martes, 5 de noviembre de 2013

SEMANA FORESTAL NACIONAL - FOLIOS DE LA UTOPÍA: PRIMERO FUIMOS ÁRBOLES- POR DANILO SÁNCHEZ LIHÓN

CAPULÍ, VALLEJO Y SU TIERRA
Construcción y forja de la utopía andina
 
2013 AÑO
EVANGELIO VALLEJO DE LA SOLIDARIDAD
Y UNIVERSALIDAD DEL MUNDO ANDINO
 
NOVIEMBRE, MES DE LA GESTA
DE TÚPAC AMARU; LOS DERECHOS
DEL NIÑO; VIDA Y EJEMPLO DE
J.M. ARGUEDAS Y MANUEL SCORZA
 
*****
 
AULA CAPULÍ
SÁBADO 9 DE NOVIEMBRE
 
SANTIAGO DE CHUCO,
CAPITAL DE LA POESÍA
DEL PERÚ
 
CELEBRACIÓN
DEL ACUERDO POR UNANIMIDAD
DEL CONGRESO DE LA PEPÚBLICA
DECLARANDO A SANTIAGO DE CHUCO,
CAPITAL DE LA POESÍA DEL PERÚ
 
PROGRAMA:
 
1. BIENVENIDA A CARGO
DEL DR. WALTER VÁSQUEZ VEJARANO
EXPRESIDENTE DE LA CORTE SUPREMA
DE LA REPÚBLICA Y DEL PODER JUDICIAL
 
2. SANTIAGO DE CHUCO, TIERRA DE POETAS
Y CAPITAL DE LA POESÍA DEL PERÚ.
DANILO SÁNCHEZ LIHÓN, PRESIDENTE
DE CAPULÍ, VALLEJO Y SU TIERRA
 
3. DECLAMACIÓN DE POEMAS
DEDICADOS A SANTIAGO DE CHUCO
Y A CÉSAR VALLEJO.
TRIBUNA LIBRE
 
4. HOMENAJE
A LA CONVOCATORIA MUNDIAL
MIL POEMAS A VALLEJO HECHA
POR ALFRED ASÍS DESDE CHILE
 
SÁBADO 9 DE NOVIEMBRE, 7 PM.
CALLE 24, N° 271, URB. CORPAC
SAN ISIDRO, ESPALDA CUADRA 10
AV. JOSÉ GÁLVEZ BARRENECHEA
QUE PARTE DEL ÓVALO QUIÑONES,
POR EL MINISTERIO DEL INTERIOR
 
 
*****
 
4 al 9 DE NOVIEMBRE 2013
 
SEMANA
FORESTAL
NACIONAL
 
 
FOLIOS
DE LA
UTOPÍA
 
 
PRIMERO
FUIMOS
ÁRBOLES
 
 
 
Danilo Sánchez Lihón
 
 
1. El árbol
de lupuna
 
Con la inundación de las aguas sobre el mundo, ni un vestigio quedó de las antiguas malocas, ni de los objetos ni de los enseres. 
 
Sólo el árbol de lupuna quedó en pie en la vastedad de la selva. 
 
Su tallo endurecido por el embate de las aguas parece más fuerte. 
 
Su copa oculta entre las nubes se mueve lentamente con su fronda tupida y oscura. 
 
Desde el lugar donde se yergue se distinguen todos los confines. 
 
Desde allí se divisa la aparición de la mañana nacarada, el zumbido del mediodía. Y el aleteo de las sombras.
 
2. Otra manera
de volver
 
Cuando la luna y el sol se asomaron a contemplar la tierra, vieron la desolación que reinaba.
 
Entonces sus corazones se doblegaron por la pena. 
 
Y mucho tiempo estuvieron lamentando juntos la terrible desgracia ocurrida. 
 
Intentaron bajar pero ya no pudieron porque el cielo había perdido su inmenso tallo roído, por los comejenes y tumbado por los aguas. 
 
Su copa alejada por el viento se había distanciado para siempre de la tierra. 
 
Pensaron entonces en otra manera de volver a vivir en ella.
 
3. Es hijo del sol
y de la luna
 
Para esto el sol, coronando su cabeza con un rico plumaje y la luna envuelta entre tules y arreboles, se juntaron.
 
Y dejaron caer lágrimas que descendieron hasta las hojas del árbol de lupuna.
 
Después de temblar cristalinas lentamente se deslizaron por el interior ahuecado del tallo. 
 
Hasta llegar o la base de la planta en donde pronto apareció un nudo imperceptible.
 
Era un levísimo latido, un minúsculo sentir y significado que se alimenta con la savia, con la luz y el viento que lo roza. 
 
Ese brote es el hijo del sol y de la luna.
 
5. Se dibuja
en el árbol
 
Su cuerpo al principio es una protuberancia súbita en la corteza del árbol. 
 
Es como si fuera a salirle a aquel tronco un brote, una flor, una rama. 
 
Pasados los días se perfila nítidamente una frente cóncava, una nariz aguileña, unos pómulos salientes. 
 
En esa postura sobresalen las rodillas que las tiene un poco dobladas. 
 
La corteza, de vez en cuando, se estremece y agita impaciente. 
 
Mientras más crece, más se dibuja en el tronco del vegetal la contextura de aquel hombre; límpida e inocente, jubilosa y radiante.
 
Reúne en su ser la esplendidez del sol, la luna y las estrellas.
 
5. Se echa
a caminar
 
Hasta que sus ojos vivos y asombrados empiezan a vislumbrar hacia afuera la tierra arrasada. 
 
Cuando se estira, el árbol retumba: 
 
– ¡Netúuuuun….. Batáaan!
 
– ¡Netúuuuun..... Batáaan! 
 
Al cabo de un tiempo, formado ya totalmente, se desprende trabajosamente de la corteza que lo envuelve.
 
Y se echa a caminar por el llano inconmensurable. 
 
Allí reina la soledad y el silencio. 
 
El río vuelto a sus orillas se desliza tranquilo, sembrado de arenisca y guijarros coloridos.
 
6. Voy
a crearlos
 
Netún Batán recorrió aquel mundo devastado. Orilló el Ucayali, sus afluentes y lagunas.
Transpuso bajíos y colinas, con el corazón oprimido de angustia al no encontrar más que desolación y muerte.
 
Acomodó las yerbas que crecen y enderezó los árboles caídos. Y otros, con sus manos los sembraba.
 
La tierra y las aguas aún eran incontenibles.
 
Fue en este deambular que concibió en su imaginación engendrar los animales. 
 
Harto de soñar un día se dijo asimismo: 
 
    Se mueven tanto que voy a crearlos. 
 
Frotándose los pies empezó a modelar los animales que hoy se arrastran por el suelo.
 
7. Miraban
a todos lados
 
Así se desprendían los tigrillos de ojos entrecerrados.
 
Así, titubeaban al caminar los sajinos, que hoy hocican lo arena.
 
Así se erigían sobre sus patas trémulas los venados, de mirada tibia y asustada.
 
Allí recién adivinaban su silbo las culebras, de fintas rojas, amarillas y verdes. 
 
Todos salían con pasos tambaleantes, con los ojos Iluminados por la inmensa luz del sol, tentando la tierra recién oreada. 
 
Al principio miraban a todos lados cegados por la luz relumbrante, y luego corrían a internarse entre los matorrales. 
 
Las tortugas fueron las últimas en echarse a andar, a fin de que nadie las atropelle en su carrera.
 
8. Los
de aire
 
Terminando con ellos Netún Batán empezó a crear los animales que surcan los aires. 
 
Frotándose los lóbulos de las manos desplegaron sus alas paujiles y palomas, salieron volando loros y gavilanes. Revolotearon mariposas y tábanos. En la oscuridad suspendieron sus luces las luciérnagas. 
 
Al principio ninguno volaba más allá del círculo que hace la voz cuando se habla. Y regresaban asustados. Netún Batán alzándolos soplaba debajo de sus alas y les ordenaba:
Tú, volarás de rama en rama. 
 
Tú, lo que alcanza una pedrada. 
 
Tú, la distancia que hace el arco de la flecha cuando se dispara. 
 
Tú, bandearás de un solo vuelo el río Ucayali. 
 
Tú, volarás lejos, más allá de lo que alcanza la mirada.
 
9. Así nos
cuentan
 
Así nos narran nuestros abuelos cuando les pedimos que nos hablen de nuestro origen y de la vida de nuestros antepasados. 
 
Nos explican que así sucedió en los primeros tiempos, por eso veneramos a los árboles, porque a partir de ellos venimos a la tierra.
 
Son los árboles nuestros primeros padres, nuestros antiquísimos abuelos, y es en ellos donde encontramos la sabiduría de la vida cuando sabemos escucharlos.
 
Porque no solo conocen el dolor de este mundo sino también el esplendor del sol, la luna y las estrellas.  
 
Son un vínculo, un trance y una puerta para llegar hacia otros universos, desde que al morir nos convertimos en raíces, tallos, hojas.
 
Y ascendemos otra vez, en un deambular eterno.
 
*****
 
El texto anterior puede ser
reproducido, publicado y difundido
citando autor y fuente
 
Teléfonos: 420-3343 y 420-3860
 
dsanchezlihon@aol.com
danilosanchezlihon@gmail.com
 
Obras de Danilo Sánchez Lihón las puede solicitar a:
Editorial San Marcos: ventas@editorialsanmarcos.com
Editorial Bruño, Perú: ventas@brunoeditorial.com.pe
Instituto del Libro y la Lectura: inlecperu@hotmail.com
Ediciones Altazor: edicionesaltazo@yahoo.es
 
*****
 
ADHESIÓN
Y PARTICIPACIÓN
 
PRESENTACIÓN
DEL LIBRO
 
TESTIMONIO PARA MICAELA
DE JULIO YOVERA
 
COMENTARIOS:
 
JORGE ALIAGA
RICARDO DOLORIER
VIVIANA GOMES
DANILO SÁNCHEZ LIHON
 
CONDUCCIÓN:
ERNESTO TOLEDO BRUCKMANN
 
CASA DE LA LITERATURA PERUANA
MIÉRCOLES 13 DE NOVIEMBRE. 6. 30 P.M.
 
*****
 
CONVOCATORIA
 
XV ENCUENTRO INTERNACIONAL
CAPULÍ, VALLEJO Y SU TIERRA
TELÚRICA DE MAYO, 2014
 
LIMA:
MARTES 20
Y MIÉRCOLES 21
 
TRUJILLO
JUEVES 22
 
SANTIAGO DE CHUCO
VIERNES 23
SÁBADO 24
Y DOMINGO 25
DEL MES DE MAYO
 
*****
 
PÁGINA WEB
HACER CLIC AQUÍ:
 
http://spanport.byu.edu/faculty/GarciaM/new/CapuliXV.htm
 
*****
 
Teléfonos Capulí:
420-3343 y 420-3860
99773-9575
 
capulivallejoysutierra@gmail.com
dsanchezlihon@aol.com