miércoles, 24 de octubre de 2018

EL MUNDO ANDINO: GLOBALIZACIÓN E IDENTIDAD - CONVERSACIÓN CON JOSÉ PABLO QUEVEDO - POR DANILO SÁNCHEZ LIHÓN

 
 

Construcción y forja de la utopía andina
 
2018 AÑO
DE LA IDENTIDAD Y DEL PATRIMONIO
INALIENABLE DE NUESTROS PUEBLOS
 
OCTUBRE, MES DE LA SALUD,
LA ALIMENTACIÓN, LA GESTA
DE ANGAMOS; VIDA Y EJEMPLO
DE MARIO FLORÍAN Y LUIS
DE LA PUENTE UCEDA
 
CAPULÍ ES
PODER CHUCO


 
SANTIAGO DE CHUCO
CAPITAL DE LA POESÍA
Y LA CONCIENCIA SOCIAL


 
*****
 
HOY:
PRESENTACIÓN DE LIBRO
Y HOMENAJE
A JOSÉ PABLO QUEVEDO



MIÉRCOLES 24 DE OCTUBRE. 6 PM.
PROGRAMA
1. SEMBLANZA. VIDA Y OBRA
DE JOSÉ PABLO QUEVEDO
RAÚL GÁLVEZ CUÉLLAR


2. PRESENTACIÓN DEL LIBRO:
“JOSÉ PABLO QUEVEDO
Y LA UTOPÍA ANDINA”
DE DANILO SÁNCHEZ LIHÓN
RAMÓN NORIEGA TORERO


3. PALABRAS DE HOMENAJE
DANILO SÁNCHEZ LIHÓN



4. AGRADECIMIENTO
Y LECTURA DE OBRA POÉTICA.
JOSÉ PABLO QUEVEDO



5. RECONOCIMIENTOS Y DIPLOMAS
6. REGISTROS FOTOGRÁFICOS
7. CENA DE CONFRATERNIDAD
8. TRIBUNA LIBRE PARA ALOCUCIONES
DECLAMACIÓN DE POEMAS, CANCIONES
CONDUCTOR DE LA ACTIVIDAD
SAMUEL CAVERO GALIMIDI


LOCAL:
AV. FRANCISCO MARIÁTEGUI 1779
JESÚS MARÍA
(CUADRA 18 DE LA AV. BRASIL)
ADHESIONES: TELF: 997-739-575 / 393-5196
CAPULIVALLEJOYSUTIERRA@GMAIL.COM


 
*****
24 DE OCTUBRE
 
EL
MUNDO
ANDINO

 
FOLIOS
DE LA
UTOPÍA


 
GLOBALIZACIÓN
E
IDENTIDAD


 
CONVERSACIÓN CON
JOSÉ PABLO QUEVEDO


Danilo Sánchez Lihón
 
Fue muy significativo para mí, cuando conocí a José Pablo Quevedo, hace ya muchos años, encontrar en él a un escritor peruano que hacía décadas que se había alejado del país para vivir en Alemania, pero que mantenía una visión cálida, floreciente y llena de luz acerca del mundo andino.
¿Cómo es posible, me decía yo, que él estando en Europa y ya hacía tantos años desvinculado del Perú, pudiera mantener tan viva y militante su noción del mundo andino, siendo él un costeño peruano, pues nació en Piura y, además, con una relación tan plena como él mantenía con la cultura europea? ¿Cómo era dable que se encuentre lejos, pero a la vez mantenga tan viva, fresca y actuante a la cultura andina?
Esto me maravilló y me sigue maravillando. Y es que él, en contraste con lo que encontró en Europa, supo encontrar en su genética un referente valioso con lo cual hacer frente a todo lo deformado que había constatado que se daba en el viejo mundo. Ahora es más todavía: que en sus palabras se siente el viento tenue del amanecer serrano. Como también el viento impetuoso y huracanado de su verbo y de su mensaje sustentado y arraigado totalmente en el mundo andino.
Esa es su bandera, esa es su ideología y su consigna; es ahora su filosofía en quien ha sido profesor de estas materias en una de las universidades más prestigiosas del mundo, como es la Universidad Humboldt de Berlín. Aprendamos de él acerca del mundo andino, hacia donde viene frecuentemente, además trayendo delegaciones de ciudadanos alemanes, hombres y mujeres, la mayoría de ellos hombres de ciencia y artistas que admiran este mundo nuestro que frecuentemente nosotros estando aquí, y siendo nuestro desestimamos y hasta desechamos. Por eso, nada mejor que conversar con él y más bien escucharlo. DSL
 
DSL: José Pablo: decir mundo andino significa mirar y reflexionar nuestra realidad, pero desde otra perspectiva, desde la orilla opuesta a la del sistema dominante y dentro del cual vivimos, que rige y pautea nuestras vidas. Es mirar desde la otra vertiente, si es que reconocemos que entre nosotros hay dos orillas muchas veces en conflicto y todavía irreconciliables: por un lado, el mundo hispano, occidental y capitalista. Y el mundo andino comunal, ancestral y originario, puesto que surgió y alcanzó pujanza, de estas tierras. A eso se suma que hay lo andino anterior y milenario, y hay lo andino actual y presente. Ese “otro mundo”, que está más bien cerca o dentro del ande, en qué medida es vigente y tiene futuro. Y, al respecto, también quisiera conocer tu opinión en relación a otro punto importante: ¿de qué manera consideras tú que el mundo andino tiene elementos que pueden ayudarnos a resistir el fenómeno deshumanizante de la globalización?
José Pablo: En efecto, Danilo, el capitalismo no es la última palabra en el desarrollo de la historia de la humanidad. El capitalismo está en una crisis permanente de valores materiales y espirituales, pues ha creado esos dos polos extremos, como lo ha creado entre la riqueza y la pobreza, un mundo que pertenece a los grandes monopolios, que es un grupo de privilegiados, por un lado y, por otro, grandes masas de trabajadores pauperizados y muchos otros que carecen de trabajo y que están aún en peores condiciones. Como ha creado las guerras, la producción de bienes innecesarios como las armas, el consumismo, la destrucción de la naturaleza y la enajenación del hombre, cuáles son todos ellos contenidos y realidades decadentes. 
Por el contrario, el mundo andino, ha permanecido resistente y armónico frente a la naturaleza y la vida humana, pues ha sido un ámbito que está adherido a estas manifestaciones, en lo que corresponde a la producción de bienes y valores materiales y espirituales, con sus expresiones frente al trabajo colectivo, la cooperación, la propiedad comunal como forma de garantizar la vida y la existencia de los otros seres vivientes.
Y comprendiendo ello hasta con el reparto equitativo de los bienes; amen de tomar precauciones en lo que llamamos la solidaridad frente a las catástrofes y sequías naturales, frente al trabajo de los viejos y los jóvenes y también el a la distribución preventiva de los productos; y, además, inculcando valores espirituales de índole comunal, creando con ello una psiquis de coherencia y de armonía en el grupo social y con la naturaleza circundante en particular.
 
DSL: Tú mejor que nadie, José Pablo, sabes que el mundo andino es aquel por el cual luchamos desde el movimiento cultural Capulí, Vallejo y su Tierra, para quienes el mundo andino constituye una filiación y una fe inquebrantable por el cual ejercemos una militancia efectiva, reconociéndolo como utopía real y efectiva, inatajable y moral, y que hemos de sostener a costa de nuestra propia vida.
Mundo andino que identificamos con lo íntimo y entrañable, así como en coherencia con lo universal y hasta cósmico. Que es, además, aquello que no se vende, que no tiene precio en el mercado ni comercializa; que no entra en el esquema de lo mercantil. Y por ser así, por mantener este esquema, como por sus contenidos y sus valores es lo único que puede hacerle frente al fenómeno de la globalización que lo identificamos como una amenaza para la civilización y hasta para la humanidad.
En donde ha surgido el hombre lobo del hombre. Que, además, cava su propia sepultura, puesto que todo lo destruye y aniquila en aras de su voracidad, de su insaciable consumismo, atentando en contra del medio ambiente y demoliendo el planeta donde vivimos, que es otro de los grandes problemas del mundo contemporáneo. Yo te pregunto: ¿el mundo andino qué enseñanzas nos prodiga a este respecto?
JPQ: En el mundo andino la naturaleza fue y es un Dios sagrado, al cual había y hay que respetar, pues era y es el Dios creador y protector de todas las cosas. La naturaleza era y es venerada por todos los hombres. El mundo de arriba, como los astros, y el de abajo como las fuentes de agua era y es reverenciado, así como las aguas de superficie, los manantiales, el mar, los cerros, las montañas, y muchos animales y hasta las plantas. Un legado de esos valores espirituales está impreso en la piedra en una simbología de ese mundo en muchas culturas ancestrales, pero también en la misma conducta actual del hombre andino. Y por eso, se ha dicho en él que el hombre no puede dominar la naturaleza, como piensan y actúan las civilizaciones industriales, sino convivir con ella y complementarla.
El pensamiento del mundo capitalista nos está poniendo al borde de grandes abismos frente a las catástrofes del descongelamiento de los polos, de las grandes cloacas de plásticos existentes en el mar, y de la contaminación del aire y de la tierra, en donde vemos la mano del llamado "hombre civilizado" y del capitalismo salvaje, los cuales consideran al consumismo y la ganancia como sus únicos valores. Es notorio pues, ver estos dos mundos antípodas en estos días, en el cual hay que valorar más al mundo andino y contradecir lo que el capitalismo viene creando.
 
DSL: Ahora bien, el mundo occidental pareciera apabullar y sojuzgar a los pueblos y arrasar con otras culturas, por la contundencia de su arte, su ciencia y su técnica que relumbran de una manera fantástica.
Pero, sobre todo, por las hazañas de su tecnología, uno de cuyos efectos contraproducentes es que está convirtiendo a los hombres en robots. Lo vemos incluso ahora en los entretenimientos y pasatiempos de niños y jóvenes edades hacia las cuales ha invadido esta tendencia, quienes están pendientes más bien de sombras e imágenes que se dan en esos juegos que son los Nintendo y PlayStation.
En cambio, el mundo andino mantiene unos principios de vida, en su arte y en su ciencia que no nos desvinculan ni atentan en contra del mundo natural; que es arte, ciencia y técnica, en vínculo armonioso con la naturaleza y la vida. Para ti, José Pablo, ¿qué consideraciones y que trascendencia nos enseñan el arte y la ciencia del mundo andino?
JPQ: Las obras del mundo andino son imperecederas en el tiempo y el mismo espacio, como lo son los hombres que las fomentaron. Y es que son grandes contribuciones a la humanidad, pues son obras de gran acabado, creatividad y hasta de genialidad. Ellas están resistiendo en sus columnas y bemoles ante los ojos del mundo que las admira, y ante la Europa que se considera el "Viejo Continente". Pues cuando nos adentramos a este arte, vemos su originalidad en su creación, distinta, acaso, de los acabados de otras civilizaciones, desde sus etapas sui-géneris.
Y en ellas, he visto las formas de su pensar y de su filosofía natural, su "panteísmo", por ejemplo, en la producción de sus trabajos. He visto también la laboriosidad de los alfareros en la creación realista de los huacos (fotos-retratos); en la creación de los tejidos de lana y de algodón y en los trabajos en la piedra y entre los sueños del San Pedro, que nos hacen recordar los motivos mágicos y hasta surrealistas.
También el colorido dado a los vasos y utensilios, y en otros casos, manteniendo los colores de la tierra. Y aún más, sus obras monumentales, de gran acabado, de técnica, de experimentación y hasta de majestuosidad; obras inimitables y que la humanidad no podría reproducir, aún, con una técnica de vanguardia más avanzada y que muchos artistas modernos toman como ejemplo estos motivos para visualizar su arte.
Como su ciencia y su técnica son grandiosas, y aún más, recientemente estudiada en forma científica e interdisciplinaria, y que fueron objeto para ver las formas variadas del trabajo para la construcción de bienes materiales y espirituales, sea de canales y acueductos, sea de la construcción de terrazas, casas, almacenes, templos y caminos, hechas como obras monumentales de ingeniería. No hay pues, nada que envidiar al mundo moderno, con estas obras que estuvieron también adjudicadas en provecho de los hombres en comunidad y para la felicidad de los mismos.
 
DSL: Ahora nos acorrala y atenaza otro fenómeno, cuál es el de la corrupción; ante la cual tenemos la culpabilidad de que si somos así nuestra índole y naturaleza es que estamos dañados, y entonces somos malos y perversos, cuando esas lacras han sido traídas desde afuera.
El mundo andino jamás fue corrupto. Estos no son problemas que nosotros los hayamos inventado. Son problemas que nos vienen de afuera. No es invento nacional, es el capitalismo que nos lo impone. Esta no es nuestra cultura.
Europa siglo tras siglo ha sido invadida por este mal. En Norteamérica del siglo pasado está documentado cómo se compraban votos. Fueron procesos judiciales que son públicos de cómo el cabildero Felps compró votos de legisladores para detener leyes restrictivas a la venta de medicamentos falsos.
Nada de lo inicuo y aberrante es invento nuestro. Pero eso sí, mientras sea oportuno actuemos frente a toda corrupción de manera implacable. Y decir ¡no a la delincuencia!, ¡no al delito! No podemos ser impasibles, y tiene que haber reacción de los buenos y basados en el mundo andino, frente a los males. Para ti, ¿cuáles son las perspectivas, José Pablo, para una cultura de la resistencia frente al fenómeno de la globalización y sus prácticas de corrupción?
JPQ: Resistir es siempre construir algo nuevo, pero también construir con los elementos y valores necesarios y permanentes para el hombre. Para ello es necesario desarrollar no una negación mecánica de la vida y de la sociedad, sino dialécticamente, de superación, pues de esos elementos del pasado han quedado enseñanzas valiosas, materiales y espirituales a las cuales debemos de acudir con nuestras consideraciones adecuadas.
No queremos hacer una copia de la copia, sino algo diferente, no queremos hacer el eterno retorno de lo mismo, sino el retorno de algo renovado, de algo que contenga el legado más valioso de la creación humana. Con ello, no se trata de idealizar la vida solamente en su totalidad, sino en las partes constituyentes que sustentan la vida misma en aras de un mundo futuro y mejor para todos, es decir, en una sociedad en donde no exista la opresión y la explotación del hombre por el hombre.
En donde no peligre la existencia de los mismos hombres, donde no esté amenazada por la pobreza; donde la naturaleza no sea el objeto de explotación por unos cuantos monopolios y usufructuada por algunos hombres; en donde no existan las diferencias abismales entre clases sociales, pero tampoco el hombre sea enajenado y viva sin derecho a la libertad o dentro de las leyes del consumismo. Donde es necesario tener una vida para la reproducción y para el tiempo libre.
Resistir culturalmente, significa valorar el trabajo en dignidad que hace a los hombres casi como hermanos dentro de un Estado social y solidario; en democracia verdaderamente consultativa y participativa de sus miembros; y sin permitir la corrupción y la existencia de mafias organizadas, caso que se da en las sociedades capitalistas.
Resistencia, significa: Superación y valorización del mundo andino, pero es también integración de los hombres y de intelectuales dentro de un colectivo con nuevas ideas creadoras, significa dar nuevos pasos adelante, relacionando el pasado con el presente, pero teniendo objetivos claros hacia el futuro. Significa tener en alto las banderas de sus grandes precursores, mártires e intelectuales, para integrar esas ideas con otros intelectuales de vanguardia dentro de las luchas contra el liberalismo, el capitalismo y la dominación.  Que el escritorio nos sirva para fecundar las ideas y que esas ideas nos sirvan para ligarlas a nuestra praxis. El escritorio, la idea y la praxis sean esa unidad de lucha de resistencia del mundo andino frente al mundo globalizado y la corrupción.
 
DSL: Tú sabes, José Pablo, que nosotros nos apasionamos e identificamos plenamente con el mundo andino, también porque es opuesto al sistema ahora dominante, que no lo acata y, es más: lo subvierte.
Ahora bien, el mundo globalizado está tan cohesionado que pareciera caber en una sola mano; se ha vuelto y se ha tornado pequeño, y se lo puede conocer y dominar muy pequeñamente.
Se ha reducido. Antes todo era distante y lejano. Y había ámbitos impenetrables. ahora todo es cercano y asequible, y hasta inmediato. Las comunicaciones son instantáneas y se viaja constantemente por todo el mundo. Los transportes y las comunicaciones son tan eficaces que ya la nuestra es una aldea, en donde sin embargo lo que se han agigantado son los problemas, hasta el punto de volverse monstruosos.
Pareciera que a los problemas y a los males le hubieran crecido mil cabezas. Parecen esperpentos mitológicos en un ámbito que se ha empequeñecido. Donde, sin embargo, lo que se hace mal cada día pareciera amenazar la propia supervivencia humana sobre la faz de la tierra. ¿Qué tenemos que hacer?
JPQ: He referido que el mundo andino y el mundo capitalista son dos mundos históricos en confrontación. Uno que va al lado de la vida, de la armonía con la naturaleza y hasta de la felicidad del hombre y, el otro, que viene creando el consumismo, la enajenación mental del hombre, la creación de fuerzas destructivas, la destrucción ambiental, y el recalentamiento del planeta. Ello conlleva a integrar también a los intelectuales y relievar los valores que han permanecido vigentes en el mundo andino, e integrarlos en un programa de lucha para mejorar el mundo y avanzar hacia otro mejor. Y dentro de ello cabe:
a) Un trabajo integrador y creador y reflexivo de los intelectuales en donde se destaquen objetivos del trabajo colectivo (de piña) y que vayan hacia objetivos humanos, solidarios y trascendentes. Ello nos conlleva a un programa de acción realista, el cual nos diga también que, en este trabajo no se anula la personalidad del autor, sino que, en este trabajo colectivo, cada individualidad destaca con su propia personalidad creativa, se cuantifica y se consolida.
b) Un trabajo que, debe de ser integral y solidario frente a las tareas que tenemos en relación a los grandes problemas de nuestro tiempo, ya que se dan de manera global y que no podemos solucionarlos en forma individual. En ello, los intelectuales debemos de contribuir creando esa consciencia de un mundo sensibilizado, no pesimista o fatalista o solamente consumista de la vida; sino creando en el lector las imágenes de esclarecimiento de una vida sana, humana, en armonía con la naturaleza y de solidaridad. Con ello promover una consciencia de la actividad consciente tanto en el intelectual como en el lector.
 c) Buscar la integración de los intelectuales; ya que, en un mundo globalizado, también esa integración debe de ser global, integrando con ello, a otros intelectuales de otros países con fines comunes, para hacerles comprender las enseñanzas que tiene el mundo andino, que son afines y tratar de insertar el contenido del mismo dentro de sus programas en la lucha actual. Ellas podrían ser incluidas en la llamada Aldea Global de los intelectuales, en la cual vienen trabajando muchos intelectuales europeos de la actualidad. En todo ello, como expresaba César Vallejo, “hay hermanos humanos, muchísimo qué hacer”.
 
*****
 
Los textos anteriores pueden ser
reproducidos, publicados y difundidos
citando autor y fuente
 
dsanchezlihon@aol.com
danilosanchezlihon@gmail.com
 
Obras de Danilo Sánchez Lihón las puede solicitar a:
Editorial San Marcos: ventas@editorialsanmarcos.com
Editorial Papel de Viento: papeldevientoeditores@hotmail.com
Editorial Bruño, Perú: ventas@brunoeditorial.com.pe
Ediciones Capulí: capulivallejoysutierra@gmail.com
Ediciones Altazor: edicionesaltazo@yahoo.es
 
  *****
DIRECCIÓN EN FACEBOOK
HACER CLIC AQUÍ:
 
 
*****
 
Teléfonos Capulí:
393-5196 / 99773-9575
 
capulivallejoysutierra@gmail.com
 
Si no desea seguir recibiendo estos envíos
le rogamos, por favor, hacérnoslo saber.