LAS SEMILLAS DEL AMANECER
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Nos complacemos en comunicar que ha salido a luz el poemario para niños y jóvenes cuyo título es “Las semillas del amanecer”, una publicación de Elmer Neyra, quien coincidiendo con la apertura del año escolar en el Perú nos hace entrega de este impulso poético.
Entre el relato y la poesía que se expresan y orientan hacia el mundo infantil, la segunda tiene una especial relevancia, -nos dice en la presentación, Néstor Espinoza- porque es de más difícil elaboración, y debe ser más agradable, sintética y no complicada, para captar el interés y el aprecio del niño, más aún que ahora la tecnología informática ocupa gran parte de su mente.
Pero, aunque resulta paradójico, precisamente, es por esta situación de la niñez y contra ella que hay que seguir haciendo literatura infantil, -continúa Néstor- para salvar a la humanidad de su deshumanización en su último reducto como es la niñez.
Entre el relato y la poesía que se expresan y orientan hacia el mundo infantil, la segunda tiene una especial relevancia, -nos dice en la presentación, Néstor Espinoza- porque es de más difícil elaboración, y debe ser más agradable, sintética y no complicada, para captar el interés y el aprecio del niño, más aún que ahora la tecnología informática ocupa gran parte de su mente.
Pero, aunque resulta paradójico, precisamente, es por esta situación de la niñez y contra ella que hay que seguir haciendo literatura infantil, -continúa Néstor- para salvar a la humanidad de su deshumanización en su último reducto como es la niñez.
Sólo en estos términos, resulta encomiable el esfuerzo de Elmer Neyra de ofrecer un volumen de poesías infantiles y juveniles tanto suyas y unas seis de inspiración ajena.
La temática del libro, como toda obra de su género expresa las vivencias del niño en los diferentes aspectos de su vida. Por lo tanto están las figuras del padre, la madre, el maestro y los elementos de su entorno físico y cultural, en este caso particularmente andinos.
La temática del libro, como toda obra de su género expresa las vivencias del niño en los diferentes aspectos de su vida. Por lo tanto están las figuras del padre, la madre, el maestro y los elementos de su entorno físico y cultural, en este caso particularmente andinos.
Insertamos la poesía "Pelean como espadas":
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Dos brazos se agitan empuñando
plumas como relámpagos y espadas.
Uno era la del ajiseco y la otra, del cenizo.
Pelean sin tregua, con sol brillante;
tejen golpes, los picos siempre arriba.
Alguno moriría, y el otro cantaría
con un broche de sol en su penacho.
Y un hayku que aparece en la solapa posterior:
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Sierra plateada:
altar de rima rimas
alza tu poncho.
Los editores
