sábado, 7 de octubre de 2017

7 DE OCTUBRE: DÍA DE LA MARINERA - FOLIOS DE LA UTOPÍA: EL FUNDADOR DON ABELARDO GAMARRA - POR DANILO SÁNCHEZ LIHÓN

 

Construcción y forja de la utopía andina
 
2017 AÑO
DE LA IDENTIDAD Y DEL PATRIMONIO
INALIENABLE DE NUESTROS PUEBLOS
 
OCTUBRE, MES DE LA SALUD,
LA ALIMENTACIÓN, LA GESTA
DE ANGAMOS; VIDA Y EJEMPLO
DE MARIO FLORÍAN Y LUIS
DE LA PUENTE UCEDA
 
CAPULÍ ES
PODER CHUCO


 
SANTIAGO DE CHUCO
CAPITAL DE LA POESÍA
Y LA CONCIENCIA SOCIAL


 
*****
 
DÍA INTERAMERICANO DEL AGUA:
EL AGUA DE LAS ACEQUIAS


 1.
En el camino de regreso de la escuela a casa en mi pueblo, que es Santiago de Chuco, mientras estudiamos la Educación Primaria, nos detenemos en algunas esquinas. Y lo hacemos porque allí se abre un pozo de la acequia, por donde fluye el agua corriente del alcantarillado.
Y que se teje por debajo de la tierra apisonada, o en parte empedrada con chungos traídos desde las orillas de los ríos, y que entrelazan una red embrujada. Porque el agua sube y baja por mil recovecos en todo lo que es el cuero de zorro que es el plano de mi ciudad extendida como una hamaca desde el cerro Quillahirca hasta la colina donde se alza el cementerio de mi pueblo.
Acequias por donde corre el agua clara, helada y borboteante que viene desde las alturas, desde las jalcas donde crece el ichu, la flor de escarcha, la verbena y el liquen sobre la tierra negra pero abrillantada por el agua que espejea por uno y otro montículo. Viene esta agua desde el perfil inhallable de los cerros más altos que se unen con el infinito del cielo.
 
2.
Viene esta agua de ese horizonte de neblinas por donde se pierde nuestra imaginación cuando miramos hacia lo lejos, preguntándonos por quienes se han ido y por nosotros mismos que de aquí nos iremos algún día. Viene desde la escarcha de los pajonales. Desde las nieves eternas donde moran picaflores encantados, y la flor de escarcha y las niñas de los cuentos.
Viene esta agua que ahora dejo correr empapando mis manos desde mi honda identidad que se pierde en la lejanía de lo creado y de lo que aún está por crear. Y entrelaza su malla desplazándose subterránea por aceras, calles y veredas. El gesto es agacharnos y en el vaso de nuestras propias manos ahuecadas y anhelantes, sorber el agua sonora y caritativa, paladeando su néctar y ambrosía.
Hecho ritual en donde se juntan lo hondo de la vida, el cielo que hacia nuestra espalda es otro pozo sagrado, y la tierra de la superficie en donde estamos nosotros. Es el agua recién nacida, flamante y primigenia, incluso en la luz que forma parte de su esencia y de su entraña.
 
3.
Es el agua virginal en todo para cada una de nuestras bocas. Secreta y confidente en su ofrecerse y brindarse. Única e intransferible para cada garganta sedienta. De cada hoyo ya conocemos cada una de sus piedras y lajas del borde y de su fondo alucinado con sus partes planas y hendiduras. Conocemos sus grietas, y qué musgo y qué hojas breves brotan diminutas en el fondo de ellas.
Conocemos, cogiendo un puñado de ellas, qué piedrecillas la conforman. Y las luces y las sombras de los techos de las casas que se reflejan. ¡Porque a eso jugamos! A dejar que las aguas se aquieten para reflejar la vida cotidiana, y a deshacerlo todo con un movimiento de nuestras manos para que todo se borre y rehaga. Como jugamos a descubrir la vida siempre azorada que hay en ella. De alguna hormiga marina que corre asustadiza, temerosa de perder el sendero al hogar o a su casa.
Para beber, tenemos que arrodillarnos. Y en el fondo del agujero ver las piedras y la arenisca. Y al levantar la mirada cegarnos otra vez con el reverberar del sol en las paredes blancas de las casas. Que es el mismo gesto que hacemos en la iglesia para adorar todo lo que hay de sagrado.
DANILO SÁNCHEZ LIHÓN



FELIZ CUMPLEAÑOS DOÑA EMY GAMBOA GARCÍA DE CRUZADO


SANGRE AMADA DE CÉSAR VALLEJO

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7 DE OCTUBRE
 
DÍA
DE LA
MARINERA

 
FOLIOS
DE LA
UTOPÍA


EL FUNDADOR
DON ABELARDO
GAMARRA
 
 
Danilo Sánchez Lihón
 
 

1. Es el baile
nacional
 
Esta vez hemos decidido entrevistar a don Abelardo Gamarra, conocido también por su seudónimo de El Tunante. Y para eso lo visitamos en su casa de la calle Mapiri, en el centro de Lima, a fin de saber cómo es que La Marinera surge, existe y sobresale. ¡En dónde nació y a qué se debe! Y que él, como ningún otro, debe saber, porque todos coinciden en atribuir a él haberla puesto nombre y presentado.
Pero, a su vez, queremos indagarle qué hay dentro de esta hoguera, llamarada y estallido de música y danza. ¡Qué en ella hay de trascendente! ¿Y quizás, infinito?
Nos recibe cordial y no arisco ni temible como es la imagen que de él más se destaca, se comenta y difunde. El Tunante es un señor por quien pareciera que han pasado no años sino siglos, por lo rijoso y hondo de su semblante. Y, sin embargo, aparte que se lo siente recio, fuerte, y trejo, se lo percibe tierno y comprensivo. Lo primero que le preguntamos es.
– Don Abelardo: No hay nadie que no reconozca que usted es el iniciador de la Marinera en nuestro país, a quien corresponde la paternidad de esta danza. Hay unanimidad total en reconocer a usted como el iniciador de este baile en nuestro país y en el mundo, siendo considerada ahora como nuestra danza y baile nacional.
 
2. En honor
al Huáscar
 
– Voy a explicarle para que todo quede claro y en sus justos términos porque este tema es de interés nacional. Y la historia legítima que no hay motivos ni razones en este punto para engañar a nadie, es así: Yo no la inventé. Mi labor ha sido sencilla, apenas la de recuperarla y ponerle nombre, porque nuestra zamacueca, que es baile de la gente morena de nuestro país –y en esto no hay nadie quien niegue ni rebata este aserto, ni dentro ni fuera de nuestras fronteras– lo llevaron nuestros vecinos del sur y le pusieron allí un nombre que era La Chilena, y con esa denominación regresó a nuestro país. Y nuestro pueblo, ingenuo como es, empezó a llamarla de esa manera, como a muchas expresiones culturales, productos y bienes de nuestra naturaleza que nosotros mismos les ponemos nombres extranjeros porque siempre hemos sido en todo dadores y generosos. En Chile se quedó con el nombre de Cueca, proveniente de nuestra zamacueca. Denominarlo La Chilena significaba que ya no era nuestra. Declarada la guerra entre Perú y Chile, en 1879, consideré imperativo corregir esta situación para que no figurase con el nombre que se le venía dando, sino que como homenaje a nuestra Marina de Guerra que durante seis meses mantuvo en zozobra a la escuadra enemiga, consideré significativo llamarla con el nombre de la Marinera, en honor al Huáscar y a Grau, porque son muy importantes los nombres, ya que en eso está nuestra identidad. Entonces cuando veamos bailar la Marinera, reconozcamos a la bandera bicolor flameando invicta erguida en ese mástil inmarcesible del Huáscar.
 
3. Construir
una esperanza
 
– ¿Entonces solo le cambió de nombre? ¿No sería también que el ritmo anterior de la zamacueca empezó a transformarse, a ser distinto y a representar otras realidades?
– Entra usted a un punto clave. Con la guerra el paso corto, sensual, quimboso de la zamacueca, pasó a hacerse grave, y a tener evoluciones casi aéreas de las parejas. Y en esto se exorcizaba el conflicto. ¡Pueblo hondo y tremendo el nuestro! Porque del estilo jaranero, desaliñado y de escape, se pasó al garbo, al orgullo y a la ufanía que tiene la Marinera actual, ¡y así se reivindicaba asimismo el pueblo sabio y guerrero! Del pasito ajustado, escondido y muy breve de la habitación estrecha y oscura de los callejones en que había nacido el baile primigenio se pasó a la amplitud de los campos de batalla y a los espacios abiertos del mar y las olas que una nave como El Huáscar hiende, y del desierto con victorias como la de Tarapacá. ¡Y así se reivindicaba la guerra desigual que tuvimos que sostener! ¡Pueblo insigne y valiente el nuestro! De la tierra dura, opaca e indolente, se pasaba al agua agitada, al desvelo constante de la nave legendaria capitaneada por Grau y sus hombres de fábula. ¡Así se reivindicaba las batallas desventuradas y exhaustas! Así con la Marinera fundábamos otra vez imperios sobre los precipicios y construimos los andenes nuevos de nuestra identidad pertinaz y sobreviviente. Y es con ella hacemos ahora escuelas, represas, acueductos y caminos construyendo una esperanza nueva entre los zarzales intrincados.
 
7. Me
adhiero
 
– Don Abelardo: ¿Cuál de los aportes es dominante en la marinera? ¿Lo hispano, lo indígena, o lo africano?
– Es la conjunción de todos estos aires, es el mestizaje por excelencia y antonomasia. En ella está la danza incaica estremecida con sus nieves eternas, con los capullos que brotan en los abrojos, entre las peñas y las piedras, y que es lo que a mí más me hechiza, conmueve y emociona, porque yo nací en Huamachuco, pueblo serrano, y más precisamente en Sarín que es una encrucijada de caminos. Y yo creo que lo básico de la marinera es lo andino, que está en el pie descalzo, en las pantorrillas diáfanas de las mujeres que bailan y en las polleras que se agitan; como en ella está también la desolación, el desgarro y el dolor de una raza oprimida y ofendida en su propio suelo, porque en el fondo de la afirmación contumaz de la vida que se impone fervorosamente en la Marinera, está el recuerdo imperecedero de tanta muerte; están los hondos precipicios con que está desgarrada nuestra geografía, las caderas de nuestras mujeres que al final nos sostienen la vida sobre los abismos; está nuestro destino poderoso, imbatible porque al final nos levantamos; devenir imperecedero y absoluto de pueblo eterno. Está la gracia, el donaire, el vuelo incaico de nuestro pueblo hacia regiones siderales; está la pava, la gallina o la paloma que se contornea, como es la parte andina, que es aquella que corresponde a la mujer a la cual me adhiero.
 
5. ¡Oh
extravío!
 
– Don Abelardo, díganos en una síntesis apretada: ¿qué es para usted la Marinera? ¿Y qué significado tiene para el Perú de todos los tiempos?
– Es fuego en el alma, es viento que sopla, es agua que inunda y se desboca. Es tierra que se holla para poner la semilla; ¡es fiesta del alma! Es un baile que extrajo de la guerra lo único que se puede obtener: no victorias sino sabiduría, gracia de vivir, y temple de luchar a muerte, que es de lo que hicimos y que la Marinera representa y de lo que está imbuida. Pero mire usted, dónde la guerra se hizo gracia, encanto y finalmente fiesta. ¿No es supremo? Solo un pueblo como el nuestro puede transformar así las cosas. Donde están los cuatro elementos juntos. Aunque yo vea más en ella el mar, en el cimbreo del baile que hace el bamboleo de las naves en el oleaje, en la cual quedará para siempre lo generosos que fuimos, y cómo nos enaltecimos rescatando heridos enemigos pero que acogíamos como hermanos. Donde veo fuerza y poderío, vibrante en todo, las trompetas, los clarines, las pasiones que se envuelven, se juntan y desatan. Los requiebros, los esguinces, los esquives. ¡Son campos de batallas! ¡Qué bárbaro! ¡Qué increíble! ¡Imposible de vivirse, concebirse y de bailar, pero que se baila! De allí que la pareja no puede dejar de mirarse ni quitarse los ojos de encima porque es conflicto. O son amantes o son enemigos que se devoran y confunden en un solo cuerpo, es fusión y es contrapunto. Y de la zamacueca que era trivial se accedió a este himno de victoria, a esta victoria verdadera. Porque nosotros con la Marinera hemos ganado la guerra. ¡Oh prodigio! ¡Oh extravío! ¡Oh pueblo bendito! Con la única calamidad ahora que son sus autoridades, congresistas y políticos.
 
6. El nombre
mismo
 
– Don Abelardo: Nos sorprende esta visión suya de la Marinera tan ligada a la guerra, porque cuando la vemos es un baile tan jubiloso, lozano y feliz.
– No le sorprenda amigo mío, porque es ¡eso que usted dice! Pero es también arrebato, cólera y pugna encabritada, escabrosa y finalmente himno de amor. ¡Y es triunfo, que es lo que quiero defender! Porque al final yo creo que triunfamos, porque vence el que extrae lo mejor. Y no hay baile en el mundo más hermoso ni completo. Solemne en Puno, en donde se masacraron a poblaciones civiles enteras; señorial en Lima y en el centro, en donde fuimos egregios; de afirmación en el norte donde se libraron grandes batallas, algunas de las cuales se ganaron como la de San Pablo. De tonos vibrantes, de clarines que estallan, de platillos que atruenan, de tambores que arremeten, de bombos que estremecen en el centro del Perú donde se dieron gestas como Concepción, Marcavalle y Pucará. ¡Claro que en ella está el vaivén de las naves que navegan vigilantes, y después cuando se enfrentan. Y la bandera flameando en lo alto, que es el pañuelo cuando se erige, la bandera legendaria, la rojiblanca con el telón de fondo del infinito anubarrado y hecho jirones! ¡Claro que están las montoneras que se lanzan al ataque desprendiéndose de los cerros! ¡Claro que están los peñascos por donde se precipitan las galgas que rebotan en el cascajo! ¡Claro que está el refugio, el pie descalzo que huye! El nombre mismo de la Marinera se inspira en las heroicidades del Huáscar. ¿A qué ocultarlo? Dejemos de sentir vergüenza de lo grandes que fuimos, tanto que ellos no saben cómo negarlo.
 
7. Sangre
inhiesta
 
– Sabemos, don Abelardo, que usted peleó con el grado de Teniente del Ejército del Perú en las batallas de San Juan y Miraflores. Y en Huamachuco que es su tierra.
– Fui teniente en los campos de batalla y empuñé las armas. ¡Imagínese, quiénes éramos y quienes quedábamos! ¡Yo, que no maté jamás ni una mosca y le tengo respeto hasta a una oruga! En mis ojos están las escenas de los asesinatos, de los crímenes, del repaso a los heridos, de lo bestias humanas que fueron, que hasta las hordas tendrían escrúpulos de ser de esa calaña. Yo estuve ahí, y de ahí también han surgido esos sones, esas cadencias de afirmar la vida, estos aires de un pueblo increíble que convierte lo vil en canto de esperanza. El Perú es un país que se inmoló en la defensa de Lima. 30 mil muertos en el campo de batalla, y la mayoría eran civiles como yo. ¿Hay algún pueblo que pueda ostentar lo mismo? No había ya Marina de Guerra, ni Ejército. ¡Ni nada! ¡Y seguimos luchando! La milicia éramos nosotros que toda nuestra vida fue nuestro oficio el correr la pluma y el juntar las letras. Y en las batallas de Lima, San Juan y Miraflores salimos a pelear ciudadanos comunes y corrientes. ¿Qué pueblo es capaz de una muestra semejante? Pero si ha habido heroísmo a chorros y a manos llenas, ¿por qué no creer en nosotros mismos? ¿Por qué a partir de entonces tanto ostracismo? Por eso, ahí está la Marinera, una danza de triunfo y victoria, surgida en la guerra misma. ¡Yo vi el arcano! ¡A mí se me reveló la verdad de la vida en ese trance! Y mi verdad está en la Marinera. Allí encuentro mis raíces, los ríos como las montañas. Y en el pañuelo que se eleva y bate en lo más alto y que es la bandera nuestra nunca arriada, como sangre inhiesta, como pulso y latido en el infinito.
 
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PRÓXIMAS ACTIVIDADES
DE CAPULÍ, VALLEJO Y SU TIERRA
 
PARTICIPACIÓN
FERIA INTERNACIONAL DEL LIBRO
DE COCHABAMBA, EN BOLIVIA
CONFERENCIA MAGISTRAL:
“ANDENES DE LECTURA.
PRODUCCIÓN DE TEXTOS
EN EL AULA DE CLASES”
DANILO SÁNCHEZ LIHÓN
PRESENTACIÓN DEL LIBRO
“EL NIÑO Y SUS DERECHOS”
DANILO SÁNCHEZ LIHÓN
VIERNES 13 Y 14 DE OCTUBRE
FERIA INTERNACIONAL DEL LIBRO
DE COCHABAMBA, EN BOLIVIA
RECINTO FERIAL LAGUNA DE ALALAY
 
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PRESENTACIÓN DEL LIBRO
“EL NIÑO Y SUS DERECHOS”
DE DANILO SÁNCHEZ LIHÓN
PANEL DE PRESENTADORES
PROFESORES:
MIGUEL INGA
ANA MARÍA VILCHEZ
ESTHER VELARDE
 
MARTES 24 DE OCTUBRE
6:30 PM.
AUDITORIO
FACULTAD DE EDUCACIÓN
UNIVERSIDAD NACIONAL
MAYOR DE SAN MARCOS
CIUDAD UNIVERSITARIA
 
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X ENCUENTRO POR EL COMPROMISO
Y LA CONCIENCIA SOCIAL
EN EL DÍA DE LA FUNDACIÓN
POLÍTICA DE LA PROVINCIA
DE SANTIAGO DE CHUCO
PRESENTACIÓN
DEL LIBRO:
“LUCERO DEL ALBA,
MEMORIA Y ESPERANZA
DE SANTIAGO DE CHUCO
DE
DANILO SÁNCHEZ LIHÓN
PANEL
DE PRESENTACIÓN:
CARLOS CABALLERO *
JAVIER DELGADO BENITES *
DANILO SÁNCHEZ LIHÓN
VIERNES 3 DE NOVIEMBRE,
5 PM. EN SANTIAGO DE CHUCO,
TIERRA DE CÉSAR VALLEJO
SEDE DE CAPULÍ,
VALLEJO Y SU TIERRA
EN SANTIAGO DE CHUCO
(* Por confirmar)
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Los textos anteriores pueden ser
reproducidos, publicados y difundidos
citando autor y fuente
 
dsanchezlihon@aol.com
danilosanchezlihon@gmail.com
 
Obras de Danilo Sánchez Lihón las puede solicitar a:
Editorial San Marcos: ventas@editorialsanmarcos.com
Editorial Papel de Viento: papeldevientoeditores@hotmail.com
Editorial Bruño, Perú: ventas@brunoeditorial.com.pe
Ediciones Capulí: capulivallejoysutierra@gmail.com
Ediciones Altazor: edicionesaltazo@yahoo.es
 
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CONVOCATORIA
XIX ENCUENTRO INTERNACIONAL ITINERANTE
CAPULÍ, VALLEJO Y SU TIERRA
TELÚRICA DE MAYO, 2018
LIMA:
VIERNES 25
TRUJILLO:
SÁBADO 26
GUADALUPE
DOMINGO 27
CHEPÉN
DOMINGO 27
CAJAMARCA
LUNES 28
CAJABAMBA
MARTES 29
HUAMACHUCO
MIÉRCOLES 30
QUIRUVILCA
JUEVES 31
SANTIAGO DE CHUCO
JUEVES 31
VIERNES 1 (JUNIO)
CALIPUY
SÁBADO 2
SANTIAGO DE CHUCO
SÁBADO 2 (JUNIO)
DOMINGO 3 (JUNIO)
EL XIX CAPULÍ, VALLEJO Y SU TIERRA
ABARCA DEL 26 DE MAYO AL 3 DE JUNIO
DEL AÑO 2018
 
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