sábado, 17 de noviembre de 2018

17 DE NOVIEMBRE: DÍA DEL ESTUDIANTE - FOLIOS DE LA UTOPÍA: REFLEJOS DEL SOL - POR DANILO SÁNCHEZ LIHÓN


 

Construcción y forja de la utopía andina
 
2018 AÑO
DE LA IDENTIDAD Y DEL PATRIMONIO
INALIENABLE DE NUESTROS PUEBLOS
 
NOVIEMBRE, MES DE LA GESTA
DE TUPAC AMARU; LOS DERECHOS
DEL NIÑO; VIDA Y PASIÓN DE
J.M. ARGUEDAS Y MANUEL SCORZA
 
CAPULÍ ES
PODER CHUCO


 
SANTIAGO DE CHUCO
CAPITAL DE LA POESÍA
Y LA CONCIENCIA SOCIAL


 
*****
 
PRÓXIMA ACTIVIDAD
DE CAPULÍ, VALLEJO Y SU TIERRA


SÁBADO 17 DE NOVIEMBRE
5 PM. CASA MUSEO
CÉSAR VALLEJO YNFANTES
ACTIVIDADES Y PROYECCIONES
DEL INSTITUTO DE CULTURA PERUANA
CON SEDE EN MIAMI, EE.UU.
DIRIGIDO POR RICARDO CALDERÓN G.
PROGRAMA:
1. Saludo y palabras de presentación:

DANILO SÁNCHEZ LIHÓN
Presidente de Capulí, Vallejo y su Tierra
2. Palabras de bienvenida

CÉSAR VALLEJO CASTAÑEDA
3. Pasado, presente y futuro
del Instituto de Cultura Peruana
con sede en Miami:

RICARDO CALDERÓN GUTIÉRREZ
4. Ayamarca, la dimensión del espíritu
en el mundo andino:

RAMÓN NORIEGA TORERO
Director de la Cátedra de Sabiduría Andina
de Capulí, Vallejo y su Tierra
5. Actividades de Capulí, Vallejo y su Tierra
cumplidas en Madrid, Toledo, Leganés
y Alcalá de Henares:

JUVENAL SÁNCHEZ LIHÓN
6. Efemérides, y alcances del 20 Capulí:

FLORENCIA ROLDÁN
7. Vallejo eterno en la voz de:

FREDERIK SOTOMAYOR
6. Cena de fraternidad.
Conducción General:

SAMUEL CAVERO GALIMIDI

*****


17 DE NOVIEMBRE


 
DÍA
DEL
ESTUDIANTE


FOLIOS
DE LA
UTOPÍA



 
REFLEJOS
DEL
SOL


 
Danilo Sánchez Lihón
 
 
1. Primera
vez
 
– ¡Compañías!
Es la voz de mando del Instructor Oficial de IPM en el ensayo de los alumnos del Colegio Santiago el Mayor para el desfile de Fiestas Patrias.
– ¡Paso de desfile! ¡Marchen!
Las dos columnas, una de mujeres y otra de varones dejan caer el primer paso que resuena con un golpe parejo haciendo temblar el suelo del patio de la vieja casona donde ha empezado a funcionar el recién fundado Colegio del pueblo de Santiago de Chuco, el primero de Educación Secundaria en crearse en todo el ámbito de la provincia.
Es principios del mes de julio y yo había acompañado a mi padre a una visita a la añosa casona detrás del campanario donde él tenía cita con su amigo, el profesor Romeo Solís Rosas Anaya, músico, pedagogo, gestor y ahora flamante director del nuevo y pujante plantel estudiantil.
Llegamos en el momento en que alrededor del patio el alumnado que ha ingresado este año hace un ensayo para el desfile escolar de las Fiestas Patrias, donde por primera vez desfilará una institución educativa del nivel de la Educación Secundaria.
 
2. Imbuidos
de ideales
 
Dos agrupamientos de tres columnas cada uno marchan con la frente levantada hacia lo alto, sin un gesto vano o fallido en los rostros, sin una mirada distraída, los semblantes serenos, candorosos, casi iluminados.
Adelante, en cada vuelta que dan alrededor del patio, va la sección de mujeres en líneas de a tres, en marcha acompasada, con sus uniformes de falda azul y blusa blanca.
Son unas muchachas altas, límpidas y hermosas que me admira verlas como brotes inusitados de nuestros manantiales, ríos y bosques encantados; de nuestras flores, nevados y puquios de agua.
Delante de todas ellas, con su bastón de mando blanco, la mirada indoblegable, todo el talante imbuido de ideales, marcha la Brigadier General de aquel agrupamiento.
Es ella quien traza el sendero con sus pasos a la vez femeninos y marciales, indicando con un gesto dónde hacer los giros, volteando de vez en cuando para indicar algo con la mirada, señalar un movimiento, o vigilar una conducta. Todo parece depender de aquella joven delgada, etérea y a la vez exacta. Y, ¡qué preciosa!
 
3. El perfil
de las montañas
 
Son más o menos entre ochenta y cien muchachas y muchachos a quienes yo contemplo subyugado por su distinción y compostura. Un haz de espigas entresacadas de nuestros campos, de suyo floridos.
Impresiona la seriedad de esos rostros, el aplomo de los gestos, la altivez de su carácter.
Envueltos en sus uniformes impecables giran en el patio de tierra apisonada delante de las paredes blancas de adobe que coronan en lo alto racimos de malvas y mostazas.
Teniendo como contorno los muros florecidos después de las lluvias de mayo y de junio. Más arriba quedan las techumbres rojizas de las casas. Y, más arriba todavía, el cielo azulado con vellones blancos de nubes apelotonadas.
En el balaustre del segundo piso mi padre conversa con don Romeo Solís Rosas que, en sus lentes, bajo el techo cimbrado de la casa vetusta, concentra todos los horizontes y el perfil de las montañas azuladas con las nubes bogando en el anchuroso firmamento.
 
4. Columnas
de argonautas
 
No había visto aún la banda de guerra que estrenarían en el desfile de Fiestas Patrias del 28 de julio de aquel año de 1954.
De allí que, en la mañana del 28 de julio, pasamos con mi escuela primaria esforzándonos por mantener la fila rectilínea y acompasando el fluir de la columna, golpeando fuerte el piso para que resuenen nuestros pasos lo más que podamos delante de la tribuna.
Y tan pronto nuestras tarolas de madera pintadas de azul de nuestra banda de guerra dieron el redoble final, y se escuchó la orden de "¡Rompan filas!", corremos en estampida a ganar el mejor sitio para ver pasar en su marcha inaugural al Colegio Santiago el Mayor que cierra el glorioso transcurrir de los batallones que desfilan en este año.
El anhelo de ver este acontecimiento al parecer es del alumnado de todos los planteles de Educación Primaria, porque ya disueltos invadimos en avalancha la plaza y reventamos los emplazamientos de la calle frente al Municipio.
Pero no solo los niños, sino que toda la población está pendiente de ver pasar a esas columnas de argonautas como son para nosotros los alumnos y alumnas del Colegio Santiago el Mayor.
 
5. Soldado
raso
 
Por eso, cuando se anuncia el ingreso del Colegio por la bocacalle de la plaza, en línea recta con la tribuna oficial, el griterío de la gente estalla y el cordón humano, que a duras penas sostenemos los que estamos adelante, se rompe en varios puntos.
Pero empujamos hacia atrás con todo el peso de nuestro cuerpo, en los hombros y en la espalda, deteniendo la arremetida. A ratos cedemos con riesgo de ser maltratados por los policías, quienes pasan golpeando con sus varas a los se han atrevido a ceder siquiera un paso hacia delante, ante el empuje incontenible que viene desde atrás.
Allí es cuando desde lejos resuena el estallido de cornetas que nunca antes hemos escuchado:
– ¡Es la banda de guerra del colegio!
– ¡Viene la banda de guerra del colegio! –Es la voz unánime.
Los instrumentos han sido donados por el General de División Carlos Miñano Mendocilla, héroe de la Batalla de Zarumilla, nacido en las pampas de Samada en la parte rural de Santiago de Chuco, y quien ha ascendido desde soldado raso hasta cubrirse de gloria cuando tenía el grado de coronel en el conflicto bélico del año 1941.
– ¡Viva Santiago de Chuco! ¡Viva el Perú! – Se escucha una voz.
– ¡Viva! –Responden todos.
 
6. Los reflejos
del sol
 
Ya cerca los redoblantes atruenan el aire y avanzan por entre la calle abierta por el gentío, con el aplauso y los vítores de quienes se apostan en la vereda y en los muros aledaños.
Y asoman ante nuestras miradas deslumbradas y atónitas las circunferencias plateadas de puro metal, de cueros traslúcidos y atornillados con rojas mariposas, con banderines que casi se arrastran por el suelo, las nuevas tarolas de la banda de guerra del colegio, nunca antes vistas por nuestros ojos estupefactos.
¡Con cuerdas que atraviesan su circunferencia y le dan aquel sonido áspero, dulce y, a la vez, altivo a sus compases!, ¡tal y como debe ser el fragor de una batalla!
Los muchachos que las tocan parecen tener otro talante, como si no los conociéramos. Se alinean bajo los ventanales del viejo Municipio, alzando las rodillas como si marcharan en su propio sitio. Y nosotros subyugados de ver una luz nueva del sol en los reflejos que desprenden y en los acordes que se elevan desde esos prodigios.
 
7. El pecho
henchido
 
Pronto el corneta mayor, cuan alto es y con ceño fruncido, hace girar su clarín en el aire. A lo que sigue un revuelo de banderines de que están adornadas las cornetas.
Las embocan en sus labios y luego, a una señal, soplan endureciendo los carrillos de sus caras y el contorno de sus labios.
Y emerge nueva la “Marcha de banderas” que resuena en nuestros corazones con sonido absoluto, sideral e infinito. Que la oímos como si fuera la primera vez, y que nos parece una música divina.
Sones que levantan del fondo de los abismos todo lo sufrido, lo amado y también la más prístina alegría y esperanza que nos cabe albergar hacia el futuro más prominente.
En eso, aparece a lo lejos y hacia el fondo, sereno e inhiesto, el pabellón nacional rojo y blanco, emergiendo del tumulto que hacen las cabezas y los cuerpos arracimados de la gente sencilla.
Es portado por la escolta de mujeres que visten uniforme de gala de paño azul con cuello blanco, llevando un brazalete amarillo con bordes rojos y negros y la escarapela del Perú en el pecho henchido.
 
8. Cuerpo
y espíritu
 
Detrás de la escolta un manojo impresionante de muchachas y muchachos, a quienes al golpe de los pasos en el suelo les tiemblan las mejillas, con la mirada fulgurante y el ceño endurecido de guerreros que portan en el alma y el ser algo sagrado.
Y así pasó, o no pasó nunca, sino que se quedó para siempre en nuestras almas, el desfile del colegio de mi pueblo, marchando como jamás habíamos visto, ni imaginado antes que se pudiera marchar; con otra fuerza, con una convicción mayor, con un mundo nuevo sobre la frente y bajo sus pies.
Aquella realidad no estaba solo en la marcialidad de sus pasos, ni solo en la templanza de sus cuerpos, ni solo en la seriedad de sus semblantes, ni solo en los vítores de la gente. Ni tampoco solo en las lágrimas de los ojos de hombres, mujeres y niños que los veían desfilar, sino en mucho más.
Una emoción profunda invadió al gentío que aplaudía y en los ojos de todos nosotros se escarchaba el coraje, la ilusión y la esperanza hecha cuerpo y espíritu.
Lo vimos avanzar en formación perfecta, la mirada puesta en un mundo sublime entre el atronar de las cornetas, los vítores y los aplausos de la gente.
 
9. Dones
de la tierra
 
Era una marcha triunfal frente a las tribunas oficiales en la ceremonia de gala de aquel día memorable y en aquel colegio con temblor de leyenda y de fábula.
¡Era nuestro pueblo, puesto de pie; ¡con toda la esperanza depositada en el horizonte lejano y límpido, pleno de amatistas y diamantes en esa mañana radiante del mes de julio!
– ¡Ya puedo morir tranquilo! –Dice un viejo restregándose los ojos con un pañuelo.
– ¡Es el Dios de los cielos y nuestro Apóstol Santiago bendito, quienes premian así a nuestro pueblo!
– Es la bondad de la gente la que hace posible ver estos dones de la tierra.
– Son los buenos profesores los que preparan así a nuestros muchachos y a quienes debemos estar agradecidos.
– ¡Vivan los profesores! –Grita alguien.
– ¡Vivan los estudiantes! –Replica otro.
– ¡Viva Santiago de Chuco! –Anima alguien.
– ¡Viva!
 
*****
 
Los textos anteriores pueden ser
reproducidos, publicados y difundidos
citando autor y fuente
 
dsanchezlihon@aol.com
danilosanchezlihon@gmail.com
 
Obras de Danilo Sánchez Lihón las puede solicitar a:
Editorial San Marcos: ventas@editorialsanmarcos.com
Editorial Papel de Viento: papeldevientoeditores@hotmail.com
Editorial Bruño, Perú: ventas@brunoeditorial.com.pe
Ediciones Capulí: capulivallejoysutierra@gmail.com
Ediciones Altazor: edicionesaltazo@yahoo.es
 
  *****
DIRECCIÓN EN FACEBOOK
HACER CLIC AQUÍ:
 
 
*****
 
Teléfonos Capulí:
393-5196 / 99773-9575
 
capulivallejoysutierra@gmail.com
 
Si no desea seguir recibiendo estos envíos
le rogamos, por favor, hacérnoslo saber. 


 
CON  VALLEJO  EN  LOS ESTADOS  UNIDOS

Por Ricardo Calderón Gutierrez

Presidente del Instituto de Cultura Peruana de Miami-Florida.

En ocasión del Primer Encuentro de Autores: “Perú, al Pie del Orbe”, a 100 años de los Heraldos Negros de C. Vallejo,  hago un recuento de lo que se hizo y se hace en los Estados Unidos por este poeta, ya que él en vida no pasó por estas tierras del Tio Sam, de haberlo hecho, tal vez hubiese escrito algo similar a lo que hizo su contemporáneo, el poeta granadino Federico Garcia Lorca, cuando visitó Nueva York en1929, dejándonos su famoso libro Poeta en Nueva York. Ya sabemos que Vallejo dejó sus huellas en los países que visitó, prueba de ello son sus libros sobre Rusia: Rusia 1931 y Rusia ante el Segundo Plan Quinquenal, sus versos escritos en Francia (“Me moriré en París con aguacero ...), y ese tremendo libro: España, aparta de mí este cáliz, con el tema de la guerra civil española, lo que Picasso pintó en su obra Guernica y a Federico García Lorca le costó la vida. Quizás Vallejo hubiese escrito un libro con el título de "Tio Sam, aparta de mi este cáliz", pero como no tuvo oportunidad de llegar a estas tierras, lo que ahora nos interesa es rastrear el conocimiento que se tiene sobre él en este país. Está demás decir que él es materia de estudio en los centros de educación de las letras españolas, sus obras son examinadas por los especialistas en literatura, quienes nos sorprenden con sus libros, ensayos y artículos en periódicos y revistas con temas vallejianos. Con frecuencia hay conferencias y recitales de su poesía, como el que a mí me tocó organizar el 18 de marzo de1992, año en el que se celebraba en el mundo entero el centenario de su nacimiento. Yo acababa de fundar el Instituto de Cultura Peruana en Miami y no podía dejar que esa fecha pase desapercibida por la puerta de mi casa. Aquella vez tenía grandes ilusiones en cuanto a promover la cultura peruana en un lugar extraño y ajeno que desconocía nuestras tradiciones, valores, fechas patrióticas, idiosincrasia, historia, música, folclore, creencias y todo aquello que hacen del Perú, un país diferente a los demás que tienen su cuota de representantes en esta ciudad, haciendo de Miami un mosaico interesante de culturas. Yo sabia cuantos peruanos vivíamos aquí -más de 50,000-, y sabía cuantas instituciones representativas teníamos aqui -más de 20- además del Consulado del Perú. Con esta base de apoyo decidí rendirle un homenaje a Vallejo en fecha tan importante. Conseguí el auditorio del Centro Graham de la Universidad Internacional de la Florida. Se publicaron notas de prensa, y hasta el Concejo Municipal de Miami-Dade preparó un pergamino proclamando esa fecha como el "Día de César Vallejo" en esta ciudad. Llegado el momento del acto, yo hablé sobre la vida de Vallejo, la doctora Clavijo presentó un estudio sobre la obra del poeta, y un declamador presentó una selección de su poesía que caló hondo en el sentimiento de los asistentes al acto. El poema “Masa” me hizo pensar en que Vallejo era el cadáver de quien habla él mismo allí, pues, que uno o dos hablen del poeta no es suficiente, cien mil, quinientos mil tampoco, la humanidad entera tiene que oír su mensaje de solidaridad humana. Pues, "hay, hermanos, muchísimo que hacer", lo dijo Vallejo en su poema “Los nueve monstrous”, lo cual les repito a mis compatriotas que viven dentro y fuera del Perú, hay mucho que hacer por él. Guiado por este pensamiento volví a hacer algo por él en marzo de 1994, convoqué a un concurso de poesía y narración en su nombre al que concurrieron un centenar de escritores de diferentes nacionalidades desde varias ciudades de los Estados Unidos y Canadá. En el transcurso de ese año difundí la obra de Vallejo a través de la prensa, peñas literarias y en el acto de entrega de los premios del concurso. A través de estas actividades fui informándome de lo que otros peruanos en otras partes de los Estados Unidos hacen por él. Un día me enteré de la existencia de una asociación de mis compatriotas en New Jersey con el nombre de “Sociedad Cultural César Vallejo”. Otro día recibí unas revistas de la “Asociación de Médicos Peruanos de Chicago”, en las que habían publicado varios artículos sobre el poeta.

El 15 de abril del 2011 le organicé otra vez un homenaje a nuestro poeta universal, en cuyo honor el gobierno peruano promulgó una ley estableciendo el 15 de abril de cada año como el Día de la Poesía. En esta fecha murió Vallejo en París en 1938 en el abandono y lejos de su patria. Fecha del que él ya había escrito: “Me moriré en París con aguacero, un día del cual tengo ya el recuerdo…“.

En otras oportunidades asistí a recitales de su poesía presentadas por organizaciones no peruanas, lo que me dio a entender que la difusión de la obra de nuestro poeta no era asunto sólo de peruanos: Vallejo, es un poeta universal.

Este año del  2018, es la tercera vez que nos dedicamos a promover a Vallejo en esta parte de los Estados Unidos. Esta vez con la adición de su viuda Georgette Philipart, quien no solamente fue su esposa sino guardián y promotora de la obra de Vallejo. A nombre de ambos hemos convocado a nuestro XXVII Concurso internacional de poesía y narración, en el que han participado escritores de 7 países: Uruguay, Argentina, México, Perú, Panamá, Cuba y Guatemala,  cuyos triunfadores en poesía son: Primer Lugar: José Lissidini Sánchez (Uruguay), Segundo Lugar: Alexis Soto Ramírez y Tercer Lugar: Marco Antonio Guerrero Caballero (Perú). Menciones: Raúl Heraud (Perú), Berenice De la Cruz (USA), Robert Allen Goodrich Valderrama (Panamá), Rosa Fuentes (Cuba) y Fidel Alcántara Lévano (Perú). En narrativa, los concursantes premiados son los siguientes: Primer Lugar: Bertha L Jacobson (México), Segundo Lugar: José Lissidini Sánchez (Uruguay) y en Tercer Lugar: Frank Otero Luque (Perú). Menciones: Luis Rudy Xalin Balán (Guatemala), Damary Ordones (Cuba), Ana Kika López (Cuba), Gladys C. Arenas de Cuaboy (Perú) y Elver Renferí Herrera (USA), cuyos trabajos premiados en primer, segundo y tercer lugar serán publicados en nuestra antología anual que saldrá a luz el próximo mes de diciembre.

En la primera jornada de este Primer Encuentro de Autores: “Perú, al pie del Orbe” a 100 años de los Heraldos Negros de Vallejo, que tuvo lugar en Miami los días 27, 28 y 29 de julio,  tuvimos la presencia del Dr. Danilo Sánchez Lihon, presidente de Capulí, Vallejo y su Tierra, Jaime Sánchez Lihon, Ángel Edgardo Chirinos Lavander, Omira Bellizzio, Lyerka Bonanno, Addhemar Sierralta, Francisco Henríquez, Rossana Solari, Juan Chaparro, Liana Avalos, Chaco Gil e Isabel Illanez Narro, quienes presentaron muestras de sus trabajos literarios que permanecerán en estas tierras, del mismo modo como se conserva aquí la obra “La Florida del Inca” de nuestro compatriota el Inca Garcilaso de la Vega, cuyo busto adorna una de las principales avenidas de esta ciudad.

Considerando que este certamen nació en esta ciudad para permanecer en el tiempo, nos comprometemos repetir este evento aquí el próximo y los años subsiguientes en esta misma fecha, en homenaje a otros escritores peruanos cuyo legado debemos conservar. Vaya pues desde hoy nuestra invitación a escritores peruanos y no peruanos e instituciones literarias a asistir a este evento de hermandad literaria.

Agradezco la presencia de los asistentes a este evento que acaba de finalizar, y agradezco también  el apoyo del Consulado del Perú, de Miami-Dade County Gobernment,  del periódico La Visión de Atlanta, GA, y de todos los que contribuyeron en la promoción de este evento.
  Certamen: “Perú, al Pie del Orbe” en Miami, organizado por el Instituto de Cultura Peruana (ICP)  y Capulí, Vallejo y su Tierra, en los días de Fiestas Patrias del 2018.
                             
En el marco del certamen “Perú, al pie del orbe”, organizado por Capulí, Vallejo y su Tierra y el Instituto de Cultura Peruana, realizado en la ciudad de Miami los días 27, 28 y 29 de julio del año 2018,  rendimos homenaje al Inca Garcilaso de la Vega visitando su monumento en el centro de esta ciudad del estado de Florida en los EE. UU.
 
IMÁGENES DEL ENCUENTRO