MAVI MÁRQUEZ A.
Delegada IFLAC, Lima, Perú.
Gestora Cultural
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FOLIOS
DE LA
UTOPÍA
CLARINES
DE LA MILITANCIA
Y EL FERVOR
Danilo
Sánchez Lihón
1.
En el primer semestre del año 1915 César Vallejo ya
había culminado la redacción de su tesis para optar el grado de Bachiller en la
Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de La Libertad, y se
había fijado la hora y fecha de su sustentación para las 5 de la tarde del día
22 de septiembre de ese mismo año.
Es la víspera de la fiesta de la Primavera en Trujillo
en que se vive un clima de cordialidad, de efusión y de encanto mágico.
No tuvo que abonar la suma correspondiente porque un
año antes ganó el puesto de mejor estudiante que lo eximía del pago por el
derecho de sustentación.
Lo que nos muestra que César Vallejo era un alumno
esforzado, serio, prolijo. Es un estudiante ejemplar, responsable. Y un
trabajador de la cultura, tenaz y desvelado.
La sustentación se produjo con total puntualidad,
adquiriendo el título de Bachiller. He aquí el acta correspondiente:
El acta del examen de César Vallejo para el
Bachillerato en Filosofía y Letras está registrada en el libro de Actas de
Sustentación, con el número 194.- César A. Vallejo, Br. En Filosofía y Letras;
y a la letra dice así:
2.
En el salón de actuaciones de la universidad de La
Libertad, el día veintidós de setiembre de mil novecientos quince, reunidos
bajo la presidencia del Señor Rector don José María Checa; el jurado formado
por los doctores Eleazar Boloña, Julio F. Quevedo, Saniel Chávarri y Guillermo
E. Ramírez, procedió a recibir las pruebas académicas a don César Abraham
Vallejo para conferirle el título de Bachiller en Filosofía y Letras.
Abierta la actuación, el graduado dio lectura a una
tesis titulada "El Romanticismo en la Literatura Castellana" la que
fue objetada por los catedráticos Quevedo y Boloña; verificando enseguida la
votación que dio el siguiente resultado: 19, 20, 17, 18, 20, cuyo total dio un
promedio de dieciocho puntos cuatro quintos, por lo que fue aprobado con el
calificativo de sobresaliente.
Proclamada por el Señor Rector la calificación,
confirió a don César Abraham Vallejo el grado de Bachiller en la Facultad de
Filosofía y Letras, sentándose para constancia la presente acta, que firman los
señores miembros del jurado, de que certifico.- José María Checa, Guillermo E.
Ramírez, Julio F. Quevedo, E. Boloña, Saniel Chavarri B., Alejandro Morales
Pro-secretario.
3.
Luego de la sustentación se formó a la salida un grupo
entusiasta de amigos y compañeros de estudios de la universidad y a quienes se
suman otros compañeros del campo del arte pertenecientes a lo que Antenor
Orrego identificó como El Grupo Norte.
Y entre todos ellos enrumbaron hasta el Bar Americano
situado en la esquina del Jr. Pizarro con Orbegoso, en donde brindaron con
champán, se dijeron palabras de saludo, discursos de felicitación y declamación
espontánea de poemas.
César Vallejo mantenía una expresión cordial sin dejar
de ser melancólica, pues se cumplía exactamente un mes de la muerte de su
hermano Miguel él más cercano a él, ocurrida en Santiago de Chuco.
Pero he aquí otro detalle de enorme significación;
cuál es que al siguiente día al paso del desfile del Corso de la Primavera que
recorre las calles de la ciudad en Trujillo, este se detuvo para escuchar a
César Vallejo decir uno de sus poemas alusivos cual fue “Primaveral” en donde
alaba a la excelsa juventud y la compara con un jardín de oro.
3.
El poema fue leído ante la multitud que se detuvo a
unos pasos de la Plaza de Armas y en esta oportunidad César Vallejo lo dijo con
voz plena de emoción, desde el balcón de la casona ubicada en el Jr. Pizarro
551 ubicada frente a la Plaza de la Merced, también llamada O’Donnovan. Dicho poema fue luego publicado
en el diario “La Reforma” que dirigía Antenor Orrego.
Refiero estos hechos porque quiero sostener que la
tesis de César Vallejo es el texto más representativo de una época en la cual
él goza de la amistad de sus amigos, de la protección de su familia la misma
que no estaba totalmente cerca pero tampoco muy lejos.
Cuenta con el apoyo efectivo de su hermano Víctor
Clemente quien desde Santiago de Chuco le envía remesas con qué sostenerse. Así
como cuenta también con la presencia de su hermano Néstor Pablo con quien
estudian juntos en la misma universidad y compartían la misma habitación.
Período este en la trayectoria de la vida de César
Vallejo que debemos valorarlo como su edad de oro.
4.
Porque es su época dorada y feliz, de grandes logros,
pese a los avatares y sucesos algunos luctuosos que ocurren a su alrededor.
Esta es una época consistente y fecunda en que él pone los cimientos de su
formación, siendo una de sus manifestaciones su tesis para optar el grado de
bachiller.
Por lo que él llegó a ser, se nos revela que estos
cimientos fueron sólidos, recios y firmes. Siendo así debemos reconocer este
como un tiempo de epifanía, porque como él mismo nos señala: debemos saber
apreciar y admirar en la flor la raíz. Y esta época es una raíz en César
Vallejo.
Y qué hermoso poderla contemplar lozana, fuerte y
vigorosa. Siendo así “El romanticismo en la poesía castellana” es como signo de
esa raíz, una consigna, un emblema y un símbolo en su formación.
En donde él afirma una profesión de fe cuál es la
poesía, donde se afilia a su lengua y declara su adhesión al romanticismo.
Es su edad próvida, espléndida y radiante. Y lo
esclarezco porque casi siempre creemos que aquí en nuestro suelo y en nuestra
tierra somos seres desdichados. Pues no. Sin embargo, César Vallejo aquí lo
tuvo todo y fue feliz.
5.
Trayectoria la suya que es como un arco voltaico, con
dos polos opuestos, o como en la diapasón de una guitarra o de un laúd donde
recorre todo el espectro de los matices y de la condición humana.
Etapa distinta y opuesta por ejemplo a cómo lleva su
vida en París de los primeros años de su estancia en Europa, en donde no tiene
ni lugar dónde dormir y lo hace en el Metro, o bajo los puentes o en las bancas
de los parques en donde espera el amanecer porque no tiene casa, ni cuarto ni
un alero bajo el cual cobijarse.
En cambio en esta otra etapa lo tiene todo, el cariño
sobre todo, y que era lo que a él más le importaba. Sin embargo, como ocurre
con un genio de una personalidad arrolladora, deshace toda aquella construcción
con un solo manotazo de inconformidad y rebeldía.
En cambio, la ocasión en que presenta su tesis en
Trujillo es una época en que él podía reconocer que era dichoso, siendo ese el
espíritu que resalta de cada línea de lo escrito en esta obra, un carácter
venturoso, pletórico y feliz.
6.
Un espíritu de exaltación y plenitud, de júbilo y
homenaje a la vida hasta el límite del arrebato y lo triunfal. Además: ¿qué más
triunfo que ser profesional a esa edad, aparte de los méritos que tiene detener
por ejemplo el corso del desfile de la primavera para escucharle decir un poema
de su autoría?
O, ¿qué más triunfo que obtener casi todos los premios
de fin de año de la Universidad Nacional de La Libertad?, tanto este año como
los años anteriores, siendo el alumno más destacado de su época y el mejor que
haya tenido la universidad en todos los tiempos, según declaración de su
rector, el Dr. Orlando Velásquez Benites quien reconoce a César Vallejo como el
mejor estudiante de esa universidad desde que se fundara hace ya 200 años.
Época esta en la cual César Vallejo sustenta su tesis
en que es querido por sus amigos; amado por enamoradas rendidas y devotas,
apreciado por sus profesores, seguido por un público que lo lee ávido y que
copia a mano sus poemas en sus diarios íntimos.
Es la época romántica de César Vallejo. Y esa es la
relación que queremos dejar nítida, cuál es el de la coherencia total y plena
de su tesis con su vida, su obra y su época.
7.
Trujillo en aquel entonces es una ciudad idílica, con
toda la pujanza que un momento político estable y esclarecido le deparan ser.
Espacio y tiempo en el cual se presenta la
circunstancia de la sustentación de esta tesis y en donde lo importante es el
acierto de César Vallejo para sintonizar con su medio y con su momento.
Para involucrarse y mimetizarse con su medio ambiente.
Para encontrar tanta coincidencia y coherencia con su ser.
Su tesis El romanticismo en la poesía castellana” es
la obra inicial de César Vallejo, quien antes solo ha publicado poemas sueltos
en revistas y periódicos.
Pero esta vez es un texto completo de 53 páginas que
César Vallejo publica casi inmediatamente a su sustentación como texto
independiente que por primera vez lleva el nombre propio de su autor.
Siendo así esta es una obra fundacional, que se
imprime en los talleres de la tipografía Olaya, con el Visto Bueno del rector
de la Universidad Nacional de La Libertad el Dr. José María Checa.
Acaso, ¿no hay un significado oculto y profundo en
todo esto? ¡Por supuesto que sí!
8.
La publicación de la tesis es un signo de la voluntad
de parte de César Vallejo de hacerse un hombre público, de dar la cara, de
forjar un nombre. Hay esta vez en César Vallejo una decisión de salir a la palestra,
de guerrear, de sostener a partir de ahora una batalla.
Hay que verla esta tesis en ese sentido, como una
bandera que se iza llevando un nombre que ha llegado a ser egregio en la lengua
castellana, como un hombre de debate, de polémica y de lucha, imbuido de una fe
inquebrantable.
Es decir, no se arredra, no muestra titubeos ni es
pusilánime. Él cree en sí mismo. Publica su tesis, la reparte a sus amigos y
algunos ejemplares se venden en las librerías de la ciudad.
Donde él es un guerrero, un combatiente, como lo son
los combatientes de “España, aparta e mí este cáliz”, y como lo es su mismo
libro que lucha en el frente de guerra de la batalla del río Ebro en el frente
de Cataluña en la Guerra Civil Españolo por parte de los republicanos.
Contexto en el cual no está solo, sino que tiene a su
lado a personas que lo apoyan, en primer lugar su hermano, Víctor Clemente, que
es quien solventa la edición de la obra.
9.
Siendo así su tesis deja de ser un tema académico
acerca del cual se ocupa y que él desarrolla como una formalidad en una
sustentación convencional.
Sino que el día 22 de septiembre del año 1915,
exactamente hace 100 años, César Vallejo inaugura su carrera de escritor, su
compromiso con las artes y la cultura universal. Y que es cuando escoge su
puesto de adalid en esta guerra santa por la justicia social, por la libertad,
por la cultura y por las promesas pendiente de cumplir.
Es con esta obra que se inicia su misión de escritor;
siendo con esta tesis que mejor se representa esta etapa de su vida. Y que son
estos contenidos, este tema, este ámbito del espíritu aquel que mejor
corresponde con su personalidad.
Coincidiendo además con su circunstancia vital y con
el momento en el cual se vive y cuál es un romanticismo en el arte, la ciencia
como también en la política y la vida social en ese punto y en esa hora
histórica.
10.
Obra que no deja de ser extraordinaria por su calidad
como enfoque y como escritura y que la plasma a la edad de los 23 años, donde
muestra su dominio del idioma, su solvencia intelectual y su aplomo moral como
el futuro militante que fue y que es.
¿No hay acaso un signo aquí de madurez, de arrojo y
convicción profunda? Y él lo sabe de antemano: Hay un rasgo manifiesto de creer
en él, de saber de su valía, de anunciar a un profeta y a un redentor.
Es digno de relievar por último que esta obra inicial
guarda perfecta relación con su obra final, cual es “España aparta de mí este
cáliz”, con la cual marca una total unidad.
Hasta podríamos decir que en el trasfondo de esta
última obra está “El romanticismo en la poesía castellana”, y en toda la gesta
de la guerra civil por parte de los republicanos.
Obra esta tesis que nos da y presenta un Arco de la
alianza de coherencia con su obra final y de una vida proverbial, en donde se
iguala el mensaje en lo que es central, porque en ambas resuenan los clarines
de la militancia y del fervor.
