares como alfabetizador de adultos y adolescentes, además de otras similares a las de Acas, especialmente en la composición de canciones escolares con incorporación de nombres, lugares, fechas y temas propios de la zona.

A mediados de 1958 asume la dirección de la Escuela de Varones N° 3588 de Gorgorillo (distrito de Mangas), en mérito a la Resolución Directoral N° 7415 del 27 de mayo de 1958. Aquí, a consecuencia del irregular trato alimenticio del medio, cae enfermo y trasladado de emergencia a Lima, es sometido a dos operaciones del sistema digestivo, en el recién inaugurado Hospital del Empleado "Eduardo Rebagliati Martams", donde permanece hospitalizado entre el 19 de agosto y el 21 de noviembre de 1959, y en rehabilitación casi un año. A su retorno al centro de trabajo se dedica a poner en práctica la construcción del local escolar y, producto de gestiones, se logra la adquisición de la Banda de Guerra, los que se inauguran con presencia del diputado por Ancash, don Teófilo López Vidal. Con suma facilidad logró incorporarse a las prácticas folklóricas del pueblo, fue -por ejemplo- "acompañante" del "Capitán" don Gelacio Ruiz en la fiesta patronal; apadrinó en 1962 a la recién formada Banda de Músicos de Mangas; instituyó los concursos de bandas de músicos en las fiestas patronales. Al escribir estas líneas no podemos dejar de emocionarnos al recordar pasajes de nuestra niñez y estudios primarios, de transición a cuarto año, con nuestro tradicional desayuno de quáker con sango preparado en nuestro primus, los paseos mañaneros en caballo, la degustación de deliciosas manzanas y granadillas, las fatigosas caminatas por Huampayjirca, Condorsenga y Güelleyrajra (¡ah vida, vida ! ¿No?).

En 1964, preocupado por la situación educativa de su pueblo, se propone, junto a otros padres se familia de Cuspón, la creación de una escuela de varones. Para tal fin, solicita licencia laboral y realiza una serie de viajes a Lima, de sus gestiones se iba informando el pueblo a través del programa radial "El Sol en los Andes" que conducía el recordado Luis Pizarro Cerrón, que brindaba una amplia cobertura a estas acciones por recibir auspicio publicitario de "Confecciones Zubieta" de don Humberto Zubieta Carhuachín. Gracias al apoyo y amistad de autoridades como Leovegildo B. Soria Zaragoza, Santiago Pardo Lezameta o los hermanos Bracale Ramos, se logró la Resolución Directoral N° 8059 por el que la Escuela Primaria Mixta Unidocente N° 3572 fue desdoblada dando origen a la Escuela de Varones N° 3576 (en tanto la nueva escuela de mujeres conservaba el número original). Poco después, el 31 de julio de 1964, por Resolución Directoral N° 14912, se nombra como primer Director de la escuela de varones a don Policarpo Zubieta. Escuela que después adoptaría el N° 86217.

La experiencia acumulada más los deseos de cristalizar proyectos que tenía en beneficio de la educación en su pueblo, los fue concretizando. Su primer logro fue el Bosque Escolar (en terreno cedido por la Comunidad al pie del Cementerio), con cerca de tres mil plantones de eucaliptos que, en todos estos años, a contribuido a generar ingresos y solucionar algunos de las necesidades más apremiantes del centro educativo. La Banda de Guerra con importante contribución de sus hermanos e hijos residentes del pueblo en Lima. La Construcción del Local Escolar, en el terreno denominado "Blanca Rosa" donado por doña Asunción Ríos viuda de Parra, junto al Campus Deportivo (chacra donada para fines deportivos de la juventud por la matrona Ruperta Ríos). Con la participación de 82 comuneros, con un Comité Pro-Construcción del Local presidido por don Augusto Ríos, se levantaron 5 piezas de aulas (dos de 4 x 6 m. y tres de 4 x 8 m.) con un patio jardín de 5 m. de ancho; el maestro constructor fue don Víctor Calderón. A poco de su inauguración fue afectado por el terremoto del 31 de mayo de 1970. Esto permitió, para bien, mejorar la estructura del techo con fierros y eternit. Este local fue debidamente equipado y con ambiente para la casa del maestro, que por el descuido de profesores y padres de familia fue presentando, en los años posteriores, un cuadro desolador que no se merecían nuestros educandos. Felizmente, en los últimos meses se ha conseguido una restauración integral.

En 1973 es trasladado por destaque al C.E. N° 86243-84/E-2do.-Mx-Pc de Llaclla. Se desempeña como Director, teniendo como auxiliares a los profesores Fructuoso Valdez Arroyo, Emilia Palacios Barrón, Pablo Damián Tafur, además de don Armando Alvarado como personal de servicios (portero). Gracias a sus gestiones la Comunidad Campesina donó un terreno de 10,000 metros cuadrados, en el lugar denominado "La Esperanza", cerca a la toma de regadío de Cusi, para el Bosque Escolar. Luego de fructífera labor en la tierra de sus entrañables padrinos, es reasignado a otro pueblo, llevado por sus inquietudes de conocer nuevas tierras, nuevas costumbres y, también, estar más cerca de Chiquián donde estudiaban sus menores hijos. En efecto, por destaque estuvo en 1974 en la Escuela N° 86223-84 de Huasta.

Por Resolución N° 0322 de la Dirección Zonal N° 84 de Huaraz, de fecha 28 de febrero de 1975 es trasladado a Racrachaca, distrito de Aquia. La cercanía a Chiquián y la facilidad del transporte, le permitió estar más cerca a su familia y estar pendiente de las ocurrencias en su Cuspón.

Finalmente, el 16 de julio de 1980 en mérito a la Resolución Directoral Zonal N° 0709 de Huaraz, es reasignado al C. E. N° 86211-84/E-2do.-Mx-Pc de Chiquián (la antigua escuela de mujeres de "mandil blanco"), como profesor de aula. Estaba en las postrimerías de su vida profesional. El 14 de setiembre de 1982 asume la Dirección de la escuela por promoción interna, desempeñándose en este cargo hasta el día de su jubilación. Gracias a sus gestiones, los hijos de la extinta maestra Emiliana Valenzuela de Cerrate, nombre que llevaba la promoción de estudiantes de ese año que estaba a su cargo, donaron la Banda de Guerra compuesta de 14 piezas. Con motivo de las ceremonias de recepción, bendición e inauguración (distintos momentos: 21 de diciembre de 1982 y 16 de mayo de 1983) preparó uno de los documentos últimos como maestro en ejercicio: la historia de vida de la maestra Emiliana Valenzuela de Cerrate.

Después de 32 años, 06 meses y 15 días efectivos de servicios oficiales se jubiló en el ejercicio de la docencia, a partir del 1° de setiembre de 1983. Esto por Resolución Directoral Zonal N° 0958 del 31 de agosto de ese año. Pese a que su jubilación de debía a su solicitud y al legítimo derecho al descanso que tenía, no se habituó a su nueva situación. Día a día, en las mañanas al oír los toques de la campana se apresuraba en alistarse para "ir a la escuela". En más de una oportunidad fuimos testigos de los lagrimones que soltaba al pasar por un local escolar y observar con detenimiento los salones vacíos o con niños en la algarabía diaria.

De más de 32 años de vida docente nos deja un valioso archivo: diario de clases, composiciones ante fechas del Calendario Cívico Escolar, sus discursos ante eventos oficiales de diversa índole, su correspondencia interna y externa, referencias monográficas de los distinto pueblos de la provincia y apuntes varios sobre las actividades que realizó. El estudio de este conjunto puede darnos una idea global sobre su pensamiento y practica en sus 70 años de existencia. Pero, también, nos dio lección de vida con su identificación y su filiación clasista en el seno del magisterio, sufriendo como otros las consecuencias del maltrato a la dignidad del maestro; y, por lo mismo asumiendo actitudes conjuntas que le significaron "sanciones" por participar en las huelgas de 1966, 1971, 1978 y 1979. Así, como botón de muestra, por Resolución Directoral N° 3163 fue cesado junto a otros 40 maestros de la provincia de Bolognesi, a partir del 1° de setiembre de 1971, por su participación en la histórica huelga traicionada que daría nacimiento al Sutep; siendo repuesto por Resolución Directoral N° 3165 del 29 de noviembre de ese mismo año.

Policarpo Zubieta nació y radicó la mayor parte de su vida en la tierra de sus amores: Cuspón. Contribuyó con sus ideas, pluma y acciones a su progreso. Fue comunero y regante, ocupó diversos cargos al interior de su pueblo. En mas de una oportunidad fue su relacionista público y representante ante las instituciones oficiales. Alentaba la practica de las festividades y costumbres ancestrales, como las fiestas de San Pedro (julio) o San Luis (noviembre), ya como funcionario o como "quelli". Todos recuerdan que con él se restableció la fiesta de noviembre en el año 1960, luego de superar dos operaciones y el internamiento médico de un año (decía que se había salvado gracias a “Luico”). Participaba activamente en los trabajos comunales de relimpio de acequia, el "jochhapisay" o el cerco comunal. Componía canciones escolares con temas relacionados a su pueblo, por ejemplo, "en las faldas de la Capillata". Solía radicarse por temporadas en una de sus chacras, en las que tenia chozas espaciosas: Capillapata, Hualtuyoj o Mollipampa. Prefería sobre todo los potajes de su tierra; el locro con cuy, la pachamanca, la papa o choclo con queso, el pegan -caldo; de Lima o Huacho, el cebiche. A la buena comida le agregaba el roncito o le antecedía en las mañanas el chinguirito o la chicha hervida.

Fue un aficionado a los caballos, especialmente a los de "paso". Esos que animan los días centrales de las fiestas patronales. Con buenos corceles y arreos de plata visitaba los pueblos donde se celebraban fiestas, en estas se lucía y demostraba sus dotes de buen jinete. Recuerdos de estas andanzas son los amigos, compadres y ahijados. Para desplazarse no tenía horario, esto le provocó mas de un accidente con las consiguientes roturas de huesos. Gustaba del trenzado de riendas, fuetes y sogas, al que se dedicaba en sus ratos libres. En lo académico tenia preferencia por las matemáticas, en mas de una oportunidad tuvo encuentros muy comentados con el extinto profesor Eleodoro Gamarra, otro cultor de las ciencias formales.

Como creyente era devoto del Señor de la Soledad de Huaraz, cuando llegaba a esta ciudad lo primero que hacia era ir a su iglesia, participar de la misa y a la salida tomarse un buen emoliente, para luego degustar su plato de "chocho". Igualmente rendía culto a San Martín de Porres y por supuesto a San “Luico”, patrón del pueblo de Cuspón. Los personajes de su admiración: El Gran Mariscal Toribio de Luzuriaga (sobre quien tenía libros, folletos, artículos y símiles), su abuelo Juan Zubieta (en honor a él, al suscrito le llamaba con este nombre) y el maestro Horacio Zeballos Gámez (por su identificación con el Sutep).

Casada con doña María del Socorro Nuñez Cruz el 14 de agosto de 1954 tuvo con ella 13 hijos, de los que 8 sobreviven y a quienes procuró formar dentro de la modestia, honradez, trabajo, disciplina y superación. Ellos pretendiendo emular a su progenitor, realizan esfuerzo por abrirse paso en sus respectivas opciones.

En los últimos meses de su existencia radicado en Lima se obstinó en regresar a su Cuspón querido, donde finalmente producto de sus dolencias, falleció en la noche del viernes 15 de octubre de 1993. Sus restos trasladados sobre los hombros de sus dolidos hijos, descansan hoy junto al de sus padres en el cementerio de su pueblo natal, tal como fueron sus deseos de siempre. En el recuerdo de sus vecinos aun deja oír su "uiuj" (su clásica interjección de cansancio al llegar a cada parada en las caminatas por los senderos de Cuspón).

De sus exequias nos llevamos un recuerdo, las criadillas del toro sacrificado para su consumo en esos días. Una botella ovalada fue forrada con el escroto. Aquí llenamos los macerados de frutas con pisco y lo llevamos a cuanto lugar viajamos (Ayacucho, Piura, Cochamarca, Cajatambo, Cuspón, Huaraz, Rapaz, Churín, Oyón, Naván, etc.). Es el “Huashcurunco” , muy popular entre los amigos. Hace años cuando visitamos al Dr. Max Hernández, famoso psicoanalista peruano, para conversar sobre el historiador sayanense Jesús Elías Ipinze, mencionamos al “Huashcurunco”. Durante una hora nos explicó su significado y la ligazón con don Policarpo.


Cuspón