jueves, 21 de abril de 2016

REALZANDO LO REALZABLE - ESCRIBE EL DOCTOR ÁNGEL EDGARDO CHIRINOS LAVANDER

 
REALZANDO LO REALZABLE 
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Por: Dr. Ángel Edgardo Chirinos Lavander

Inicialmente, no pensé escribir sobre este acontecimiento literario, porque en parte yo me convertí en uno de los protagonistas del mismo; pero pensándolo bien y con más calma, además de meditarlo otro tanto, llegué a animarme en hacerlo. Y es así, que ahora haciendo memoria, empiezo ésta especie de crónica,  a relatar sobre un suceso acontecido el día jueves 14 de este mes de nuestro idioma castellano, mes en que nuestra lengua se encumbra con actos y manifestaciones literarias que la hacen incomparable. 

Pues ese día, yo había sido invitado a la Presentación del Primer Poemario que el poeta y preservador de la lengua autóctona del Perú -el Runa Simi- el Profesor-amigo Pedro Armando Azcuña Niño de Guzmán, haría en el Centro Cultural “Brisas del Titicaca”, entidad asociativa que él fuera  uno de sus fundadores, así como el único viviente de esa pléyade de soñadores que no podían abandonar sus orígenes telúricos y lacustres, menos los recuerdos de sus ancestros de la bella ciudad de Puno.

Un día antes, recibí una llamada telefónica que él me hizo, la misma que contenía una petición cual era, que oficiara de Maestro de Ceremonia de aquel acto trascendental para su vida artística y poética; algo que no podía negarme hacerlo tratándose del amigo y del compañero de tantas jornadas literarias que habíamos compartido, no sólo acá en el país sino también, en el extranjero.

Es así, que el día 14 me encontré frente a un público ávido de conocer el contenido de dicho poemario que lleva un sugestivo título: “Runa Simi Harawi” y dirigiendo un programa que lo consideré bastante ampuloso, ya que había en él, cuatro intervenciones de personajes que se referirían a lo mismo, como era exaltar las virtudes y cualidades del autor del poemario indicado, además de los números artísticos-musicales, que el tiempo que apremia la vida de muchos, se iba a alargar demasiado; pero había que cumplir y ceñirse al programa.
Bueno, dejando de lado éstas mis apreciaciones personales, pasaré a reseñar aquel acto que por su significación fue prácticamente, un homenaje que el autor daba al idioma que todos los peruanos deberíamos conocer -me refiero al idioma de los Incas- mal llamado ‘Quechua’; resumiendo diré, que el programa empezó con las palabras de Saludo y Bienvenida que la Vocal de Actividades Culturas e Investigación antropóloga, Dra. Zelideth Chávez Cuentas dio a nombre de la Directiva de la Asociación Cultural Brisas del Titicaca, haciendo una breve semblanza del autor del poemario. Al terminar de hacerlo, las palmas de los asistentes se hicieron presentes, premiando así tales palabras.  

Seguidamente también, el Arquitecto Ronald Espezúa La Torre, amigo desde muchos años atrás del poeta, hizo una sentida semblanza refiriéndose a la trayectoria social y artística del autor del poemario “Runa Simi Harawi”, como distinguido fundador y honorario asociado de la emblemática institución cultural ‘Brisas del Titicaca’, recordando muchos pasajes de su vida y la labor que éste cumplió en bien de los puneños radicados aquí en Lima. Estas palabras dichas con la emotividad vivida en el instante, fueron bastante ovacionadas.

Acto seguido, como Maestro de Ceremonia -inserto en el programa entregado al ingreso al auditorio- anuncié la intervención del Magister Rolando Santa Cruz, quien prácticamente dio una clase magistral sobre el idioma de los Incas y la importancia que el autor realzaba su uso como una lengua dulce y muy expresiva, la misma que como especialista en Educación y Ciencias de la Comunicación le obsesionaba de tal manera, más aún como cusqueño, que imploró a los oyentes, que jamás la olviden y si pudieran practicarla y difundirla sería maravilloso, porque  demostrarían así, su identificación con sus ancestros y su amor a la patria. Palabras que fueron bien recibidas y premiadas con aplausos.

En el auditorio se encontraba entre el público oyente, uno de los más grandes dramaturgos del mundo y que por fortuna, es nuestro compatriota; se trata del extraordinario y sagaz escritor, dibujante, novelista y muchos más…, don Juan Rivera Saavedra junto a su esposa Mary, para quien tuve el alto honor de presentarle y pedir un voto de aplausos por su presencia tan significativa en esta velada artística-poética y musical. Aplausos que fueron con gran sonoridad.

Las palabras del autor del poemario “Runa Simi Harawi”, poesía en la lengua de los Incas y que eran esperadas escucharlas por la concurrencia, tuvieron su momento cumbre con la presencia en el podio, del Prof. Armando Azcuña, quien con palabras conceptuales así como emocionadas, se dirigió al público agradeciendo su presencia y el calor que le brindaban con su apoyo moral de encontrarse presente en la noche en que daba nacimiento a un hijo, el  mismo que para nacer, tuvo que tener una gestación prudencial; ya que escribir un libro en una lengua que tratan de abolirla por ciertos prejuicios, la que debemos lograr que jamás se pierda; y, el traducirla al español, es un tanto tediosa y agotadora.
 
Armando hizo una reseña de cómo le nació la idea de escribir sus poemas, en una lengua -que como repito- muchos no la conocen o se avergüenzan de ella por ignorar sus alcances y peor aún, la dulzura con que expresa y nombra lo que existe; allí aprovechó para declamar tres de esos sus poemas con la traducción correspondiente de cada uno de ellos; para aquellos que desconocemos lo que deberíamos conocer y así realzar lo realzable con dignidad. Al término de su intervención, se escuchó una plena ovación, que era la respuesta que el público presente le brindaba, por su brillante exposición y declamación.

Luego de esta secuencia, me fue muy grato presentar al concertista internacional del charango, Jhonnathan Simón, que con el nombre artístico de “Puka”, ha recorrido diversos países del mundo llevando su arte y su música vernácula, haciéndola conocer y ganando muchas preseas como recompensa a sus brillantes actuaciones. Él nos brindó tres de sus composiciones, las mismas que fueron de completo agrado y complacencia de los presentes, que con mucho fervor, le aplaudieron esa muestra artística con la que deleitó a la concurrencia.

Según el programa, se habían comprometido a intervenir dos artistas de gran renombre, quienes no se sabe por qué motivos no concurrieron; por lo que, el Maestro de Ceremonia se vio obligado a cubrir esas dos ausencias; de allí que anticipó que todo vacío debe llenarse y que él, haría el esfuerzo de cumplir esa tarea para lo cual, primero saludaría y pediría al sobrino-nieto del gran vate universal César Vallejo, se pusiera de pie para que represente en ese acto, al más grande de los literatos que nuestro país ha dado al mundo, para que reciba en su nombre, las palmas que todos le brindaban. Dado el caso, el sobrino-nieto lleva el mismo nombre y apellido de su tío-abuelo; por consiguiente homónimo completo. 

Después de este bello gesto de gratitud a Vallejo, que al día siguiente se recordaba los 78 años de su muerte física, el Maestro de Ceremonia declamó a su estilo y agregados, el poema que quizás con el que más se le identifica al ‘chuco universal’, esto es: “Los Heraldos Negros”; el mismo que parece agradó al respetable, que le ovacionaron a plenitud. Por él, hubiera seguido declamando más versos, pero la responsabilidad del programa estaba siendo descargado sobre sus hombros y había que regirse a las manijas del reloj, que continuaba inexorablemente, marcando el tiempo; de allí que prosiguió con su labor de presentador.

Como la presentación de “Puka” exigía una repetición y más que ésta, una continuación; tuve la enorme satisfacción de anunciarle nuevamente, quien muy gustoso nos deleitó con su arte, las tiernas y dulces melodías del charango, interpretando en esta oportunidad, música puneña -la Capital Folclórica del Perú- de su reciente DVD, deleitándonos con el tema: “Sonidos del Lago Sagrado”, como también el tradicional “La Serenata”, con la que suelen abrirse las ventanas y puertas sin resistencia alguna, tal como los corazones se desbordan. El público también se desbordó en aplausos.

La repetición se hace a veces perentoria y hasta imperiosa, por lo que anuncié la nueva como esperada segunda fase de la intervención poética que con previa caracterización, hizo el poeta y Prof. Pedro Armando Azcuña Niño de Guzman que con el pseudónimo de “Rumi Maki” nos presentó su libro de poemas, el mismo que está aparejado con un CD, que facilita la fonética del Runa Simi. A la vez, nos siguió deleitando con la lectura de dos poemas más de su creatividad excepcional; siendo muy ovacionado por ello.

Pero no podía faltar en un acto como éste, las palabras del señor Presidente de la A.C.BdT, el señor don Delbert Terán Dianderas, a quien cedí el uso de la palabra, que realzó la personalidad del profesor-poeta Pedro Armando y a la vez con fonemas cargados de emoción como agradecimiento por la concurrencia habida, hizo el tradicional brindis de honor, que todos celebraron con algarabía.

Pero hubo una nota muy simpática y emotiva, el señor José Niño de Guzmán en representación de la “Asociación Familiar Niño de Guzmán”, hizo entrega de un bello presente al profesor y poeta Pedro Armando, que con la emoción desbordante, se sensibilizó tanto, que los ojos se le llenaron de lágrimas que las supo contener.

Cerrando con broche de oro y como fin de fiesta de esta actividad cultural, me fue muy grato anunciar la linda participación del aplaudido Conjunto de Instrumentos Nativos “Sikuri”, que representa el quehacer de esta institución anfitriona; en la que pasamos una noche inolvidable y como también, que el Sol brillante de Lago Sagrado, se hizo tangible en la presentación del primer poemario -porque sé que seguirán muchos más- de Armando Azcuña “Rumi Maki”; a quien particularmente, le felicito deseándole muchos augurios dentro del arte de la creatividad poética en que se desenvuelve; así mismo, agradecerle el alto honor que me confirió de conducir la Presentación de su primer hijo literario: “Runa Simi Harawi”.

¡Vale! 
 
 

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RECUERDOS
 
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ARMANDO AZCUÑA NIÑO DE GUZMÁN

"RUMI MAKI"


Por Armando Alvarado Balarezo (Nalo)
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“Libre es el cóndor que planea en las alturas, 
 como libre es el Hombre que vuela con las alas de los sueños”.
                                                                               Aralba 
 
El dramaturgo y aeda Bertolt Brecht (Augsburgo, 10 de febrero de 1898 – Berlín, 14 de agosto de 1956), nos dice: «Hay hombres que luchan un día y son buenos, otros luchan un año y son mejores, hay quienes luchan muchos años y son muy buenos, pero están los que luchan toda la vida, y esos son los imprescindibles». Armando Azcuña Niño de Guzmán “Rumi Maki”, encarna a estos últimos, como poeta, declamador, danzante, educador, gestor de instituciones culturales y deportivas, compositor, virtuoso del charango, maestro de ceremonias y promotor cultural.


Ciudad de Puno - Foto: ANI
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Armando Azcuña nació en la ciudad de Puno el sábado 27 de abril de 1940. Allí, una cuna de fibras de totora meció su infancia a orillas del Titicaca, Lago Sagrado de los Incas; como un cesto de fibras de mimbre cobijó a Moisés, libertador del  pueblo hebreo de la esclavitud en Egipto. 

Lago Titicaca - Foto: ANI
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La meseta andina, el cielo azul y el lago profundo, son los elementos vitales que nutren su alma telúrica. La pampa dotándole de un carácter sereno; el cielo, alas poderosas; y el lago, crisol de clara transparencia, forja en su corazón el signo vindicador que lo acompaña desde niño, igual que a Moisés de los pasajes bíblicos. 
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Macusani - Foto: ANI
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Pasó su infancia y parte de la adolescencia en Macusani (Capital Alpaquera Mundial), distrito y Capital de la provincia puneña de Carabaya, en cuyo territorio está el más grande bosque de rocas volcánicas del Perú, con petroglifos y manifestaciones de arte rupestre por doquier, santuario milenario de la comunidades campesinas de Pakaje, Thantamaco e Isivilla, donde los golpes de puño son truenos que retumban y se multiplican con el viento sobre las cumbres nevadas de los apus: Allin Qhapaq, Chíchi Qhapaq y  Qelqaya.

Alpacas y  bosque de piedras de Macusani - Foto: ANI

La singular topografía del suelo macusaneño, encima de los 4200 m.s.n.m., fragua la rebeldía y la ternura del morador; y su firmamento, es el dominio del relámpago, heraldo de fuego cósmico que a diferencia del rayo se ramifica sin tocarnos, anunciando la llegada del aguacerito, que calma la sed de la planicie yerma, lugar donde se rinde culto a la Pachamama, al son de los tambores, pinquillos, tarqas y zampoñas. Tierra de coloridas diabladas y pandillas, de morenadas y kullawadas, de sikuris y wífalas, de  novenantes y puli-pulis, que se esparcen a raudales por las pampas de Qalayu, Patapampa y las quebradas de T’oqa y Qaqeni, como vierte sus aguas diáfanas la laguna de Taype, dando vida al río Ayapata, en cuyas orillas dejó más de una vez  sus huellas fraternas.

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Armando Azcuña Niño de Guzmán

Concluyó sus estudios primarios en la Escuela 821 de Macusani. La Secundaria y Superior en el Instituto Salesiano de Puno. Trabajó como  profesor de lengua española e inglesa en los colegios de San Juan de Miraflores y Villa Poeta José Gálvez de la UGEL 1. Hijo amado de doña Benicia Niño de Guzmán Gutiérrez, dulce heredera de migrantes de las regiones Qosqo y Apu Rimaq, y de don Serapio Azcuña Talavera, hijo de migrante de la región Areqhepay, de la Punta de Bombón.

Conjunto Musical Brisas del Titikaka y amigos puneños fundadores. (1962).
Sentado, con charango, está Armando Azcuña Niño de Guzmán 

En 1961 ve la luz primera bajo cielo limeño, en el mismo coraz
ón de La Victoria, el Conjunto Musical Brisas del Titikaka, a iniciativa de los músicos puneños Armando Azcuña Niño de Guzmán de Carabaya, Policarpo Miranda Mestas de Vilquechico, Jorge Rojas Gironda de Juliaca, Tommy Sardón Bacarreza de Moho y Manuel Calderón de Yunguyo, gracias al solidario apoyo logístico de Antonio Ontiveros Luna de Huancané. El 4 de noviembre de 1962, con un número mayor de integrantes, fundan oficialmente el Conjunto Musical. El nombre poético de “Brisas del Titikaka” (con k), es sello indeleble de Armando Azcuña Niño de Guzmán, en homenaje al RUNASIMI.
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Asociación Cultural Brisas del Titicaca, gran promotora de la cultura peruana

Con el paso del tiempo se suman músicos y danzantes puneños, y en 1965 se convierte en el Centro Musical Brisas del Titicaca, para continuar refrescando el rostro de la calurosa Lima con los vientos musicales y los bailes originarios del Altiplano. Sobre la base del grupo precursor, se edifica en los albores de 1970 lo que hoy se conoce como la Asociación Cultural Brisas del Titicaca, que se yergue como una de las mejores de su género a nivel planetario; promoviendo la voz, la melodía y la danza andina, costeña y amazónica del Perú. Armando Azcuña integró el primer conjunto musical y el primer elenco de danzas de dicha institución cultural, hoy es Asociado Honorario desde 1996, reconocido así por  Asamblea General  de asociados.
 
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Armando Azcuña, realizando actividad institucional

Asimismo es protagonista del nacimiento de la Asociación Cultural Carabaya, Club Deportivo Cultural Allin Qhapaq, Club Distrital Olaechea, Club Social Ayapata, Asociación Cultural Macusani, Grupo Infantil de Arte Lago Azul, Taller de Danzas Rosa Gutiérrez Chávez, Asociación Cultural Olimpia Méndez, integrante del colectivo cultural Capulí, Vallejo y su Tierra, Director de Eventos Culturales de la Sociedad Universal de Poetas y Literatos (SUAL), todos con sede en la Capital de la Rep
ública.
 
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Armando Azcuña, declamando en la casa de César Vallejo

Armando no solamente tiene el corazón dulce como la caña del maíz y la generosidad del trigo, sino también es poseedor de una límpida mirada y espíritu fuerte, binomio que galvaniza los sueños y es capaz de mitigar más de cinco siglos de aflicción; rompiendo con su refinado arte ese duro cerco cultural que intentó asolar nuestra identidad y no pudo; y elevar así la autoestima del morador andino, porque Armando sabe que para brindar calor espiritual no son vitales los ponchos de colores, sino entretejer valores y actitudes que corten de raíz el  frío moral, aquel depredador de almas que carcome conciencias en todo el planeta, desde tiempos pretéritos.
 
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Armando Azcuña, declamando en la Casa de la Literatura Peruana

Armando Azcuña, es un declamador de auroras más que de lamentos de la Puna solitaria, con una ternura que estremece, sacude y conmueve el músculo cardíaco. Labor que asume con pasión, convicción y fidelidad inquebrantables, como buen pregón de las alturas, emulando a los andamios que sustentan los muros INCAS, e impregnando día a día la expresión del ORBE con la dulzura del RUNASIMI, con ese sentimiento vernáculo, capaz de soportar estoico, los fuertes vientos del segregacionismo alienante, que todavía impera en muchas latitudes.
 
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Armando Azcuña, en el Club Social Miraflores

Como ser humano de granito y roca, siempre se le ve vestido de arco iris, de ichhu y orqo waraqo, en su peregrinaje de invaluables leguas, a lo largo y ancho del Perú y el mundo, llevando  entre su garganta y el velo del paladar, el sano aliento del Ande; reafirmando verbo a verbo la esencia cultural que nos identifica,  porque en su voz pletórica de versos se funden en 1; las almas de los 3 titanes de nuestra heredad:  Vallejo, Arguedas y Mariátegui.
 
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Armando Azcuña, declamado en el munumento a César Vallejo

El carácter vindicativo de la poesía late sin cesar en sus venas, por eso en cada escenario, abierto o cerrado que pisa, brota de su espíritu sensible, el sentimiento de pertenencia del HOMBRE  ANDINO, no como flor de consuelo, sino como la expresión que tonifica y la savia que redime. Cuerda emotiva que enciende corazones, para mantener incólume la robusta constitución moral que nos legaron los INCAS.
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Armando Azcuña, recibiendo un Premio Nacional, de manos de Ramón Noriega Torero

Durante su larga y fructífera trayectoria, ha recibido muchos galardones de las organizaciones culturales, educativas y sociales con las que ha contribuido de manera gratuita, pero sobre todo, ha recibido el afecto del público que aplaude de pie sus presentaciones.
 
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Armando Acuña, en una actividad de la Sociedad Universal de Artistas y Literatos

No sé si algún día por su obra en bien de la Humanidad, Armando Azcuña Niño de Guzmán, sostenga en sus manos el Premio Nobel. No sé si algún día un gobernante lo afinca en la Cancillería, para brindar lo mejor de lo nuestro a los cinco continentes, porque la cultura peruana no se promueve a escala internacional mediante leyes, marketing y tarjetas protocolares, solamente. Se requiere en mayor medida, de pasión y entrega a toda prueba, como lo viene haciendo Armando Azcuña. Lo que sí sé, y así lo siento en el corazón, es que es Patrimonio Vivo de la Humanidad, razón de más para escribir sobre uno de los más grandes impulsores de la CULTURA INCA,  que conozco y admiro.
 
Cusco: Armando Azcuña - ASOLAPO INTERNACIONAL - NOV 2010

Armando representó a nuestro amado Perú, cuna de Mariátegui, Vallejo y Arguedas, en el Sexto Encuentro Internacional de Escritores en Tarija, BOLIVIA, del 11 al 16 de noviembre de 2013, izando en alto el Estandarte Patrio.
 
 
También estuvo presente en el XX Encuentro de AEPA "Carlos Eduardo Zavaleta" y II Encuentro de Integración Cultural Áncash, Huánuco y Ucayali "Daniel Alomía Robles", desarrollados en la bella ciudad de Caraz, del 29 de noviembre y al 01 diciembre de 2013.
 


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En ocasión de la Festividad en honor a la VIRGEN DE LA CANDELARIA, patrona de la ciudad de Puno, renuevo mi acercanía espiritual a los amigos: quechuas, aimaras y mestizos del altiplano andino, y elevo mis oraciones por muchos años más de vida para nuestro hermano ARMANDO AZCUÑA NIÑO DE GUZMÁN, semilla vigorosa del Perú eterno.
 
La Vergne, 2 de febrero de 2016



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 IMÁGENES DEL RECUERDO
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