domingo, 10 de mayo de 2020

EL SOLDADO DE PLOMO - HOMENAJE A LA MADRE - POR SAMUEL CAVERO GALIMIDI, PRESIDENTE DE LA ASOCIACIÓN DE ESCRITORES Y ARTISTAS DEL ORBE (AEADO)

 
EL SOLDADO DE PLOMO

Autor: Samuel Cavero Galimidi

Yo soy el soldado de plomo que quisiste, Madre,

hoy cuido de tus tesoros.

Yo soy el niño de siempre, Madre,

Artesano de mi futuro sin Tierra Prometida

que es el último refugio de tu paz,  y la mía.


Hoy, sin Ulises estoy soñando mi Ítaca

con la dama relámpago que cuidó de mí,

que me acercó a este mundo de Nemo.

“¡Eras tú, Madre!”    “¡Eras tú!”


Tenías las manos cárdenas, avejentadas

y yo, un tamboril en forma de jarra

cuyo fondo  milenario estaba cubierto

de algas y líquenes, pequeño templo

de tus sempiternas lágrimas.

Madre, escucha madre,  mi Mar, mi Cielo:

Yo soy el soldado de plomo, sí el marinero,

el navegante que despediste

cuando se fue a la guerra

y hoy, cansado de tanta escaramuza,

de juegos de guerra,

de tanto navegar por los Siete Mares,

vengo a saludarte,

a besar la huella de hiel en la tumba ceniza

cara a cara con el juicio final

y no menos a decirte

siempre consternado,

hastiado de tragar  tanta sal

en la dulce  espera de tu resurrección,

infatuado ya de rezos y de falsas proclamas:

“Alma mía, sumérjase por fin en paz”.
 
 
 Email: cavero2012@hotmail.com
 
Samuel Cavero Galimidi, presidente de AEADO