domingo, 11 de febrero de 2018

SANTIAGO DE CHUCO Y ESTOS DOS MAESTROS - ESCRIBE ÁNGE GAVIDIA RUIZ

Maestros: Franscisco Benites Gastañaduí y Francisco Miñano Benites
Foto: Ángel Gavidia Ruiz

SANTIAGO DE CHUCO Y ESTOS DOS MAESTROS 
 
 Escribe Ángel Gavidia Ruiz 

Santiago de Chuco tiene al frente unos cerros horizontales  que no sé si serán de las penas como decía Vallejo y  tiene también unos caminos blancoscurvos por donde va el corazón a piecomo sigue diciendo el poeta y de ello sí doy transido testimonio; tiene, además,   eucaliptos centenarios, sus cuevas de Huacapongo y su río Patarata. Esto, digamos, como su pertenencia física. Pero tiene, también, personajes tan sólidos y referenciales como los mismos cerros y entre ellos están “los Panchitos”. Digo están aunque ya han partido, porque, como  refiere el maestro Carlos Alberto Seguín, en el mundo real del espíritu solo existen encuentros y nunca despedidas y así como el río ya no podría irse jamás del roble cuyas raíces alguna vez regara, o el picaflor  del  árbol cuyo polen transportó , así, esos hombres  que dejaron sus vidas sembradas en las aulas, en las calles y por qué no decirlo,  en los acogedores guariques santiaguinos serán para siempre parte de la más alta y fluyente  santiaguinidad. 

Panchito Benites Gastañaduí fue profesor de mis últimos años de primaria. Recuerdo de él su empeño tesonero porque todos aprendiéramos y su honestidad a toda prueba; claro, está también su vocación por la música y por el teatro y su desprecio por todo lo que fuera figuración y  oropel. ¿En qué estante, me pregunto, estará reposando su inseparable diapasón? 

Panchito Miñano Benites lo conocí después, en el empeño por la búsqueda de las huellas del Poeta Mayor. Me sorprendió su versación vallejiana e inquietud intelectual incólume a pesar de sus años. Quedamos mil veces en reunirnos para espulgar los santiaguinismos dispersos en la poesía de Vallejo. Creo que yo fallé. Queda como una tarea pendiente y acaso como un homenaje al maestro santiaguino.  

Termino tratando de trasladar al papel aquel encuentro entre los dos Panchitos y este escribidor. Fue en Santiago, en torno a unas cervezas que de tan agradables parecían aladas. En ellas nos remontamos por esos parajes del espíritu en donde solo cupieron  un abrazo casi como una ronda infantil y  unas lágrimas de emoción y  de  gratitud por la vida. 

Ángel Gavidia, Danilo Sánchez Lihón, Francisco Miñano y José Cruzado Gamboa
Casa de César Vallejo - Santiago de Chuco
 Foto: Nalo Alvarado Balarezo