ARMANDO EL CANDOR
Autor: El Dramaturgo Peruano Juan Rivera Saavedra
Autor: El Dramaturgo Peruano Juan Rivera Saavedra
En homenaje al Poemario RUNA SIMI HARAWI, presentado en el auditorio de la Asociación Cultural Brisas del Titicaca.
Acabo de leer el libro RUNA SIMI HARAWI, del autor, amigo y hermano Armando Azcuña Niño de Guzmán, y he quedado sorprendido, maravillado por su capacidad de exteriorizar- a través de la palabra y poesía-, su mundo. El que a él, rodea.
Y digo “su mundo”, porque no todos lo hacen. La mayoría vive en el impuesto por los políticos o medios de comunicación. Yo- ejemplo-, vivo en mi mundo.
Rodeado de grandes escritores, pintores, músicos y … un par de filósofos, ayer- sin ir lejos-tuve una conversando con Oscar Wilde y Jiddu Khrishnamurti, sobre el humor y, libertad total.
Acabo de leer el libro RUNA SIMI HARAWI, del autor, amigo y hermano Armando Azcuña Niño de Guzmán, y he quedado sorprendido, maravillado por su capacidad de exteriorizar- a través de la palabra y poesía-, su mundo. El que a él, rodea.
Y digo “su mundo”, porque no todos lo hacen. La mayoría vive en el impuesto por los políticos o medios de comunicación. Yo- ejemplo-, vivo en mi mundo.
Rodeado de grandes escritores, pintores, músicos y … un par de filósofos, ayer- sin ir lejos-tuve una conversando con Oscar Wilde y Jiddu Khrishnamurti, sobre el humor y, libertad total.
Admiro a Armando porque nació-diferente a mí-, amando a su patria. Yo… la aventura.
¿Por qué? porque Armando conoce muchas lenguas de su patria: el quechua o runa simi, idioma de los incas, el aimara, el inglés y, el español. Yo, la aventura. Como recorrer la América Latina con un solo dólar año 50. ¿Cómo así? Contando cuentos o historias, por un plato de comida.
Empecé a amar a mi Perú-¡increíble¡-,después de tres incidentes que tuve en el extranjero.
En Buenos Aires, al enterarse mi compañero de pensión que era escritor y devorador de libros me preguntó ¿sabes el himno completo de tu patria, de memoria…? Seré sincero… del coro y una estrofa nunca pasé.
Estando en México, un periodista al enterarse que amaba el canto, había grabado dos discos, y sabía la letra de más de cien canciones de diversos países, me preguntó: ¿Conoce algún huayno o vals, y…?”. Confieso que no pude encontrar un hueco en el planeta, donde esconder.
Y en Chile- de recordar, se me encienden los colores de la cara-, me fue lanzado el siguiente dardo:
-Sabemos que ha viajado mucho, conoce América, parte de Europa y Asia, ¿verdad?
-Así es.
-¿Y Cusco, Machu Picchu, la selva peruana…?
Gracias a ellos…Hoy sí.
Si algo tengo que envidiar a Armando-mi amigo-, es su candor, sencillez y pureza. Un niño grande de corazón…diría.
Topar con él, recuerda mi época de boy scout. Cargando siempre una mochila con lo indispensable para acampar en cualquier punto de la tierra.
En el caso de Armando: vestimenta de las regiones a usar. Sean de Cusco, Puno o pueblito perdido.
Amar al país, dedicarse al arte no es fácil, amigos…Se necesita ser fuerte y humilde, como Leonardo de Vinci.
¿Por qué? porque Armando conoce muchas lenguas de su patria: el quechua o runa simi, idioma de los incas, el aimara, el inglés y, el español. Yo, la aventura. Como recorrer la América Latina con un solo dólar año 50. ¿Cómo así? Contando cuentos o historias, por un plato de comida.
Empecé a amar a mi Perú-¡increíble¡-,después de tres incidentes que tuve en el extranjero.
En Buenos Aires, al enterarse mi compañero de pensión que era escritor y devorador de libros me preguntó ¿sabes el himno completo de tu patria, de memoria…? Seré sincero… del coro y una estrofa nunca pasé.
Estando en México, un periodista al enterarse que amaba el canto, había grabado dos discos, y sabía la letra de más de cien canciones de diversos países, me preguntó: ¿Conoce algún huayno o vals, y…?”. Confieso que no pude encontrar un hueco en el planeta, donde esconder.
Y en Chile- de recordar, se me encienden los colores de la cara-, me fue lanzado el siguiente dardo:
-Sabemos que ha viajado mucho, conoce América, parte de Europa y Asia, ¿verdad?
-Así es.
-¿Y Cusco, Machu Picchu, la selva peruana…?
Gracias a ellos…Hoy sí.
Si algo tengo que envidiar a Armando-mi amigo-, es su candor, sencillez y pureza. Un niño grande de corazón…diría.
Topar con él, recuerda mi época de boy scout. Cargando siempre una mochila con lo indispensable para acampar en cualquier punto de la tierra.
En el caso de Armando: vestimenta de las regiones a usar. Sean de Cusco, Puno o pueblito perdido.
Amar al país, dedicarse al arte no es fácil, amigos…Se necesita ser fuerte y humilde, como Leonardo de Vinci.
He aquí un ejemplo.
Cayó por casualidad en mis manos (pese a que no creo en la casualidad), una carta de don Leonardo solicitando empleo en forma peculiar. Dirigida a Ludovico de Sforza, Regente del palacio de Milán:
“Mi ilustrísimo señor, habiendo visto las pruebas de sus maestros e inventores en instrumentos de guerra, me siento animado- sin intención de perjudicar a nadie-informar asuntos que registro a continuación:
1.- Tengo planos de puentes ligeros y fuertes, en caso de una invasión.
2.- Fórmula de cortar el agua desde una trinchera, y construir una cantidad infinita de escaleras inventadas por su servidor.
3.- El método para destruir cualquier ciudadela o fortaleza. Aún construida sobre una roca.
4.-Planos para hacer cañones.
5.- Y si tuvieran un encuentro en el mar, construir máquinas capaces de resistir el fuego de cualquier cañón.
6.- También formas de llegar a cualquier punto, a través de cavernas y pasajes secretos… debajo de un río.
7.- Construir carros cubiertos que pueden romper apretadas filas del enemigo. (Tanques).
8.- Fabricar cañones, morteros y artillería ligera…con formas muy hermosas.
9.- Suministrar catapultas y trampas diversas de uso general.
10.-Y en tiempos de paz: construcción de edificios públicos o privados.
11.- De no interesarle nada de esto: ejecutar esculturas en mármol, bronce, arcilla y pintura.
Cualquiera de las cosas mencionadas no fuesen de su interés, me ofrezco para su demostración de una de ellas que, a su excelencia plazca”.
Leonardo consiguió al final ser contratado por su encanto cortesano, talento como músico y… organizador de fiestas.
Como observarán, la estupidez no nació este siglo, sino más atrás.
Quizás a alguno de Uds. Le parezca una exageración lo dicho, esta noche.
Por ello quiero concluir con un pensamiento del gran Julio Cortázar:
“Es mentira que nosotros estamos en la historia, estamos en la prehistoria, viviendo una especie de edad de las cavernas, a pesar de la gran tecnología y los cohetes a la luna”.
Por el corto tiempo que dispongo al nacer de esta noche: ¡vaya desde esta tribuna, el abrazo fraterno al primer niño que nació declamando, y amando a su patria!
Dramaturgo mundial Juan Rivera Saavedra
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