VALLEJO
PARA EL CAMBIO
Y REDENCIÓN
DOCE RAZONES PURAS
Danilo Sánchez Lihón
1. Es futuro
y esperanza
César Vallejo nació mañana, porque es un poeta del
futuro. Celebramos a un César Vallejo del porvenir. Y en ese porvenir lleno de
promesas para nuestro pueblo, creemos. Por eso, la fecha de su nacimiento no ha
pasado, no fue ayer, sino que será mañana, siempre.
Siendo así es un poeta de la esperanza que se eleva
del sufrimiento. Por eso, descúbrete como alguien que incluso ha sufrido mucho
y está dispuesto ahora para la proeza suprema, el triunfo y el júbilo. Tus
padres han sufrido y tu pueblo está sufriendo todavía.
Y entonces ya es hora de conseguir y obtener aciertos
y victorias. Así como César Vallejo habla del dolor, el sufrimiento y las
injusticias, a lo cual este mundo está sometido, habla también de sus
potencialidades y, sobre todo, de su honda esperanza.
2. Es
compromiso
Ese porvenir es un compromiso de vida, tenaz,
laborioso y paciente; a fin de hacerlo cada vez más próximo, tangible y
evidente.
Es un compromiso de responsabilidad, consagración y
confianza. De confianza plena en la construcción de una nueva sociedad, no
sustentada ni en la usura ni en el lucro, ni en la prebenda ni en el cálculo
mezquino e inmediato. Y en ese proyecto César Vallejo es un paradigma y un
poeta inagotable.
La poesía y el mensaje de vida de César Vallejo nos
comprometen, no nos deja indiferentes. Ante él no podemos ya quedar impasibles.
Con él militamos.
Si no es así no hemos leído a Vallejo o no hemos
vivido suficiente. O hemos vivido pero no hemos asimilado. O hemos vivido y
somos desleales y hasta viles. Vallejo repercute en lealtad.
3. Está
presente
Rescatamos a un Vallejo que no ha muerto, sino que
está presente. Y en cada realidad difícil y sufriente.
Está más vivo que nunca, en toda situación límite para
fortalecerla. Está allí donde las papas queman, donde se decide algo supremo,
de vida y muerte.
Está en toda realidad actual, que él supo asumir,
defender y cotejar con los sueños y legítimas utopías. Por eso, él es un
desafío.
A Vallejo no buscarlo, porque no está nunca allí en
donde las cosas son cómodas, o fáciles, o divertidas. Él va a las realidades
convulsas, agitadas, en crisis.
No perseguía su bienestar. Las decisiones que él
adopta hacían estallar toda idea de comodidad. De allí que viajó a la Europa de
entre guerras, a Moscú cuando se forjaba el socialismo, y a España crucificada
con la guerra civil.
4. Está
vivo
Pero no solamente César Vallejo es un presente, sino
que es un presente vivo, en el sentido de vital, lo que quiere decir
apasionado.
Porque una plaza o una casa sin vida pueden ser
presente pero a la vez pueden estar abandonadas y ser inertes.
Un hombre aparentemente vivo por ser rutinario y
complaciente en realidad está muerto, en estado vegetativo. Está vegetando. Que
eso no ocurra.
Vallejo es estado vital, entusiasta, apasionado,
emprendiendo siempre la utopía por realizar la cabal realización del hombre sobre
la faz de la tierra
5. Está
en ti
¿En dónde César Vallejo está vivo y vital? En cada uno
de nosotros. En ti. En mí. En el corazón, el alma y el ser entrañable de cada
persona en particular.
Por eso, no se trata solo de saber de un Vallejo
biográfico, que fue; sino que se trata de rescatar aquel César Vallejo que está
en ti.
Y de tu Vallejo, de que tú encuentres una manera de
actuar en que sobresalgan aquellos valores que son tu propio Vallejo. En ti y
no afuera.
Vallejo se vuelve entonces ya no un nombre propio. Ya
no solo en un sustantivo que al decirlo nos inunda el alma de vida apasionada.
Ya no solo es un adjetivo calificativo, de decir con
su nombre los valores que él encarna, sino que Vallejo es ahora un verbo para
actuar con él y transformar la realidad.
6. Es
plural
Tampoco se trata de que haya una versión única y
exacta de César Vallejo.
Y pretender que esa sea la válida, la canóniga, la
correcta e irrefutable.
Todas las versiones son válidas, así sean distintas y
hasta contrapuestas. Lo importante es que sea lo mejor que tenemos cada uno.
El nuestro entonces es un Vallejo plural. Porque
Vallejo es un verbo que abarca a todos los hombres, para salvar al hombre
individual por su opuesto dialéctico: el hombre unánime del poema Masa.
7. Es
colectivo
Vallejo vibra más y mejor cuando estamos juntos. Es
síntesis plena, total y suprema de lo que somos colectivamente.
Es un Vallejo que conjuga bien con el nosotros.
Es un Vallejo que congrega, reúne e integra. Es lo más
representativo y esencia del nosotros mismos.
Porque si vale que nos ocupemos de él es porque está
en cada uno de nosotros los seres humanos.
Vallejo sufría en representación de todo el mundo,
pero su dolor era colectivo.
Sufría por el hombre, por la humanidad, por la
redención del ser humano.
Su dolor es dolor social.
8. Praxis
y acción
Vallejo es praxis y acción y no deliquio ni
contemplación. Menos es un tema académico.
Es una consigna para actuar y cambiar el mundo. Es
Vallejo para actuar arriesgando inclusive la vida.
Es opción práctica para un país mejor. Es lucha
fragorosa contra el mal.
Ese es el César Vallejo que nos interesa, no en pasado
ni en ajeno, ni inerte ni lejano.
César Vallejo por lo contrario está vivo, pero
entusiasta, vibrante e imprescindible.
Vallejo siempre está proponiéndonos la heroicidad como
actitud y consigna. Por eso es vigente.
9. Es
homocéntrico
En quien el hombre es el centro y el cosmos. En quien el hombre es lo supremo. Incluso el hombre
dolido, sufriente y derrotado.
Defendió al hombre, pero propuso no solo ser hombres
sino hombres humanos. Y al cielo, y al ave, y a la piedra, y a todos les
propuso ser un hombrecito.
De allí que la experiencia de todo lo humano le era
propia y de su plena incumbencia. En quien nada de lo que es humano le es ajeno
ni extraño.
Su canto es canto al hombre pero no al pletórico,
sensual y hedonista, sino al hombre por su capacidad de martirio.
Vallejo es un humanista comprometido con el destino
del hombre, y quien todo lo arriesga por la justicia social.
10. Es
andino
César Vallejo es un descubrirse andino, no por algunos
rasgos o características típicas, confinadas a una geografía, sino andinos como
una manera de ser en el mundo.
Andino fue él en París.
Y ser andinos porque ello significa encarnar valores
trascendentes: por ejemplo el amor a la tierra, la ternura, el alma matinal.
Y estos son valores más que nunca para expandir sobre
el mundo globalizado que ha perdido horizontes, rumbo e ideales; como también candor,
que se ha desarraigado de la tierra al punto que la está destruyendo.
11. Es
solidario
Ser solidarios. Este quizá sea el valor más alto,
genuino y trascendente que se nos ha dado a los peruanos contener como un
privilegio.
Y que debemos asumir con un inmenso timbre de orgullo.
La solidaridad es lo que nos hace grandes, legítimos, invencibles.
Solidaridad que es nuestro escudo, nuestro estandarte
y nuestra bandera. Que hay que ostentarla e izarla en lo más alto.
Y con ella reivindicar todo lo que hemos sufrido.
Solidaridad que es la esencia del Perú eterno.
12. Es
universal
Con César Vallejo de lo que se trata es de alcanzar a
ser seres universales. ¿Con qué recursos alcanzó dicha proeza? Siendo
auténtico, coherente y veraz.
Vallejo poetiza lo particular extremo, lo marginal, lo
único y al parecer intransferible, lo minúsculo y privado, aquello que
pareciera pertenecer solo a uno y lo hace universal.
Él nos abre el camino para la universalidad. Para
proyectar los valores del mundo andino como es la solidaridad, el candor, la
ternura, el alma matinal.
Y a los hombres del mundo a reconocerse en los valores
andinos.
Y a forjar aquí y ahora la utopía de la fraternidad
que solo la cultura de nuestros ancestros lo plasmaron sobre la faz de la
tierra.
Epílogo
tenaz:
La clave para encontrar a ese Vallejo es simple:
Descúbrete futuro y un hombre de esperanza. Descúbrete un ser comprometido.
Descúbrete transformando el presente. Descúbrete un ser vivo. Descúbrete
poderoso a ti mismo. Descúbrete un ser plural. Descúbrete un ser colectivo.
Descúbrete un ser de praxis y acción. Descúbrete un ser cuyo centro sea lo
humano. Descúbrete andino, Descúbrete un ser solidario. Descúbrete un ser
universal, con César Vallejo.
Y decir con César Vallejo:
Ya va a venir el día, ponte el alma. ...
Ya va a venir el día, ponte el cuerpo.
...
Ya va a venir el día;
la mañana, el mar, el meteoro, van
en pos de tu cansancio, con banderas,
...
ya va a venir el día, ponte el sol.
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