jueves, 13 de mayo de 2021

MES DE MAYO, MES DE LA VIRGEN DE MARÍA AUXILIADORA - POR URPI DEL MAR

 

  MES DE MAYO, MES DE LA VIRGEN DE MARÍA AUXILIADORA

Por URPI DEL MAR

EL Mes de Mayo, es el Mes de la Vírgen de María Auxiliadora y todas las alumnas y ex alumnas de este gran Colegio de MARÍA AUXILIADORA, hemos organizado una serie de actividades conmemorativas.

LUZ SAMANEZ PAZ, al igual que yo, hemos estudiado en este maravilloso Colegio, donde evocamos a menudo las felices horas en las que nos encontrábamos junto a nuestras compañeras de Promoción. Horas como la presente, en que todavía tenemos la suerte de disfrutar y recordar las horas de jolgorio, horas de regocijo, horas de sano esparcimiento, horas de pícaras travesuras; así como también, de estricto cumplimiento del deber, de ese sacrosanto deber de educarnos, de formar nuestra personalidad a la luz de nuestros sempiternos valores de la moral y de la religión, merced a los augustos sacrificios de nuestras dignas maestras, las Reverendas Hermanas, que siempre han laborado con la misma bondad, con la misma sabiduría, con la misma rectitud, reflejando su paradigmática formación  religiosa, en nuestros tiernos corazones, ávidos de aprender.
 


 
A MI COLEGIO DE MARÍA AUXILIADORA

LUZ SAMANEZ PAZ
 
Ha llegado el momento de irnos
querido Colegio de MARÍA AUXILIADORA
recinto de luz i saber,
fuente inmaculada i pura
donde tiene un altar
la esperanza i el amor,
donde transcurrieron
las encatadas horas
de nuestra infancia,
bebiendo en las cristalinas aguas
de la fe, del tesón i la virtud.
 
Ya no vendremos
a tu llamado
vieja campana,
de alegrías
i de emociones.
 
Quedan entre tus paredes
mis recuerdos,
el primer goce,
el primer llanto.
 
Adiós Colegio
de MARÍA AUXILIADORA,
ventana abierta entre las rosas...
se van todas tus azules alegrías,
en un cielo pintado de arrebol.
 


 
A LA VIRGEN DE MARÍA AUXILIADORA

LUZ SAMANEZ PAZ
 
VÍRGEN MARÍA AUXILIADORA,
blanca estrella de mi cielo,
puestos en ti mis sentidos
i mis esperanzas tengo,
pues no hay angustia o dolor
que me lacere por dentro,
que al contártelo a ti,
me brindas siempre
consuelo i paz.
 
¡Oh MARÍA AUXILIADORA!
tan unida a mis recuerdos,
ya que a tu sombra bendita,
en tu querido Colegio,
bebí la luz de la ciencia
i cultivé mi intelecto.
 
Hoy que han pasado los años
i mi niñez quedó lejos,
eres la Madre amorosa
que me libra de tropiezos,
la que está en mi corazón,
la que protege mis sueños.
 
El 24 de mayo,
fiesta de luz i recuerdos,
te veo salir del Templo,
mientras que miles de fieles
en amoroso cortejo,
te van siguiendo los pasos
con devoción i respeto,
cantando dulces canciones
i ondeando blancos pañuelos.
 
¡Oh MARÍA AUXILIADORA!
fuente de amor i consuelo
escucha nuestras plegarias.
¡MADRE DEL DIVINO VERBO!
 


 
LUZ SAMANEZ PAZ, 
 
ESTUDIANTE DEL COLEGIO DE  "MARÍA AUXILIADORA"

(Del libro "Simbolo de Belleza e Inteligencia: un ser que va más allá de las estrellas", con el que obtuvo el Premio Internacional "JOSÉ SARAMAGO" - Vida i Obra de LUZ SAMANEZ PAZ)
Dr. FÉLIX DEL CARPIO (Asesor Fundador de ASOLAPO - México)

¡PREMIO DE EXCELENCIA!: MARÍA LUZ SAMANEZ PAZ . La voz suave y algo ronca de la Madre Directora del exclusivo Colegio Cusqueño de "MARÍA AUXILIADORA", resonó clara en el Salón de Actos del Plantel.

Los aplausos comenzaron a sonar como premio a la mejor alumna de ese centro de estudios, donde se educaban las hijas de las familias llamadas bien de la ciudad, pero se multiplicaron cuando subió al estrado, la poseedora de ese Galardón.
Seguramente muchos pensaron que se trataba de una niña desgarbada, quizá poco atractiva y tal vez con anteojos gruesos. Es que casi siempre son así, las denominadas"mejores alumnas".

Pero ahora era diferente. Parecía que una Ninfa se acercaba hasta el Director de la V Región de Educación, que debía otorgarle el Premio. Era bella. En su recatado uniforme azul, característica de ese Colegio, resaltaban extraordinarios, plenos de vida, de una hermosura que proclamaba a gritos todo el encanto de una mujer, toda la seducción de quien lleva en su cuerpo las formas, que hubieran enloquecido al propio autor de la VENUS DE MILO.

Su carita seria, se iluminó cuando recibió el Diploma y la Medalla de Oro. Sonrió y en ese momento parecía que se hubiera abierto el cielo, para enviar un esplendoroso rayo de luz, que parecía cantar a la belleza, a esa virtud que DIOS brinda con avaricia, porque solo da a algunas pocas escogidas.

Los aplausos se multiplicaban y ya comenzaron a escucharse gritos de ¡MARÍA LUZ!, ¡MARÍA LUZ!. Ella levantó al vista, que hasta ese momento la tenía baja, como una consecuencia de una natural modestia que le caracterizaba, pero que al mismo tiempo hacia más virtuosa su figura de ángel. Sus ojos horadaron la Sala. Más de uno contuvo la respiración. Era una diosa encarnada en una dolescente. ¿Era acaso una brisa enviada desde lo alto para perfumar los corazones? No, no era nada de eso, era MARÍA LUZ, la más brillante de los cinco años de Educación Secundaria en MARÍA AUXILIADORA, la flor más fraganciosa y exquisita de la Ciudad Imperial. Era más esplendorosa que todas la Ñustas del Imperio y más radiante que todas las encopetadas damas, que volvían locos a los orgullosos hidalgos, venidos de ultramar.
 

Salió del brazo de su padre el Dr. DAVID I. SAMANEZ FLÓREZ, Catedrático de la Facultad de Letras de la Universidad Nacional de "San Antonio Abad" del Cusco, que mostraba una amplia sonrisa de satisfacción y orgullo.

La Plaza de Nazarenas, estaba cubierta de un velo gris, que oscurecía el firmamento con una pertinaz llovizna. Pero cuando MARÍA LUZ, bajó las escaleras de su Colegio, quienes la contemplaban absortos desde los jardines del Parque, se olvidaban de la lluvia, porque parecía que el sol había salido radiante, que la esperanza iluminaba los espíritus y que un arcoiris celestial, ennoblecía todas las almas. Es que LUZ, llenaba con su presencia extraordinaria, todo el recinto de la Plaza y conquistaba la admiración de todos los que la veían.